No se llega por la libre a los círculos de poder en cualquier escenario de gobierno incluido el bolivariano, siempre media la ayudadita, ese empujoncito que de la noche a la mañana coloca a un activista de oposición al frente de la Oficina de Administración del Ministerio, que sitúa al enemigo del “Régimen” en la Dirección de Compras y Mantenimiento de X Institución o de aquel que galopa, a punta de métodos y estilos de trabajo neo-liberal, sobre el desprendimiento de muchachos y muchachas militantes de una Misión o de un proyecto presidencial especial. Lamentablemente, cuando usted menos espera, en el desenvolvimiento del “proceso”, una gente de Primero Justicia, Nuevo Tiempo, MAS o cualquier otro conspirador que pueda imaginar, esta administrando feudos en Alcaldías Chavistas, Direcciones de Ministerios o Gobernaciones. Teniendo de esta forma toda razón ese pueblo cuando a las afueras de Miraflores gritaba ¡Chávez si, gobierno no! o ¡Limpieza, limpieza, limpieza! el 3 de diciembre del 2007.

Si, lentamente como si no pasara lo que pasa el proceso bolivariano se va alejando del Proceso Histórico de Liberación del Pueblo Venezolano. Una conjunción de vicios, taras ideológicas y mañas políticas asaltan por todos los costados la promesa por la cual se volcó el pueblo en el 98 y se batió desobedientemente aquel glorioso 13 de abril. De manera infame el Gobernador o Ministro, el Alcalde, Diputado o Presidente de una Fundación Estatal (con muy contadas excepciones), mucho antes de asumir el cargo, tiene como prioridad el acomodamiento de la familia, la dadiva a los compatriotitas mas cercanos, el puesto adecuado para la amante (o el amante) y para el pana de toda la vida. Allí no media la referencia a las coincidencias políticas, claridad ideológica o virtud revolucionaria.

Compatriota, a todo lo antes descrito súmele el que esta guachafita gubernamental esta matizada por las características de la estructura Política-Jurídica del Estado Capitalista cuya esencia es la corrupción e ineficacia en lo que respecta la satisfacción de necesidades de las mayorías. Estado que por naturaleza es delincuencial, que se proyecta desde la explotación de los trabajadores, del campesinado humilde, de los lacerados por todos los colores de la miseria. Es la usura elevada al rango de virtud, la acumulación de riquezas de unos pocos sobre el lomo y desventura de otros bastantes, lógica criminal cuya existencia es muestra de que seguimos siendo parte de la prehistoria de la Humanidad. Y es precisamente por esas razones que la conducción del proceso bolivariano, si se quiere en ruptura con las leyes del Capitalismo, tenía y tiene que ser harto vigilante en lo que respecta esas dos amenazas (corrupción e ineficacia) que combinado con el individualismo y afán de lucro obstaculizan todo esfuerzo dirigido a la liberación de la humanidad así como el resguardo de la madre naturaleza.

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No todo lo proyectado o realizado por el Presidente Chávez goza de la absoluta simpatía de las más desasistidos y marginados de este país (median demasiadas alcabalas y burocratismo), sin embargo, hasta tanto ese conglomerado nacional no alcance niveles de organización y solidez política-ideológica que garanticen la continuidad y profundización de la experiencia bolivariana, ésta tendrá que seguir enganchada al liderazgo de Chávez y su particular estilo de gobierno que si bien es una adecuada alfombra para el oportunismo, corrupción y mercenarismo de la derecha endógena, es hora ya de que también sea escenario para el desarrollo de la iniciativa revolucionaria, solidaria y subversiva, campo para la batalla de ideas, propuestas e iniciativas entre aquellos y nosotros. He allí donde la ruptura con el conservadurismo es indispensable si en efecto queremos insistir en la vigencia y profundización de este proceso convirtiendo en prioridad las experiencias desatadas desde los sectores populares o las consignas promovidas por el Presidente Chávez, es acumulación y cualificación de las fuerzas populares desde una concepción autónoma y libertaria. Y, precisamente la última iniciativa del infiltrado que tenemos en el gobierno es la presentación las tres R, al tiempo que el movimiento popular, luego de la sacudida producida el 2-D se empecina en andar por entre experiencias como el Frente Popular Revolucionario del Sur, las Mesas Socialistas y la Asamblea Socialista entre otras, además de la multiplicidad de formas organizativas y de participación hace rato conocidas. He allí el germen de una Vanguardia Colectiva, Corriente Histórica o Compromiso Popular Revolucionario en constante elaboración de políticas, apoyo a iniciativas gubernamentales, crítica a quienes desde dentro entraban la marcha y enfrentamiento, mediante la movilización de calle a la oposición fascista y pro-imperialista y en este contexto, importante, muy importante es imponer un criterio, una práctica política-revolucionaria de ruptura con los vicios de la izquierda y más aún, con las deformaciones de la derecha.

Así como valoramos la existencia de una Dirección Colectiva como expresión de las diversas motivaciones de los sectores populares, también revindicamos la generación de una instancia crítica en capacidad de interpretar y hacer vocería a partir de las expectativas populares, al tiempo que impulsa el diálogo crítico con el gobierno, con el Estado. Conciencia Crítica conformada por dirigentes populares, intelectuales, científicos, artistas, humanistas y trabajadores en general cuyo común denominador sea el desprendimiento, la militancia con los intereses populares y la trascendencia revolucionaria donde lo significativo está en lo que sembramos hoy para beneficio de los que vendrán mañana, la máxima felicidad realizada en el gesto de solidaridad con aquellos que llegarán. Conciencia Crítica para liberarnos de dogmas, jerarquías y adulancia desde donde se geste el estímulo a ir más allá de la institucionalidad burguesa, instrumentalizando grados de Gobernabilidad Revolucionaria que junto a la Conciencia señalada y al Bloque Histórico propuesto evite la repetición de vicios en el seno de las diferentes misiones, de familiares que se lucran con convenios y acuerdos que no cumplen, de amigos y amigas realizando tours a cuenta de los recursos del Estado, de galimatías vociferando falsedades sobre el Socialismo del Siglo XXI o Socialismo Bolivariano para satisfacer al líder. En fin, Conciencia Crítica, Vanguardia Colectiva y Gobernabilidad Revolucionaria para que el pueblo sea objeto, sujeto y poder de su propia liberación.

En nuestra opinión, visto los argumentos anteriores, para que el proceso bolivariano sea parte sustancial del Proceso de Liberación del Pueblo Nuestro-americano tiene que vérselas con el reto de ser instrumento o circunstancia para el ejercicio de la Gobernabilidad Revolucionaria desde su condición de gobierno del Estado Capitalista. Tendrá el Presidente Chávez y sus principales colaboradores que someterse a la evaluación y conseja de una Conciencia o referencia Crítica presta a los intereses populares y en continuo enfrentamiento dialéctico con la razón gubernamental, en compañía de la Vanguardia Colectiva o Corriente Histórica antes mencionada, donde quepan todos aquellos que están por la Revolución, por una Nueva Cultura Política, por la liberación de los explotados y la reivindicación de lo mejor del ser humano.

El Presidente abrió otra vez la puerta de emergencia: Las Tres R, sobretodo la R de Re-visión, vamos pues a construir lo esencial de la Emergencia Revolucionaria hoy, el Programa de Profundización y Transición a partir de la sistemática Re-visión presidencial convocada. Inventariemos las propuestas instrumentadas desde el 99 hasta hoy, los presupuestos aplicados, los actores y los resultados como natural pre-ambulo a cualquier Re-conducción.

Las cartas están echadas, ganan los pueblos del mundo con el triunfo del proceso chavista o se hunden en la desesperanza generada a partir de la derrota generada desde el seno mismo del "Proceso".


¡SÓLO EL PUEBLO SALVA AL PUEBLO!