V
La Medicina Sistémica i la Sociedad Venezolana de Medicina Sistémica, no tengo información de haber sido reconocidas como especialidad médica ( o “una nueva i maravillosa medicina” en el mundo) ni como sociedad científica. Los Colegios de Médicos i la Federación Médica, no han participado oficialmente eso, de haberse concretado, al gremio médico venezolano.
Empiezo, pues, por decir que ignoro – e ignorar, no me da vergüenza como decía Cicerón, ignorar lo que no sé − que esa posible “especialidad” haya sido reconocida por la Federación Médica Venezolana i nuestras Universidades. La ley del Ejercicio de la Medicina, en el Título II, Capítulo I, con las atribuciones que le señalen las leyes, en su artículo 56, en su aparte primero dice que le corresponde a los Colegios de Médicos, “velar por el cumplimiento de las normas y principios de ética profesional de sus miembros”. El médico al graduarse, e inscribirse en un Colegio de Médicos, el primer compromiso que suscribe es ajustarse a las normas éticas de la profesión. Luego siguen nueve (9) apartes más que puntualizan sus deberes u obligaciones. I, en cuanto a las atribuciones de la Federación Médica Venezolana, lo primero es aprobar un Código de Deontología Médica, según el artículo 70 del Capítulo II. Ese código i la misma lei, regularán el ejercicio profesional, entre otras cosas puntualizadas en el establecimiento de estudios de post grado, previo el cumplimiento del artículo 8ª. ¿Existen estudios de post grados de Medicina Sistémica? ¿Quién creó la supuesta especialidad?, ¿un ingeniero? Creo que, ninguna Universidad ni la Academia Nacional de la Medicina han aprobado algo semejante. Luego, empecemos a anotar: hai violación de la ley del Ejercicio de la Medicina.
Prosigamos. En el título III, Capítulo I, la lei expone: De la Medicina Institucional. Artículo 101: “Se entiende por ejercicio de la Medicina Institucional la relacionada con las funciones de atención a la salud, a la docencia y a la investigación cumplidas por los médicos en el servicio de las instituciones oficiales o privadas, con objeto de atender a los problemas de la comunidad. La MS (medicina sistémica) no es una institución oficial i si es privada, ¿Llena los requisitos que exige la lei para el ejercicio i la investigación clínica? Ésta, agrega la lei, “debe inspirarse en los más elementales principios éticos y científicos, y no debe realizarse si no está precedida de suficientes pruebas de laboratorio y del correspondiente ensayo en animales de experimentación”. Resulta obvio que la MS no cumple con esto i que para presentar resultados, una sola golondrina no hace verano. La ciencia no admite que el éxito de un caso o un grupo no representativo de casos, sea confirmación de nada, tal como exponen los médicos de esta organización, pues hasta los errores médicos a veces parecen éxitos. Es ya tradicional el caso de un error de abdomen agudo que fue intervenido i al abrir no se encontró nada i se volvió a cerrar. El paciente casi “milagrosamente” curó. Se trataba de una tuberculosis intestinal i al abrir i airearse el vientre del paciente, los bacilos de Koch que son anaerobios, murieron. Lo mismo ha sucedido con casos de parálisis que reducen al paciente a una silla de ruedas i de repente se recuperan, porque de trataba de un síndrome de GuillainBarré. I otras enfermedades nerviosas que hacen remisiones más o menos duraderas, pero reaparecen. Se ha comprobado que muchas o casi todas las enfermedades son psico-somáticas i que muchas son casos de hipocondríacos que, con solamente prestarles atención, se curan. Las estadísticas que presentan son acomodadas i sin valor alguno. Sin embargo impresionan (sobre todo con barras o tortas de colores) i de esa manera se sigue aumentando una clientela cautiva, deslumbrada. Un secuestro mediático. Lo mismo sucede con los medicamentos, que he tratado en otros artículos. Sigo concretándome a lo legal o jurídico; pero, lo que si resalta es que, el ingeniero médico-genio, no está ni capacitado ni autorizado por la lei, para inmiscuirse en el campo de la medicina que le es ajeno. ¿Quién es este señor para escribir un libro diciendo que el cáncer es curable? Sencillamente una intromisión en lo que no sabe, para crear ambiente i atracción para un negocio. El cáncer, diagnosticado a tiempo es curable; así lo establece i lo ha probado la “medicina ortodoxa o convencional”; el ejemplo más notorio es el caso de Lance Amstrong, el seis veces ganador del Tours de Francia, después de padecer un cáncer, incluso con metástasis en pulmones i cerebro.
En cuanto a los profesionales médicos asociados en este gran negocio al ingeniero Olalde, es de recordarles que el Código de deontología Médica que, aunque está obsoleto o retrasado en muchas cosas, conserva lo fundamental de la ética, le prohibe al médico, por ejemplo, asociarse a un farmacéutico para buscar mutuamente beneficios económicos, pero, además, estos que aparecen de cuerpo entero en televisión, anunciando espectaculares éxitos, están atentando contra casi todos los apartes del Artículo 20 de Código. Este artículo dice así: SON CONTRARIOS A LA MORAL MÉDICA, los siguientes apartes:
a) Cualquier publicidad encaminada a atraer la atención del público profano hacia la acción profesional, con excepción de los avisos de prensa autorizados por el respectivo Colegio de Médicos. VIOLADO.
b) La publicación de artículos de índole médica (dichos en TV i escritos en prensa i revistas) científicos o divulgativos que no se ajusten a las disposiciones establecidas al efecto en el Código de Deontología Médica (CDM). VIOLADO.
c) La participación del médico, con carácter de tal, en programas, entrevistas o publicaciones de radio, televisión, y prensa que violen disposiciones contenidas en el presente código. VIOLADO.
Otros apartes sobre aspectos gremiales, no los señalo, pero sí:
g) Permitir exhibición al público profanos de…….que hayan sido fo-
tografiados o filmados. En caso de que se considere conveniente
con fines educativos, debe obtenerse la aprobación del Colegio de
Médicos respectivo. VIOLADO.
Hemos visto con frecuencia miembros, con feas lesiones, infecciones o a punto de amputarse como dicen algunos pacientes que, luego, solamente con plantas superiores se curaron. Nuestros Colegios Profesionales, llevaron al Tribunal Disciplinario a muchos médicos por dar declaraciones respecto a los post grados que hicieron en el exterior o algunas intervenciones pioneras; se regulaba el tamaño de la placa de identificación en el consultorio; se controlaba el aviso de prensa i las especialidades que anunciaba, i en fin, una serie de normas éticas dedicadas al cuido de la honorabilidad de la profesión i sus principios éticos.
El artículo 23 condena o prohibe, todas las formas de INTRUSISMO MÉDICO, especialmente el académico, en el ejercicio i en el no revalidado. A los médicos cubanos, traídos por un contrato o convenio especial entre dos países, (in obligación de reválida) le quisieron poner objeciones al respecto, convenciéndose de no tener razón; pero el intrusismo que ha hecho esta especialidad que no existe como tal, ni se enseña en estudios médicos serios, i las actuaciones del ingeniero Olalde, parece que no se debe tomar en cuenta, siendo también intrusismo político-administrativo i económico. Se viola igualmente el artículo 26 que proscribe la práctica de polifarmacia i el uso de medicamentos no legítimos, ni sometidos a las pruebas a veces de años como hacen los laboratorios obligados por las leyes, antes de poner un medicamento en el mercado. Aún así, ocurren grandes errores como el caso de la Talidomida i por ello, casi todos los medicamentos, hacen la advertencia de no usarse en la mujer embarazada. Por lo ya dicho de la propaganda, se viola en casi la totalidad de los apartes los artículos 27, 28 i 29 especialmente debo citar al pie de la letra los artículos 30, 31 i 32. El 31 dice: “Los médicos no podrán contratar servicios profesionales con personas naturales o jurídicas que exploten el ejercicio individual o colectivo de la profesión médica en condiciones tales que violen el ordenamiento legal, que rige la materia y los principios éticos contenidos en este Código. El artículo 31: “Los médicos en el ejercicio de su profesión no podrán asociarse con fines de lucro a los integrantes de profesiones afines o auxiliares de la medicina; artículo 32: “Ninguna persona autorizada legalmente para ejercer la medicina, podrá ofrecer en venta medicamentos u otros productos de uso terapéutico o sugerir a sus pacientes que los adquieran en determinadas farmacias o establecimientos. De este modo, sería demasiado extenso seguir señalando artículos i apartes, violados por los profesionales de la MS i especialmente el ingeniero-genio.
Como vemos, son muchas las irregularidades de este negocio de la salud, empezando por no existir la especialidad en cuestión, contrariando o violando el Título IV , Capítulo I de la Ley del Ejercicio de la Medicina en varios de sus apartes, especialmente el que expone: Artículo 113, aparte 6: “Los médicos que se anuncie como especialistas sin haber cumplido con los requisitos previsto en esta ley” por considerar como dice el enunciado que son infracciones i ejercicio ilegal. I en la ilegalidad, los miembros de otras profesiones que incursionen en la medicina, cometen graves infracciones.
Por esto, tantos los organismos e instituciones médicas competentes, incluyendo las Academias de Medicina, debe prestar especial atención a estos abusos de la Medicina Sistémica, lo mismo que el Gobierno Nacional. Es sencillamente, un ejemplo más del neoliberalismo económico del mundo capitalista, sistema donde todo en la vida es mercancía, incluyendo la salud, la dignidad i la vida.
Nuestra Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, en los artículos 83,84 i 85 puntualiza el cuido de la salud, i por cierto, lo mejor es lo expresado al comienzo de artículo 83 porque eleva la salud a un Derecho Humano como ha incorporado a estos en todo su contexto. Dice así: “La salud es un derecho social fundamental obligación del Estado que lo garantizará como parte del derecho a la vida.(el subrayado es mío). I Carl Sagan que combatió tanto las supersticiones como a la pseudos-ciencia, afirmaba que, “Los tratamientos científicos son cientos o miles de veces más eficaces que los alternativos” i además, la ciencia está consciente de que nada es perfecto, que se pueden cometer errores, pero lo grande está en saber rectificar i buscan nuevas soluciones. La Medicina es una ciencia que avanza con el progreso tecnológico a pasos agigantados; pero es arte también cuando no descuidamos lo sublime i bello que es lo ético; i finalmente, lo profundamente humano. El médico, como lo creyeron los griegos, es un demiurgo, o sea, un servidor para el pueblo, para la Humanidad o las Humanidades.