He tenido la oportunidad vital de haber vivido en la fecha originaria, el 23 de enero de 1958. Cambio de épocas y actores, ahora escribo sobre la realidad presente que vive el país, cuando un personaje de nombre Juan Guaidó, absolutamente desconocido por el pueblo venezolano, decide autoproclamarse Presidente de Venezuela y juramentarse, ante Donald Trump vía twiter, quien lo reconoció inmediatamente como Presidente Interino de Venezuela en la concreción de un golpe de estado.

Aparte de no disponer del apoyo de la Fuerza Armada Militar Bolivariana, tampoco se juramentó ante la Asamblea Nacional, como presidente de la república por los treinta días que manda la Constitución, de hecho a los fines de cumplir los extremos del art. 233. Ni siquiera lo hizo ante la directiva de la Asamblea Nacional, pues el primer vice-presidente Edgar Zambrano (AD) y el segundo vice-presidente Stalin González se apartaron de él al momento de hacerlo en solitario, acaso cuidándose ellos de no cometer el delito infraganti de traición a la patria.

Por eso esta juramentación no tiene acta.

Venezuela ha sido intervenida por Estados Unidos. Para quienes aún no lo creen. A tal efecto a puesto un pie en esta tierra con Juan Guaidó, acaso en función de mercenario o de contratista militar al servicio de los Estados Unidos de América. Ya vendrán sus tropas.

Por tanto, Trump le puso fecha de inicio a su guerra contra Venezuela, acaso contra Latinoamérica… Por eso trata de presidente interino a Guaidó, esclavo de él.

Por su parte, la Unión Europea en apoyo a Trump, da un insólito ultimátum a Venezuela de ocho días que ya están corriendo a partir de hoy 28 de enero de 2019, para que se realicen elecciones presidenciales.

Existe un hilo histórico en ambos 23 de enero, LA DEMOCRACIA y los golpes de estado. De hecho, el golpe de estado que derribó al dictador Marcos Pérez Jiménez, fue iniciado por un militar, el Coronel Hugo Trejo que se insurreccionó el 1 de enero 1958 en la ciudad de Maracay y una rebelión civil 21 días después, hizo que el dictador huyera de Venezuela la madrugada del 23 de enero de 1958. Ese mismo hilo conductor se conecta con el golpe militar dado en octubre de 1945 contra el Presidente Isaías Medina Angarita.

Desde la antigua Grecia hasta hoy, han existido varios tipos de democracia, el modelo más reciente ha logrado predominar en los países del mundo occidental, luego de la Segunda Guerra Mundial (1945) y el fin de la Guerra Fría en 1996, impulsado por la democracia representativa estadounidense; pero se trata de una DEMOCRACIA IMPERIAL, CAPITALISTA, SURGIDA A PARTIR DEL DESARROLLO DE LA DOCTRINA MONROE, creada en 1823.

El 23 de enero del 58, hubo un cambio de paradigma político en Venezuela, nació para los venezolanos un modelo de aceptación pública de los partidos, los sindicatos, las ligas campesinas, de los centros de estudiantes universitarios y liceístas, un ejercicio de la libre expresión del pensamiento, cogobierno de docentes y estudiantes universitarios, entre otras aperturas, proceso tutelado férreamente por Estados Unidos, en razón a sus grandes intereses petroleros y mineros y en la agudización de la Guerra Fría.

Fue un despertar parecido al que hubo 22 años antes, en 1936, a raíz de la muerte del dictador Juan Vicente Gómez, pero aquel difícil y lento camino de apertura hacia la democracia fue truncado con el derrocamiento el 18 de octubre de 1945, del presidente legítimo Isaías Medina Angarita, golpe articulado por el presidente Harry Truman de Estados Unidos, furioso anticomunista que objetó la legalización del Partido Comunista de Venezuela en septiembre de 1945, al admitir que los comunistas venezolanos habían dirigido la Gran Huelga Petrolera de 1936 que afectó los intereses USA y habían infiltrado al gobierno del General Medina.

Habilidosamente, dos personajes de la política venezolana, Rómulo Betancourt y Raúl Leoni, denuncian en enero de 1945, en entrevista con el Vice-presidente Truman, las supuestas inclinaciones pro-comunistas de Medina y obtienen el apoyo de quien tomaría posesión de la presidencia estadounidense a la muerte de Franklin D. Roosevelt en abril de 1945.

Truman da luz verde a la conspiración militar a través de su embajador en Caracas, para sensibilizar a un movimiento de jóvenes oficiales de una logia castrense, la Unión Patriótica Militar liderizada por el entonces Teniente Coronel Marcos Pérez Jiménez, oficial de artillería con estrecho contacto con la Misión Militar norteamericana, instalada en Venezuela para instalar equipos de combate y asesorar la defensa marítima de los puertos venezolanos ante incursiones submarinas de los Ubot de la Alemania nazi durante la II Guerra Mundial.

El gobierno norteamericano es el primero en reconocer la Junta de Gobierno presidida por Rómulo Betancourt y el partido Acción Democrática y de los militares: Mayor Carlos Delgado Chalbaud y Capitán Mario Vargas, quienes asumen los ministerios de Defensa y Fomento respectivamente.

A diferencia del golpe del 1945, los militares hoy se encuentran ausentes del golpe de 2019

Pérez Jiménez controló desde 1944, el incipiente desarrollo del componente de guerra y marina, disuelto prácticamente con la muerte de Gómez, por la pérdida de liderazgo del generalato gomecista. Lo que le permite con la oficialidad joven, dominar los mandos medios y la escuela de cadetes y dirigirlas a trastienda, pero subordinando su mando a las empresas petroleras y mineras norteamericanas, al margen del desenvolvimiento civil, del denominado "trienio adeco 45-48", incluido el golpe contra el presidente Rómulo Gallegos y el magnicidio del coronel Carlos Delgado Chalbaud en 1950, para abrirse paso a la presidencia de la república en diciembre de 1952, en un golpe militar continuado.

Con el derrocamiento del dictador el 23 de enero de 1958, se instaló durante cuarenta años un sistema democrático de representación por voto popular. Régimen político dominado por el partido Acción Democrática, en menor grado Copei. Ha debido ser a tres partidos, pero muy temprano Unión Republicana Democrática URD (el tercer partido), renunció al pacto de Punto Fijo, al discrepar con el gobierno norteamericano en la OEA, el canciller urredista Ignacio Luis Arcaya "Canciller de la Dignidad" en la crisis cubano-norteamericana del año 1962.

Cuarenta años de entrega servil a Estados Unidos, por parte de la oligarquía y la partidocracia.

Cuatro hechos históricos perturbaron los planes norteamericanos sobre Venezuela:

1. La nada democrática "Lucha Armada de los 60", de 1960 a 1964. El derrotado alzamiento guerrillero del Partido Comunista de Venezuela y del Movimiento de Izquierda Revolucionaria, y dos golpes militares frustrados y descoordinados, "El Carupanazo" (4 de mayo de 1962) y "El Porteñazo" (12 de junio de 1962), estos los más importantes, aunque hubo otros cruentos de menor incidencia, "El Barcelonazo" y el "Alzamiento del Destacamento 99 de la Guardia Nacional en La Guaira", con éste último, unos doscientos jóvenes estudiantes fueron castigados a pagar tres meses de cárcel en las Colonias Móviles de El Dorado, por decreto del presidente Rómulo Betancourt. En términos económicos, Betancourt inicia el endeudamiento externo de Venezuela, al decretar que las trasnacionales de la industria petrolera y minera declararan sus activos en dólares a los fines del pago de las indemnizaciones que debería pagar el país, con el vencimiento de las concesiones petroleras otorgadas por el dictador Juan Vicente Gómez en el año 1925, a Estados Unidos, Gran Bretaña y Holanda.

2. El "Caracazo" del 28 de febrero de 1989, estallido popular espontáneo, sin dirección política, reprimida con furia por el segundo gobierno adeco de Carlos Andrés Pérez. Se estima en tres mil las personas asesinadas en las calles de Caracas por el ejército, en clara respuesta para imponer con un baño de sangre un paquete económico de carácter neo liberal, decretado a Venezuela por Estados Unidos, a través del Fondo Monetario Internacional. Pretexto; ante la crisis de la deuda externa acumulada y por unos 30.000 millones de dólares de los gobiernos adecos y copeyanos. ¿Sáben algo? En el año 1975, cuando Carlos Andrés Pérez en su primer gobierno decretó la nacionalización petrolera, indemnizó los activos de las siete industrias trasnacionales, con el primer gran endeudamiento de siete mil millones de dólares otorgado por la banca internacional a través del Fondo Monetario Internacional.

3. El "4-F" del 4 de febrero de 1992, pronunciamiento militar masivo de la oficialidad joven de las Fuerzas Armadas Nacionales, bajo el comando del Teniente Coronel Hugo Chávez Frías, hombre desconocido en Venezuela y el mundo, pero que en mensaje de 54 segundos a la nación, en especie de cadena nacional, asume un electrizante carisma ante el pueblo venezolano que lo lleva a la presidencia en las elecciones del 6 de diciembre de 1998. Para ese momento, la deuda externa venezolana se había multiplicado por dos y subido a 60.000 millones de dólares.

4. El 6 de diciembre de 1998, el pueblo venezolano, decidió vivir en una democracia bolivariana y socialista, promovida y diseñada en una Constitución consultada y aprobada en consulta popular, por obra del Comandante Chávez. Constitución a prueba de golpes norteamericanos. Por eso Venezuela los ha derrotado en este mes del GOLPE en la OEA y la ONU y aquí en 23 de 25 elecciones.

Hoy el pueblo venezolano va a una nueva batalla por la independencia…el mundo occidental desarrollado nos ha declarado la guerra de destrucción, más prefiero mi libertad peligrosa que una esclavitud tranquila. INDEPENDENCIA Y PATRIA SOCIALISTA…VIVIREMOS Y VENCEREMOS!!