Es cierto que el “Bloque Democrático” no pertenece a la Coordinadora Democrática. Es igualmente cierto que “no tiene representatividad”, como dijo un vocero de la CD. También es verdad que “tiene como política el atajo, y usan el revocatorio como excusa para inscribirse en un planteamiento inconstitucional”, opinó AD.
Todo es cierto, pero si se trata de seguir atajos con políticas al margen de la Constitución, no se requiere representatividad.
Un grupúsculo puede hacerlo. ¿Acaso era grande y representativo el grupo terrorista que estuvo colocando bombas y que acaba de ser puesto al descubierto por uno de sus integrantes? No es que el BD esté formado por terroristas, para hacer exhortaciones a la Fuerza Armada es suficiente con existir y posibilidad de acceso a los medios. Tal como ocurrió con el grupo Altamira.
El problema es encontrar oficiales que les escuchen.
Si en los 62 días del paro, cuando momentos hubo con producción petrolera en cero, no entraba ni salía ningún barco, y no pudieron que se alzara la más insignificante unidad militar, teniendo todas las condiciones a favor, ¿cómo creen los 11 miembros del BD que ahora les harán caso?
Lo que importa ahora es destacar cómo tenían razón quienes denunciaban que hay sectores de la oposición que pudieran pensar en usar el reafirmazo para promover una “rebelión civil” y luego llamar a la intervención de la Fuerza Armada. La tesis es que esas firmas, y las anteriormente “recogidas”, se convertirían de una vez en el revocatorio, y Chávez tendría que salir, por la rebelión de las masas en la calle y la presión militar. No habría necesidad de verificar las firmas de esos días. Si esa “tesis”, que, naturalmente, no está concebida en gente apegada a las formas democráticas, está apoyada en algunos incidentes violentos o de saboteo, se habrían dado las condiciones para crear una situación confusa e incierta, apropiada para tomar ese atajo al que se refiere AD.
La declaración del BD mereció un categórico rechazo y condenatoria del CNE, aunque apenas tuvo eco en los partidos de oposición y en la mayoría de las ONG, medios, universidades y otras instituciones que se supone son defensoras de la democracia, y que prefirieron guardar silencio.
El coronel Montiel Argüello, Magíster en seguridad y defensa nacional, ha hecho circular una advertencia sobre un plan de sectores opositores, quizás en combinación con el BD, para que un elevado número de firmantes repita sus firmas cada uno de los cuatro días habilitados, y se proclame el reafirmazo como un éxito clamoroso y que estimularía acciones de calle para que “se declare la ilegitimidad y la ingobernabilidad del régimen”. Por supuesto, trampas de ese tipo sólo tendrían un efecto relativo y temporal, mientras elCNE no verifique las firmas. •
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