3 de enero de 2010.El portavoz del Gobierno boliviano, Iván Canelas, señaló este domingo que el presidente de Perú, Alan García, intenta generar polémica entre los dos países "como una estrategia para distraer la atención de los problemas internos que tiene su país, los cuales sabe cómo resolverlos".
Desde Cochabamba (centro), Canelas instó al mandatario peruano a solucionar los graves problemas que afectan a su pueblo antes de atacar a otros países.
Las declaraciones del vocero gubernamental, surgen como respuesta a los ataques que hiciera este sábado el presidente García contra el jefe de Estado de Bolivia, Evo Morales.
En entrevista con Radio Programas del Perú (RPP), García dijo que si bien su "amigo" Hugo Chávez "ya no puede intervenir" en asuntos internos de Perú, a él le "parece que hubiera delegado ese papel en un Gobierno más cercano", en referencia directa a la gestión de Evo Morales.
El Primer Mandatario boliviano "ataca constantemente al Perú bajo las órdenes del gobernante venezolano, Hugo Chávez", señaló el jefe de Estado peruano.
Canelas acusó a Alan García de recibir instrucciones de su homólogo estadounidense, Barack Obama, para desencadenar la represión a sectores indígenas que luchan por sus reivindicaciones, "a los que podrían calificarse como delitos de lesa humanidad" y "para regalar los recursos naturales a empresas transnacionales".
Dijo que el mandatario peruano es el fiel representante de políticas neoliberales que todavía, aunque en menor escala, practican algunos países de América Latina en contra de los intereses de sus pueblos que continúan sumidos en la pobreza y el hambre.
Estas nuevas declaraciones del presidente peruano surgen luego de que el pasado lunes 28 de diciembre, criticara indirectamente la política gasífera de su par boliviano.
Declaraciones que propiciaron una respuesta inmediata de la propia voz del vicepresidente de Bolivia, Álvaro García Linera, quien dijo que "si alguien tiene que tener angustia supongo que será la persona que habló de angustias, porque se le acaba el tiempo y encuentra a un pueblo que poco a poco va tomando conciencia y rechaza políticas de privatización".
Las divergencias políticas entre ambos mandatarios, han provocado roces entre los Gobiernos en los últimos meses.
Entre las discrepancias que han mantenido, se encuentran las de tipo comercial, de integración, por patrimonio cultural y diplomáticas. Estas últimas por la concesión de asilo político en Perú a prófugos de la justicia boliviana, entre ellos el ex candidato presidencial, Manfred Reyes Villa, que usó Perú como catapulta para escapar hacia Estados Unidos.
