A riesgo de ser llamado aguafiestas, jodedor o contrarrevolucionario, quiero elevar mi voz de protesta ante estos Foros Mundiales que se vienen celebrando en la capital y en los que salen excluidos, precisamente los mismos excluidos de siempre.
Estuvo del carajo el discurso de ayer del Comandante en la apertura del Foro Mundial de Mujeres. Deja muy clara una política internacional que rechaza el golpismo y la agresión de los gobiernos norteamericano y español. Habló de la economía en crecimiento, de los referendos, de cómo prepararnos todos y muy especialmente la mujer venezolana ante los ataques de la oposición, en fin… hizo una apología de esa mujer que sale todos los días a la calle a enfrentar con sus ideas a quienes defenestran el proceso revolucionario… Pero, nuevamente la organización excluye a sectores que tienen tanto derecho a participar en ese foro y que se han partido el alma defendiendo este proceso… ¡Ojo, Comandante! Que usted es el que va, pero no sabe como se la presentan…
En la esquina caliente, en Puente Llaguno, en la Plaza de la Revolución, en la Avenida Urdaneta, en San José, en La Pastora, en José Félix Ribas, en Catia, en 23 de Enero, en Caracas, en todas las ciudades del país, está la mujer de a pie, la que se ha quemado con el sol mientras arrastra a su gente para defender la revolución bolivariana… Esta Lina Ron, está Jeannette Pino, está Sofía Viloria, esta Juana, Petra, Luisa, Inés, Carmen, esas líderes naturales y emergentes que salieron a la calle sin importar que coño les iba a pasar… Esas mujeres no están en ese Foro Mundial y no me vengan con la joda esa de tener a “representantes” de ese sector en las mesas de trabajo, por que tendrían que explicarme quien coño las eligió, cuando las eligieron y si consultaron a las bases para ganarse el título de “representantes”.
El pasado Foro Mundial dije y critiqué que hay un sector que se las apaña muy bien para excluir a los verdaderos protagonistas de esta revolución. Dije que ese tipo de foros tienen una importancia relevante y que debían hacerse en espacios más grandes para que el pueblo participe, se entere, se eduque, se sienta protagonista de su propio destino y demuestre por que es gigante. Sin embargo, hay gente que todavía a estas alturas, desconfía de la espontaneidad de nuestro pueblo y saca sus cuentas estético-morales que, al final termina siendo una simple y terrible reacción pequeño burguesa.
Doy varios ejemplos pequeños, pero significativos: ¿Cuál es el problema de invitar a Lina Ron a que exponga sus puntos de vista en un Foro Mundial de la Mujer que se celebre, por ejemplo, en el Estadio Universitario a casa llena y con una mayor participación popular? ¿Cuál es el problema de invitar a las líderes de base, por ejemplo, de los barrios de Petare, La Vega, Catia, 23 de Enero, por no mencionar a aquellas líderes que están en el interior partiéndose las nalgas a favor del proceso? ¿Cuál es el problema de escucharlas que planteen sus problemas, que digan que está pasando con tal alcalde, concejal, gobernador o funcionario? ¿Es tan jodido mostrar a la mujer que forma parte de ese gran porcentaje de excluidos? ¿Tan fea y tan poco “fashon” es?
Entiendo que todas las mujeres del país no pueden participar en estos foros; no soy bruto y no me vengan con respuestas simples ante problemas de fondo. Sin embargo, creo que en cada barrio, plaza, esquina ó urbanización, hay una representante muy digna que desearía participar en estos eventos; eso sin contar con las líderes antes mencionadas que no fueron invitadas al evento de marras…
Ustedes, mis queridas organizadoras, se preguntarán ¿Coño, y para que molestar a estas damas que siguen trabajando en los barrios, organizando vainas que ustedes a veces ni se enteran, para que asistan al Foro Mundial de la Mujeres? Muy simple, mis estimadas compañeras de partido… Esa doñita que representa al Barrio tal y aquella que representa al Barrio Cual, luego de asistir (en el caso hipotético de una invitación que ya no se hizo) a tan sonado evento, se esmachetaría hasta su barrio a conversar de los logros revolucionarios y con más ímpetu a organizar los planes de defensa de un país que se está llenando de foros hechos a la medida de una clase media que quiere motorizar una revolución y que no acaba de sacarse de encima las diferencias sociales, ¡INCLUSO!, cuando se ponen un simple nombre… De lo que hablo, mis estimadas camaradas, es de alertar sobre la creación de una nueva burguesía peor a la anterior y que el esfuerzo de la gran mayoría de mujeres que si salieron a pelear cuando la vaina se puso color de hormiga, se quede en aplaudir a quienes cómodamente hoy se parten el pecho hablando de revolución.
Se que es odioso que nos critiquen cuando estamos de fiesta, pero hay mujeres y no saben ustedes cuantas, muy pendientes de ese foro y de la poca atención que se les prestó para participar… Revisen las vainas; dejen los protagonismos a un lado y sepan que este pueblo no es pendejo. Este pueblo sabe identificar a los arribistas. Pónganse las botas y vayan al barrio.
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