¿Hacia una dictadura constitucional?

La actitud de los constituyentistas está saturada de arrogancia. Se sienten sobrados, omnipotentes, con facultad ilimitada para hacer lo que les venga en gana. En sus discursos abundan expresiones dictatoriales, amenazantes. Actúan como los intocables reyezuelos de la comarca, sin oponentes, sin críticas, sin admitir sugerencia alguna. Son los amos del destino de Venezuela. Son "guapos y apoyaos".

Me llamó la atención la avasallante expresividad del abogado constitucionalista Hermann Escarrá (opositor acérrimo del gobierno de Chávez y Maduro antes de la muerte de su hermano Carlos Escarrá) durante su intervención en la sesión de la ANC, el martes 02 de octubre. El acompasado discurso entre su gestualidad, sus palabras y el contenido, fue en la práctica, una declaración del fin de los derechos políticos en Venezuela, una estocada mortal al derecho a la protesta y la disidencia hacia la gestión de gobierno de Nicolás Maduro. Un intimidante mensaje "a los traidores de la patria".

Sin lugar a dudas, los venezolanos estamos ante una institucionalidad cada vez más mediatizada, totalmente secuestrada por el gobierno. Una institucionalidad tristemente célebre por su falta de autonomía. Una institucionalidad que solo opera a través de los hilos conductores de los poderosos del régimen.

¿A quiénes se considera traidores de la patria? ¿A los adversarios y disidentes de este gobierno? A los que se atreven a satirizar los desatinos y la prepotencia de los poderosos?

Maquiavelo, Stalin y Hitler quedan empequeñecidos ante el desenfreno de esta nueva oligarquía política y económica parásita que se aferró al poder y pretende quedarse haciendo causa con el principio maquiavélico: "el fin justifica los medios"

La actual constitución, otrora la mejor del mundo, en tan poco tiempo se ha transformado en un instrumento inútil para el logro de objetivos que solo satisfacen las apetencias de una poderosa élite. Es un fósil que conviene reemplazar lo antes posible. Eso justifica una nueva constitución. Por las buenas o por las malas se quieren perpetuar en el mando. Amanecerá y veremos.

 



Esta nota ha sido leída aproximadamente 1682 veces.



Orlando Balbás

Prof. en Ciencias Sociales. Magister en gerencia educativa. Jubilado del MPPE.

 orlandobalbas27@gmail.com      @orlandobalbas

Visite el perfil de Orlando Balbás para ver el listado de todos sus artículos en Aporrea.


Noticias Recientes: