El modo de producción Capitalista surgido en el siglo XVI ha transitado por varias etapas en su consolidacion. Á partir del siglo XX se monta sobre la fase imperialista en su expresión coorporativa cómo base de su dominacion á escala planetaria, siempre obedeciendo á su logica de maximizar las ganacias á costa sí es preciso de la destruccion de la especie humana.
No podemos desestimar la gran victoria del capitalismo frente al experimento más significativo del mundo como fue la revolución Rusa más de 70 años de avances cientificos, elevados indices de bienestar social en materia de salud y alimentacion, educación y otros qué la población disfruto durante su vigencia á pesar de los errores qué se puedan haber cometido. Fukuyama y su fin de la historia así cómo el derrumbe del muro de Berlin, ha sido la vitrina más degradente qué el capitalismo ha podido exibir para decir con propiedad el fracazo del socialismo cómo valor humano.
China y Cuba han demostrado á lo largo de la historia qué el socialismo es para la vida, qué es capaz de procurar desarrollo humano sin invadir, derrocar gobiernos legitimos y matar inocentes en nombre de la libertad.
Pero qué pasa en Venezuela, dónde á partir de 1999 se decidio un rumbo distinto, se decreto una revolución con carácter socialista qué elevo las condiciones de vida de las mayorias desposeidas á través de salud, educación, alimentacion de calidad, acceso al agua potable, trabajo, vivienda. Hoy Venezuela exibe las peores cifras en materia de lo qué fueron nuestras fortalezas, desnutricion, mortalidad infantil, desempleo, corrupcion, destruccion del aparato productivo; son ahora nuestras valores basicos. Quienes aún no conocen á fondo la teoría Marxista cómo herramienta de lucha de la clase trabajadora y base politica para la contruccion del socialismo científico, continuan degradandolo y destruyendolo.
El ensayo socialista en Venezuela se ha convertido en la peor experiencia política antes vivida, 200 años no bastaran para levantar la dignidad de está forma de vida, un escritor una vez dijo qué primero se roban las palabras y luego se construyen los significados exactamente es la realidad qué transitamos. Los qué defendemos y creemos en este modo de producción no podemos menos qué callar y aceptar la feroz crítica qué se pueda inferir por más qué se explique de manera científica y practica. No hay argumento alguno qué convensa hasta el más analfabeta, no hay manera de remontar un argumento contundente en favor del socialismo. Y por todo ello desde mis sentimientos y compromiso con la causa revolucionaria Marxista Leninista afirmo...ya basta esto no es un Socialismo!
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