Está demasiado reciente el enorme atentado terrorista en España, presumiblemente de la ETA o algún otro grupo opositor al gobierno, para sopesar los daños materiales, pero fundamentalmente humanos, del feroz e inhumano acontecimiento en Madrid; acercándose a las cifras de doscientos muertos i seiscientos heridos, cifras que sobrepasarán sin duda alguna. España está herida i no solamente todos los españoles, sino todos los pueblos civilizados i pacíficos del mundo, nos sumamos al dolor i a la indignación.
Sin embargo, el momento es oportuno para preguntarle al Jefe del Gobierno Español José María Aznar, quien siendo secuaz o alcalde del presidente Bush, ha apoyado casi directamente a los movimientos subversivos de Venezuela, verdaderos grupos terroristas que, de manera constante han venido perpetrando hechos de violencia en muchas ciudades del país, con muertos, heridos i destrozos materiales, alegando que defienden sus derechos, que se amparan en el derecho a desestabilizar la nación (incluso malinterpretando intencionalmente un artículo de la más avanzada Constitución del mundo) i salir por la fuerza del presidente constitucionalmente electo, i el más legítimo i humano que hemos tenido en nuestra historia republicana. ¿Qué diría el señor Aznar, si líderes de la ETA tuvieran una televisión cómplice e incitaran públicamente a sus partidarios a la desobediencia civil i a delinquir? ¿Qué pensaría el señor Aznar, si los terroristas alegaran que están protestando de esa manera, porque están defendiendo sus derechos ciudadanos i los Derechos Humanos? ¿Por qué este colaborador incondicional de Bush, apoyando genocidios como el de Irak, no reconoce esos derechos a delinquir libremente en España, como lo apoya en Venezuela? ¿Se ha enterado el señor Aznar, de los actos terroristas de la Plaza Francia en Altamira, los destrozos en el este de la ciudad i del implacable bombardeo mediático, corrupto i conspirador que se hace en los medios de comunicación social en todo el país? ¿Permitiría el señor Aznar que la televisión i la prensa española, celebrara el gigantesco atentado terrorista en Madrid, porque esa es la forma de protestar en el mundo civilizado? Siempre recuerdo el dicho de Bertrand Russell: “Los problemas ajenos es muy fácil verlos desde lejos, mientras no nos toquen a nosotros mismos”. El señor Aznar, que no ha podido resolver en nada los problemas internos de su patria i ahora atentan gravemente debajo de su nariz, es el mismo que apoya la conspiración norteamericana en el suelo venezolano, porque es alcalde del imperialismo, cosa que no debería tolerar el Rei Juan Carlos.
España está herida, pero el pueblo español en mayoría repudia el hecho i el mundo entero le apoya; pero ¿Cómo queda la conciencia del Jefe del Estado Español, cuando él en vez de hacer lo mismo con Venezuela, apoyar un gobierno de los más democráticos del mundo, lo que hace en contribuir a las heridas constantes que una irracional oposición, carente de líderes i de hombres de talento, apoyada económicamente i en todas las formas clandestinas o no, posibles, por el imperialismo norteamericano del Sr. George W. Bus, hiere a Venezuela? Olvidaba que las conciencias sucias, se limpian rápidamente con los engaños religiosos. Aznar es cristiano católico i hasta a Cristo compromete; pero se sabe lavar los pecados. Buscará remedios en su país, pero seguirá convalidando las heridas a los otros.
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