Las vueltas que da la vida y a la gente le toca solo aprender o seguir porfiados y encerrados en el coco del burocratismo, de donde no quieren salir para no perder eso que tanto les ha hecho daño por no saber manejar, a eso le llaman poder.

Nosotros los del pueblo, los que siempre hemos permanecido aislados de los momentos importantes porque así lo decide el patrón y a eso practican sus seguidores, tomamos en cuenta que los cambios Ministeriales son acciones estratégicas para reimpulsar el proceso revolucionario y de ahí partir con las mismas políticas ya que son revolucionarias, hacia el proyecto nacional que es lo que mas nos interesa.

Unos hacen caso y la institución publica que tienen a su cargo, crece de manera impresionante y logran fusionarse con el pueblo para lograr hacer una gestión para el poder popular, otros llegan porque era su sueño o porque tenían la necesidad de sentirse poderoso y lograr hacer una gestión para ellos mismos, quienes compiten como en el capitalismo, a ver quien es mejor, o ver quien da mas dentro de un proceso que debería ser a mi criterio o al de cualquier revolucionario, de iguales, de igualdad, del socialismo que tanto pregonamos y que solo unos pocos en verdad lo vivimos o nos lo creemos.

Otros se aferran al poderoso, al mejor jefe que han tenido, al que es comprensivo, al que despide y atropella a los trabajadores, pasando por encima de la ley, pero que seguro tiene sus razones por ser el jefe y por tener el poder, utilizan los cargos mas importantes para lastimar la arteria mas frágil que tiene la revolución que se llama pueblo, basados una ves mas, en que el patrón es el que decide y lo que diga el patrón es amen, no tiene derecho a equivocarse, solo el trabajador es señalado y desmejorado por el simple hecho de no tener poder.

Vaya que la revolución nos ha dado mucho, nos ha enseñado mucho, pero también nos ha traído una división, una gran tristeza por ver que el proyecto nacional solo se cumple en algunos Ministerios, en algunas partes donde el Socialista, el Chávista inocente es el que cree y el revolucionario de papel es el que se lleva el merito.

No se si el reconocimiento es malo o bueno, pero al menos yo estoy de acuerdo en darle la mano a todo aquel que por la revolución lo entrega todo y ha abandonado mucho de sus sueños para conseguir estar cada vez mas cerca de una patria libre como la que ahora junto al Comandante hemos construido.

Vaya que en ves de pulverizar el burocratismo, más bien se ha profundizado, como si la orden hubiese sido lastimar al pueblo, mentirle al pueblo y reimpulsar el burocratismo que es lo que mas se pasean por las instituciones Públicas donde aplauden a la cuarta y entierran poco a poco la revolución.

Por eso está en mis principios llevar la moral de primero, no traicionar como de costumbre pasa en esta política que no entiendo, porque para mi la política une, el proyecto nacional une, la revolución une, pero la gestión divide,  el que no sabe gestionar logra la división absoluta entre el pueblo y el estado, entre el patrón y el trabajador entre los sentimientos hacia la patria y los que tienen que formarse hacia el patrón y es que volvemos a ver unos cuantos patrones y ya no compañeros de lucha, a eso que les dimos tanto y que ahora los vemos sonreír, campaneando un vaso tomándose un trago de esta suave revolución que tarde o temprano sabrá cobrárselas.

Por eso es que para construir el socialismo tenemos que ponerle mas que ganas, debemos darle corazón, darle forma, darle oportunidad de hablar al pueblo que algunos aprovechándose del proceso quieren ignorar, no se imaginan lo que tiene que hacer un personaje insignificante sin cargo para poder obtener una respuesta de un burócrata que hasta ayer era uno mas del montón, parece que se les olvida a quienes nos debemos, de que estamos hechos y por quien luchamos, en mi caso, muero por esta revolución por quien me he enfrentado a poderosos y no tan poderosos, para decirles la verdad y no para pintarles una caricatura como están acostumbrados, lucho por Chávez, cada ves que sea necesario lo haría, porque de ahí parten mis ideas, del domingo en un alo, de un Dando y Dando con el pase al consejo de Ministros, con el ver la hojilla o Dossier y estar cada vez mas claro que el mensaje es de unidad, que el elemento clave para salir triunfantes en esto es la unidad que tiene el pueblo con el estado, pero esa unidad no puede verse solo entre el pueblo y el Comandante, tiene que verse con cada representante de este gobierno, porque para eso están, para darle curso a este motor revolucionario que entre todos hacen funcionar.

El revolucionario es autocrítico por eso no me permito pasar esto por alto, seguir permitiendo que en mis narices se fabrique la injusticia y el atropello  pretendiendo hacerlo en el nombre de la revolución, citando un pensamiento de Bolívar o de Martí que manchan con sus lenguas oportunistas, estos vivarachos que creen que Chávez es tonto, y nos dicen a los trabajadores una cantidad de mentiras en su nombre.

Compa, el pueblo esta claro, y mientras no halla una gestión donde lo protagonista sea lo social, seguiremos profundizando la división endógena.