Quiero empezar este artículo con un ya conocido título de libro pero a mi manera: Cómo llegar a General en Jefe y convertirse en un Pendejo Lacayo. Por algo, Chávez como simple Teniente Coronel es mas que un General en Jefe, es un hombre de palabras cumplidas. Es el principal jefe, no por obstentar la posición de presidente, sino por su capacidad, por su liderazgo, por su creatividad. Claro, que ha tenido muchas fallas, claro que ha sido sincero en reconocer sus errores. Pero también, ha mantenido la gallardía, la honestidad, la sinceridad de admitir con su respectivo cambio, aprendizaje y evolución progresiva, firme y positiva, tanto para él como figura principal de un modelo de cambios y revoluciones como para su pueblo. Al César lo que es del César, y a ti Raúl, al Lacayo lo que es del Lacayo. Nunca pensé, que después de llegar a General en Jefe, tu actitud fuese la del mismo torpe, pendejo y estúpido escuálido oposicionista.
De todos los funcionarios que han salido del gobierno, tú eres el más hecho leña, no en balde por pendejo sino por lacayo. Otros, se han ido callados, y si, emiten opiniones, las lanzan con ciertas imparcialidad, objetividad y responsabilidad, el resto de traidores están recibiendo el pago de nuestro pueblo, que no es mas que el rechazo, el olvido y el distanciamiento de sus antiguos compañeros de lucha. Pero tu, “hombre de confianza” de un proceso, el primer secretario privado del presidente, su mano derecha por muchos años. De la noche a la mañana, saltas del lado de la lucha por la patria al barranco de la mierda opositora. Debe ser que aquel dinero que se te ofrecía en pleno cargo de ministro ahora lo estas recibiendo? Todo es posible con tu actitud. No sorprenderías a nadie.
Por otra parte, debo preguntarte si estás molesto porque Chávez descartó tus planes de aprobar el proyecto del Tren magnético, de tu cargo como presidente del mismo proyecto, o el cargo de Ministro Popular para Relaciones Interiores y Justicia. ¿O será que quieres pargarle los estudios a tus hijos en el exterior? ¿Será qué quieres mas billetes, o conseguirle la visa por esa vía? Como quieras es una infamia, es una vulgar bajeza por la posición y el papel que jugaste por mas de nueve años al lado de Chavez. Hoy muchos están comprendiendo mejor tu discurso de pase de retiro. Te prometo, que si algún día te veo por aquí, en Nueva York de “líder” antichavista, te aseguro que buscaré la manera de hacerte conocer como guarimbero y pegar pancartas por donde te quieras desplazar, como la pava que pretendes lanzar a la revolución. Para que comprendas como se debe tratar al general traidor, además por pendejo y lacayo. Desde hoy te incluiré en mi trabajo de: Los generales del miedo.
Chávez, a si como existe en el protocolo militar el ascenso post mortem, tambien debe existir la degradación post retiro. Los soles de generales los Deben portar los libertadores y hombres de patria, de pueblo por su defensa y entrega a la libertad y a la defensa del pueblo. Pero jamás a los traidores de los procesos de cambios, a los lacayistas por naturaleza.
Miguel_Agostini@msn.com
