Al incentivar la participación de organizaciones políticas por decisión del CNE desde el 2018 a solicitud de la oposición, para el 6 de diciembre 2020 elecciones parlamentarias se han incorporado más de cien grupos organizados incluyendo negativistas que se abstuvieron tercamente en algunas citas pasadas, y que ahora al inscribirse confiesan que les perjudicó ante la opinión pública, la no asistencia.

Disminuidas por ausencia de votos puesto que no participaron, el CNE ha dado cabida a cuantos deseen hacerlo. La rectora D´Amelio afirmó que 107 organizaciones entre políticas e indígenas, tienen autorización legal para la cita comicial, que culminará un año signado por la pandemia. En los ocho meses transcurridos se han efectuado más de 20 comicios en el mundo, los más recientes con medidas de bioseguridad.

El registro electoral permanente venezolano, que da fe de la intención de voto muy acendrada en nuestra población, la misma se mantiene en medio de la confusión malintencionada de violentos guarimberos, controlados y en paz relativa. El llamado al REP acepta como normal que en los prolegómenos ocurren cambios de nombres mal anotados, y se corrigen anormalidades menores que en 25 comicios bolivarianos anteriores no han sido impedimento.

Interesante que algunos siempre fastidiosos que registraban el registro (no es redundancia), no buscan obstáculos y decentemente van al CNE a las auditorías. Cierto es que sus voceros cambian al salir y ser entrevistados por medios de comunicación abiertamente opositores, los que esta vez descaradamente "a lo Trump-Bolsonaro", han minimizado la cobertura a las actividades del árbitro, el CNE.

Quieren dar la impresión que por hacerlo únicamente en profusión noticiosa canales de TV oficiales, es porque se prestan a un presunto "fraude", como nunca tienen pruebas certeras sufren endemia, no pandemia, endemia de pésimo comportamiento al focalizar en Venezuela protestas de situaciones inexistentes.

Evidentemente patética la decepción que sufre el campo contrarrevolucionario, intentan disminuir comunicacionalmente la realidad electoral, y en lugar de informarle a sus lectores, oyentes y televidentes todas las medidas de bio seguridad dispuestas por el CNE para votantes y acompañantes, desinforman con asombrosa naturalidad, indicando presunta falta de seguridad a sus periodistas.

No habrá aglomeraciones al momento del voto, y si las hay para ello las autoridades han sido entrenadas en la forma de resguardar a los electores con obligaciones de distancia entre votantes, tapabocas o nasobuco, e impedir que desestabilizadores pagados por USA, lo que se ha descubierto internacionalmente, saboteen el acto comicial de Diciembre.

Los rectores y otros funcionarios del CNE han estado presentes este año en varias elecciones en el mundo, y los ciudadanos de "chispa venezolana", han comprobado que antes los medios colaboraban en llamamientos a la colectividad y se torna sospechoso que en esta ocasión ni siquiera recomienden procedimientos y acción para el acto de votación.

Desestime algunas redes de la ignominia social desfachatada, dan cabida a falsos positivos, fake news y al ser descubiertos disimulan el ridículo y el daño cometido por influencers, comportándose guapetones que para sostener sus errores te muestran el revólver al cinto, o la navaja fungiendo de limpia uñas, amenazas implícitas.

Hago esta opinión para el domingo 6 de Agosto, a tres meses exactos de las parlamentarias, domingo 6-12-2020, y es preciso tomar en consideración que han existido siempre normas que no permiten desestimular el voto, hacerlo es ir contra la propia democracia alentando desconfianza presencial mediante engaños y mentiras. No se deje invadir ni manipular el ánimo electoral, sea usted mismo.

Cuidado con los terroristas que destruyeron material del CNE en un incendio provocado. Las investigaciones son silenciadas por medios disimulócratas, hay material nuevo y confiable. Elegiremos entre más de catorce mil cuatrocientos aspirantes, 277 diputados a la Asamblea Nacional, garantizada la votación por 15 auditorías como en ningún otro país, que resguardan el total de sufragios.