Se metía a la gente en la cárcel para que los precios pudieran ser libres.
Eduardo Galeano.
La amenaza para los sistemas y servicios espaciales de EE.UU. aumentará a medida que los adversarios potenciales persiguen sus capacidades contra espaciales destructivos. La rápida evolución de la tecnología espacial comercial apoyará la búsqueda mundial de un mayor espacio para que puedan reducir la brecha tecnología con los EE.UU.
El discurso político en la mayoría de las democracias occidentales estaba ya saturado de referencias a muros de deuda y a la posibilidad de un colapso económico inminente, así como de peticiones de recortes más drásticos del gasto público y de proceso de privatización más ambiciosos, y los "Think tanks" se situaban a la vanguardia de toda aquella ofensiva, anunciando crisis por todas partes. En las instituciones financiera más poderosas de Washington, sin embargo, existía le voluntad no sólo de crear una sensación de crisis aparente a través delos medios de comunicación, sino de tomar medidas concretas para generar crisis auténticas. Dos años después de los comentarios de Williamson sobre la idoneidad de "avivar" las, Michael Bruno, economista principal del Banco Mundial en el ámbito de la economía del desarrollo, se hizo eco en público de esa misma línea de argumentación sin atraer tampoco la intención ni el escrutinio de los medios. La idea de que una crisis suficientemente amplia podría conseguir impresionar hasta tal punto a los decisores políticos de un país que éstos se decieran finalmente por instaurar reformas destinadas a potenciar la productividad.
Durante un breve período pareció que el movimiento neoliberal no podría desentenderse de los crímenes que había cometido en el Cono Sur y que éstos le desacreditarían por completo antes que pudiera expandir su primer laboratorio. El columnista de New York Times Anthony Lewis formuló una pregunta tan sencilla como incendiaria: "Si la teoría económica pura de Chicago sólo se puede poner en práctica en Chile mediante el recurso a la represión, ¿tienen sus autores algún tipo de responsabilidad por ello?"
La primera aventura de los Chicago Boys en la década de 1970 debió haber servido de aviso a la humanidad: sus ideas eran peligrosas. Al no hacer responsable a la ideología de los crímenes cometidos en su primer laboratorio, se dio inmunidad a esta subcultura de ideólogos impenitentes y se les liberó para que recorrieran el mundo en busca de su próxima conquista. Hoy vivimos de nuevo en una era de masacres corporativas, con países que son víctimas de una tremenda violencia militar combinada con intentos de rehacerlos como una economía de "libre mercado" modélicas; vemos cómo las desapariciones y las torturas han vuelto con mayor intensidad que nunca. Y también ahora parece que no se sepa ver ninguna relación entre el objetivo de conseguir crear nuevos mercados libres y la necesidad de utilizar la violencia para lograrlo.
Los estudiantes de la Universidad de Chile se preocupan tanto al saber de la colaboración de sus profesores con la Junta militar que exigieron una investigación académica. Algunos profesores les apoyaron, entre ellos el economista austriaco Gerhard Tintner, que había huido del fascismo en Europa y llegado a Estados Unidos en la década de1950. Tintner comparó Chile bajo de Pinochet con la Alemania bajo los nazis y dibujó un paralelismo entre el apoyo de Friedman a Pinochet y el de los tecnócratas que colaboraron con el Tercer Reich.
Un año más tarde sucedió algo más que definió los parámetros del debate sobre el Cono Sur: Amnistía Internacional ganó el premio Nobel de la Paz, en buena parte por su valerosa cruzada para poner al descubierto los abusos a los derechos humanos cometidos en Chile y Argentina.
El dilema se remonta al nacimiento del moderno movimiento de defensa de los derechos humanos, con la adopción en 1948 por Naciones Unidas de la Declaración Universal Humanos. Tan pronto se escribió, ese documento se convirtió en un ariete partidista utilizado por ambos bandos de la Guerra Fría para acusar al otro de ser el próximo Hitler. (Trump) En 1967, investigaciones periodísticas desvelaron que la Comisión Internacional de Juristas, el grupo más importante que investiga las violaciones soviéticas de los derechos humanos, no era el árbitro imparcial que proclamaba ser, sino que recibía financiación secreta de la CIA.
Todos estos ejemplos de colaboración popular en la reconstrucción de un territorio afectado por la guerra, los encareciendo de los insumos de alimentación, o el desastre, siguen un mismo hilo conductor: el pueblo afirma que no sólo se trata de reconstruir sus edificaciones, sino también de curar sus heridas psíquicas, su trauma personal. La labor de reconstrucción debe realizarse desde las propias comunidades, tanto como sea posible. Dejad que el pueblo se responsabilicen por su bien vivir.
Los amantes del poder absoluto, los viles secuaces de la autoridad arbitraria inclinarán con sus cabezas orgullosas bajo el nivel de la igualdad real; su vista corta penetrará difícilmente en el próximo porvenir de la felicidad común. Tomasella: "Creo que la verdad y la justicia triunfarán al final. Llevará generaciones. Si debo morir en esta lucha, que así sea. Pero un día triunfaremos. Mientras tanto, sé quién es el enemigo, y el enemigo también sabe quién soy yo".
¡La Lucha sigue!