12 de septiembre 2008. - El Gobierno de Bolivia declaró este viernes estado de sitio en el norteño departamento de Pando, al asegurar que los violentos hechos ocurridos en las últimas horas en la capital, Cobija, y otras localidades, incluido el asesinato de 14 campesinos, constituyen "genocidio" y "crímenes de lesa humanidad".
Asimismo, los actos de vandalismo, los daños contra los bienes del Estado y bloqueos de carretera, "atentan contra la seguridad de los ciudadanos", señaló en una declaración al país el ministro de la Defensa, Walker San Miguel.
El decreto tiene el propósito de restablecer el orden ante la ola de violencia criminal desatada por bandas de paramilitares "al servicio de la Prefectura de Pando", añadió San Miguel; flanqueado por el titular de Gobierno, Alfredo Rada, el alto mando de las Fuerzas Armadas y el comandante general de la Policía Nacional.
El ministro de Defensa detalló que la decisión se tomó en Consejo de Ministros, cuando se analizaron los hechos violentos ocurridos en las últimas horas. "El gobierno iene la obligación de garantizar la seguridad de los ciudadanos", enfatizó.
La medida anunciada prohíbe el porte de armas de fuego o armas blancas, la organización de reuniones políticas y el tránsito de tres o más personas en un horario comprendido entre las 00H00 hasta las 06H00 de la mañana.
El estado de excepción también determina que los bares y restaurantes deberán cerrar sus puertas en este horario, mientras quienes deban salir de la región deberán solicitar un salvoconducto.
Más temprano, el presidente de Bolivia, Evo Morales, convocó a los prefectos opositores a una nueva mesa de diálogo que sirva para descomprimir la aguda crisis política que vive el país, después de los hechos violentos que han dejado al menos 14 muertos y más de 50 heridos en la nación del altiplano.
Morales llamó una vez más al diálogo y ratificó la invitación que horas antes había hecho el ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, para que la cita se realize este viernes a las 16H00 locales (20H00 GMT) en el palacio presidencial de Quemado, en La Paz.