La verdad que me fue prácticamente imposible sustraerme de las ansias de escribir de nuevo, no me fue posible continuar descansando ante los hechos que en esta Venezuela revolucionaria, suceden a cada rato, y que confirman el dinamismo de este proceso y de cómo fuerzas apatridas, se conjugan para destruirla llegando incluso al asesinato del Jefe de la Revolución; el desarrollo de los acontecimientos pudo más que mi necesidad de velar por mi salud.
El video que como despedida, esperamos que temporal, mostró Mario Silva en “La Hojilla”, no tiene desperdicio, allí se devela y confirma lo que el Presidente ha venido denunciando sobre la conspiración que está en curso bajo el cobijo y financiamiento del Imperio y con la complicidad de los medios de comunicación de la derecha que ya lo intentaron en el 2002 y lo lograron momentáneamente, hasta que el pueblo reaccionó de manera espontánea, aun sin estar preparado para una contingencia de tal magnitud, pero que ahora si lo está, y de qué manera, dispuesto a defender hasta las últimas consecuencias, lo que tanto sacrificio nos ha costado.
Estos desalmados que fuera y dentro de la Fuerza Armada quieren intentar hasta un magnicidio, en su desespero, no atinan a imaginarse las consecuencias que cualquiera de las acciones a que se refieren en la conversación revelada por Mario, traería consecuencias impensables para ellos y todos los que se atrevan a apoyarlos, no quedaría piedra sobre piedra en los reductos de la Oligarquía y la sangre correría por las calles porque la conciencia del pueblo ha madurado tanto que el sacrificio por la Patria no tendría miramientos ni siquiera con la vida, pues el pueblo que hoy por hoy se siente incluido no va a ceder para nada y no se va a dejar quitar sus conquistas y sus logros.-
Por ello, estos canallas se equivocan de medio a medio y es porque no conocen al pueblo como lo conoce el Comandante y ese pueblo a él en una conjunción tal que nos hace invencibles.-
Cuando decidí tomarme un descanso, no imaginé que me iba a costar tanto desprenderme de lo que ya en mi era una costumbre diaria: escribir lo que la fuente de inspiración que es el escualidismo me hace producir y lo que la revolución que a cada momento nos sorprende con hechos y logros sin parangón, me da como motivos para que la musa no me abandone nunca.-
El período, que vamos a vivir en pocas semanas, que comienza el 23 de septiembre y culmina el 23 de noviembre, en el que nuevamente la Revolución dará una demostración más de democracia verdadera, y escribirá páginas de triunfo que consolidarán y despejarán aun más el camino hacia el socialismo, será proclive para analizar las diferentes posturas de una oposición que se resiste a aceptar lo que el pueblo ha decidido, e inventan miles de excusas para dorar la píldora de sus derrotas, una oposición desesperada, hipotecada y comprometida con sus jefes de la oligarquía de aquí, y el imperialismo gringo, a quienes no han podido cumplirle por una sola razón, son “caciques sin indios”, no tienen pueblo, son un ejército diezmado moralmente, son un cascarón vacío sin ideas, sin programas, sin proyectos y por lo tanto no tienen cómo ni con qué convencer al pueblo y entonces pretenden engañarlo, valiéndose de la mentira con la que a diario llenan las páginas de sus panfletos y empresas mediáticas, sobre todo lo que la Revolución se esfuerza en hacer y producir para continuar en la lucha contra la exclusión, en la búsqueda de la felicidad del pueblo que ha hecho méritos, que un 13 de abril glorioso, fue una masa humana heróica, que imprimió su sello indeleble de libertad sobre la Patria.
Entonces vuelvo a escribir, en esta gloriosa página que es trinchera de la Revolución, en la seguridad de que cada palabra que salga de la boca de un lacayo apátrida, será para mi el punto de partida para una nueva pildorita, cada título de los periódicos de la oligarquía, cada programa de los canales golpistas, cada expresión de los orates emblemáticos de la oposición venezolana, tipo Goicochea, que se ganó por el resto de su vida el mote de “Herodes el incendiario”, o de Nixon “el violador”, o del “cabeza de motor”, “el matacuras”, “German monster” y toda esa godarria que llega hasta el extremo de odiar la memoria de nuestro Padre Libertador, por el solo hecho de que esta Revolución ha cumplido con la obligación de todo patriota, de colocar muy en alto a quien inmoló su vida por darnos la Libertad, de quien hemos tomado las banderas que, hoy por hoy hemos colocado en sitial de honor porque aun está por lograrse la vendedera independencia, que llegará cuando hayamos derrotado la pobreza, así como derrotamos el analfabetismo.