Esta teoría fatalista a pesar de ser esgrimida por seudoeconomistas para generar pánico en la población, con poses y palabras rimbombantes, está desprovista de sustentos serios, ya que existe gran cantidad de evidencias que la rebaten.
Al cierre del segundo trimestre de 2008, según el informe del Banco Central de Venezuela, la economía de nuestro país registró un crecimiento de 7,1% del producto interno bruto, superior al 4,9% registrado en el primer trimestre de 2008, lo que representa en promedio una expansión de 6% en el primer semestre del año.
De acuerdo con este informe, el auge de la economía se basó tanto en la actividad no petrolera, que creció 7,8%, como en la petrolera, la cual registró un incremento de 3,2%, además establece que el aumento de la actividad no petrolera fue estimulado por la mayor demanda agregada interna, tanto en gastos de consumo como de inversión, beneficiando el incremento de la recuperación del ingreso familiar, la reducción del desempleo y la consolidación de las misiones sociales que implementa en acto de justicia la Revolución Bolivariana.
En un reciente informe del Centro de Investigación Económica y de Políticas (Center for Economic and Policy Research, CEPR) titulado: La economía venezolana en tiempos de Chávez, publicado originalmente en inglés, se observa el daño causado a la economía venezolana por los fascistas apátridas a través del saboteo petrolero, vivido en nuestro país durante los primeros años de gobierno del comandante Chávez. Sin embargo, una vez superada esa crisis, la economía comenzó un sostenido y rápido crecimiento el cual se mantiene desde mediados del 2003 hasta la fecha, resaltando dicho informe que Venezuela tiene un seguro sólido contra la caída de los precios del petróleo en la acumulación de reservas internacionales, una deuda pública en disminución y un amplio superávit en cuenta corriente, aunado al incremento del gasto social de 170% durante el período entre 1998 y 2006, sin incluir el gasto social realizado por Pdvsa, que asciende a 7,3% del PIB en el 2006. Si se incluye esta cifra, el incremento del gasto social es de 314% que redunda en sustanciales beneficios para los excluidos y los más pobres, en términos de: atención a la salud, alimentos a precios asequibles y un mayor ingreso al sistema de educación nacional, y abatimiento del analfabetismo de acuerdo con los estándares de Naciones Unidas.
Para corroborar el avance económico que vive Venezuela, es recomendable revisar el informe realizado por la Conferencia de Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), el cual pronostica que el crecimiento económico venezolano para este año 2008 cerrará por encima del promedio de Latinoamérica, producto de la adecuada administración del dinero que proviene de la actividad petrolera.
Esto resume en esencia una de las máximas del presidente Chávez, la cual establece: "Este logro debe estar enfocado al desarrollo del máximo potencial del ser humano".