Desde diferentes lugares de Venezuela unos 75 abogados: jueces, aspirantes, delegados agrarios, el pasado 14/11 se encontraron en la Escuela Bolivariana “4 de Febrero” en el sector de la Laguna, de la Parroquia Carayaca, Edo. Miranda; para valorar los avances en nuestro país y como hacer uso de las herramientas e indicadores útiles, para sus actividades de peritaje, experticia e inspección, que la agroecología les pueda proporcionar como insumos en su trabajo de campo. Temas como el conuco y los principios agroecológicos; el garantismo; derechos colectivos y agroecológicos para el trópico, fueron debatidos en las gratas horas compartidas.
Esta meritoria e inédita experiencia y de pujante ejemplo para otras instituciones, cobra singular importancia ante la elevada amenaza que la humanidad nos une: los cambios climáticos que se vienen extraordinariamente registrando. Una salida apropiada y que avanza: es la ciencia agroecológica y sus diversas aplicaciones. Lo afirmamos, por cuanto la agroecología es la única ciencia que además de preservar nuestros recursos genéticos-semillas, recuperar suelos degradados, también reduce las emisiones (1/3) de gases invernaderos que el sector agro-toxico-transgenico aporta a las causas de los cambios climáticos. El oxido nitroso, dióxido carbono y gas metano nos siguen causando impactos negativos en nuestro ámbito social y la productividad agrícola. Este llamado reiterativamente nos los ha venido haciendo el Grupo Intergubernamental de Expertos de Cambios Climáticos(IPCC) quienes dicen que para el 2020 la productividad agrícola de muchos países se podría verse mermada en un 50% lo cual pondría en peligro la soberanía y seguridad agroalimentaria y aumentaría los problemas de malnutrición y salud.
Consustanciados con la posición del IPCC, es necesario resaltar, que nuestros jueces agrarios y sus otros criollos, no sólo expresan su interés en motivarse, sensibilizarse y asumir en sus áreas de trabajo, acciones de vanguardia por la buena alimentación y la salud. Ello es el principal sentido de trabajar la agroecología. También nos manifiestan su disposición en valorar la visión holística que todo avanzado y revolucionario profesional debe tener, para encarar nuestro principal problema ecológico como lo es el hambre; su carácter multifuncional en que debe tratarse y los tantos temas emergentes que en la actualidad proceden. Por la alta calidad del debate compartido; las curiosidades y preocupaciones comunicadas en Carayaca, estamos seguros, que estos tantos comprometidos profesionales evolucionaran en el conocimiento compartido. De hecho, los reta para continuar en sus espacios laborales y sociales, sensibilizando las tantas voluntades que necesitamos aglutinar, en el progresivo cambio de nuestros valores sociales e integrándoles los principios ambientales para ayudar a nuestro país, la región y al sistema tierra.
Felicitaciones a todos. Al entusiasta, Dr. Harry Gutiérrez Benavides, Juez Agrario Superior de la Circunscripción Judicial del Area Metropolitana y coordinador de la actividad descrita; a las encantadoras Dras. Gisely Estraño Coordinadora del Programa de Formación Inicial; Dilsey Cortez Directora de Formación y Gudila Sánchez Coordinadora de Pasantías de la Escuela Nacional de la Magistratura del Tribunal Supremo de Justicia, por la inédita actividad asumida, por sus múltiples manifestaciones de gentilezas, apoyo y darnos el privilegio de compartir tan original experiencia formativa. En especial, a la Coordinadora de las 24 patrullas de la zona, Compatriota Juana Cadenas quien dignamente nos deleito con el Hervido Cruzado Campesino, por cuanto de los 16 ingredientes utilizados en su cocción sólo 2 (carne y sal) venían de afuera, los demás son producidos y cosechados en su conuco agroecológico.
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