(Cochabamba 1 de febrero, de 2008).- Hoy empezó el pago de la renta de vejez Dignidad en todo el país dando inicio a la revolución social. Doña María González de Urquieta fue la primera en recibir sus 200 bolivianos de manos del Presidente Evo Morales Ayma. Ella nació el 1 de febrero de 1929 en Vinto. Así los recursos de la nacionalización retornan al pueblo.
“Gracias, gracias… esta es una gran ayuda para nosotros que ya no trabajamos”, dijo emocionada doña María al recibir su renta que le será otorgada por el resto de su vida. El Primer Mandatario con un abrazo entregó a la ancianita de 77 años esa deuda social del Estado.
"Después de tantos años se hace justicia social con la tercera edad y no con plata prestada, sino con los recursos de nuestros hidrocarburos, lo que nos da la Pachamama. Empieza la revolución social para atender una demanda histórica del pueblo", dijo el Jefe de Estado en su discurso previo a iniciar la vigencia de este beneficio para nuestros abuelos y abuelas. El acto se i9nicio a las 7.20 en el Centro de Instrucción de Tropas Especiales (CITE).
Poco después en todo el territorio nacional, en diferentes lugares empezó la distribución de la renta Dignidad a cargo ministros y otras autoridades, además de efectivos militares. En Santa Cruz Lucio Villarroel fue el primero en recibir sus 200 bolivianos en el Colegio Militar de Aviación.
Son 766.009 personas las que recibirán la renta Dignidad en todo el país en 580 puestos de pago habilitados. Los abuelitos solamente necesitan su carnet de identidad y dos fotocopias de este documento, no importa si está caducado.
En su discurso hoy en el CITE, el Presidente explicó que este beneficio llega a todas las personas de más de 60 años que no tienen el derecho a un seguro de jubilación, por eso lo recibirán aquellos viejitos que han trabajado toda su vida en el campo, o como tenderos, en el comercio informal, los carpinteros, los taxistas, los panaderos y toda esa gente que, por las características de su actividad laboral, ven el amanecer de todos los días trabajando.
El Mandatario recordó que la distribución de la renta vitalicia no es una ayuda del Gobierno o de su persona, sino es una obligación del Estado, pues es producto de la nacionalización de los hidrocarburos que costó sangre y muerte del pueblo boliviano en la movilización de octubre de 2003 que acabó con el ciclo neoliberal y conservador en el país.
En el acto de inauguración, a nombre de las personas de la tercera edad, Casiano Amurrio, un luchador contra la dictadura de Banzer en los años 70, agradeció el pago de la renta dignidad y afirmó que es un acto de justicia en Bolivia. "En nuestra juventud hemos ayudado al desarrollo de nuestra Patria”
También el comandante del Ejército, general Freddy Mackay, manifestó su compromiso de cumplir con la instrucción del Jefe de Estado de distribuir la renta Dignidad en el punto más alejado del país.
