Estoy cada vez más sorprendido de cómo se sigue atropellando nuestra nación y tengamos que estar sometidos a una política de la otra mejilla. Esto quedo demostrado una vez más ante la incursión por segunda vez por parte de tropas colombianas en territorio venezolano. Da risa porque ese pelotón o compañía de soldados tenían que ser todos detenidos, igual el piloto de la nave gringa que oso violar nuestro espacio aéreo.
Seguimos con la blandenguería, las amenazas de “La próxima vez” y ya van 10 años que los adversarios siguen dándose un banquete cada vez que violentan nuestra constitución y quedan impunes. Así ha sido siempre porque siempre pensamos más en el enemigo que en nuestra patria. Si le suspendemos en envío del Petróleo a los Estados Unidos entonces qué pasará con aquellos, o si reaccionamos ante la incursión militar colombiana entonces pasaría esto o aquello y no podemos caer en provocaciones.
Son ya 10 años de provocaciones con sus muertos y heridos, con un reforma tan vital que no se pudo lograr, con un presidente preso y después liberado por el Pueblo, con un Fiscal modelo asesinado y los autores intelectuales campantes por el mundo, con una televisora como Globovisión escupiendo a diario su veneno y no hay que tocarla porque dirán, y así un sinfín de cosas.
Estamos de acuerdo que somos un gobierno demasiadamente democrático y pacifico, eso sin duda alguna es de reconocimiento mundial, aunque también tenemos un Gobierno o un Estado para colmo muy blandengue que actúa más por el que dirán que por demarcar respeto a los adversarios. No es que nos convirtamos en tiranos e inquisidores, pero sí hay que ser más radicales a la hora en que nuestro pueblo es humillado.
Reconocemos en Chávez un hombre verdaderamente pacifista, perdonador, amante de los pueblos, y aún así vienen y nos escupen y nos cachetean porque el enemigo no respeta eso, son gente bestia, que solo se mueven por la envidia, las riquezas y la maldad. Ellos no entienden nada de tolerancia y respeto, solo fijan políticas agresivas porque están al mando de las ordenes del decante imperio norteamericano.
Es hora de que el Estado sea firme ante las agresiones foráneas y las internas. Es ya intolerable que las empresas mediáticas sigan traicionando nuestro pueblo y nuestra patria, es bastante que sigan incursionando campantes paramilitares por el país y nadie los identifique y detenga, es ya un hastío que Uribe y Bush sigan atropellándonos.
Exigimos respeto, autoridad, eficacia y sacrificios si es posible en el Pueblo y desde ya se planifique la paralización de una semana de envío petrolero al Imperio, de que Globovisión por 5 días como advertencia salga del aire, de que se investigue los ingresos financieros de toda esa campaña mediática en radio, prensa y TV, de las ONG y partidos pagados por el imperio para desestabilizar el país sean censurados, de que se llame a capítulo a Manuel Rosales y se le detenga como a todos los que ya tiene en plan separar al Zulia de nuera patria como otros estados.
De que el Ministro de la Defensa movilice las tropas y Batallones a la Frontera y que se cierre toda relación comercial con Colombia y logran instalar una Base Militar muy cerca de la Frontera. Debe ser más enérgico el Estado porque es por nuestra Patria, por nuestra Revolución antes de que sea tarde porque permitir la derrota de este proceso llevaría a la nación al mayor derramamiento de sangre en toda su Historia sin resultados positivos para las nuevas generaciones.
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