Existe un grupo de compatriotas que propone se le otorguen sendas condecoraciones de la Orden de El Libertador a los cinco cubanos presos en Florida, acusados de espionaje contra Estados Unidos. En Cuba, desde luego, los consideran héroes, apreciación que comparto. Sin embargo me parece un tanto inadecuado solicitar que les impongan la máxima condecoración venezolana por actos que, si bien muy loables, no guardan relación alguna con nuestro país.
De iniciarse una tradición semejante entonces deberíamos otorgarle la mencionada Orden, postmortem, a la joven activista estadounidense Rachel Corrie, aplastada deliberadamente por un tractor israelí, durante una protesta pacifista en aquella región. Ello por no hablar de los presos anónimos en las cárceles de Guantánamo y otros casos semejantes.
Por su parte el economista venezolano Orlando Ochoa Terán le hace una rogatoria pública a las autoridades estadounidenses para que enjuicien, condenen y encarcelen a la abogada Eva Golinger como traidora a la patria, o sea, a la patria que él admira y por cuyo sistema neoliberal se debate y desvive, ergo los Estados Unidos de América, así denominado por los pitiyanquis.
Lamentablemente conozco poco acerca de las medallas que otorga el gobierno gringo. Sé que la “Congretional Medal of Honor” constituye el máximo premio al valor, otorgada exclusivamente por actos de heroísmo en combate, además el “Corazón Púrpura” (Purple Heart) es una medalla que reciben los heridos en acciones bélicas. Aparte de las mencionadas ignoro si habrá alguna condecoración que se conceda por actos heroicos en la esfera civil en defensa del prestigio y buen nombre del país que más manda frente a los más pobres y desarmados.
En ese caso no dudo que podría surgir algún grupo de ciudadanos gringos, así sean de origen latino, mayameros de la Calle Ocho o ex combatientes de Bahía de los Cochinos, solicitando que se le imponga una condecoración patriótica al economista Orlando Ochoa y a otros venezolanos que luchan a favor de los intereses estadounidenses, aún cuando vayan contra la conveniencia de su propia patria.
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