16 de abril 2009. - Durante su intervención como invitado en la Cumbre del Alba que se realiza en la ciudad de Cumaná, Miguel d'Escoto, presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, agradeció al presidente venezolano Hugo Chávez por la invitación y felicitó especialmente a Evo Morales de encontrarse en perfecto estado de salud, luego de heroicamente realizar una huelga de hambre por su país.
d'Escoto coincidió con Chávez que lo fundamental en esta reunión es el tema de la crisis. "La crisis no necesariamente tiene que ser el umbral a una tragedia humanitaria, deberían ser oportunidades para tomar un nuevo rumbo Fidel", dijo y declaró que eso es lo que está tratando de hacer, por voluntad de estos países y gobiernos, como presidente de la Asamblea General de la ONU.
"Naciones Unidas es una dictadura. Nuestro hermano y gran maestro Fidel Castro hace mucho tiempo que viene hablando de la necesidad de democratizar las Naciones Unidas". E indicó que ese es el objetivo fundamental que se han propuesto.
Se refirió a esos "que siempre andan con la cancioncita de la democracia y que ponen la democracia como condicionamiento para sus propósitos, esos que están dispuestos a asesinar a cientos de miles de seres humanos supuestamente en haras de la democracia ponen todos los obstáculos imaginables para impedir la democratización de la ONU" enfatizó d'Escoto y afirmó que eso es algo que lo repite constantemente en la Asamblea General.
Contó que a los días que asumió la presidencia estalló esta crisis financiera, y que tomó como dos meses para que empezaran a reconocer que se trataba también de una crisis econoómica.
Declaró que históricamente las discusiones sobre asuntos económicos estaban excluidas de la Asamblea General, ya que estaban exclusivamente reservados para las instituciones de Bretton Woods. Él pensó que era increíble que la organización mundial más importante no tuviera nada que decir; entonces armó un dialogo interactivo con los mejores economistas del mundo, pero a esta propuesta "se opusieron todos los que siempre se oponen a todo lo que quiero hacer, Estados Unidos y Europa", expresó; e indicó que de todos modos contó que lo hicieron igual y con mucho éxito.
Contó que en Doha, Qatar hicieron algo sin precedentes; allí 153 países miembros de la ONU lo mandataron a organizar una reunión para tratar el tema de la crisis y su impacto. "Eso es algo que jamas en la historia de la ONU sucedió, expresó.
Manifestó que se llegó al punto en el cual lo que pueden hacer ellos como ONU ha llegado a su máximo nivel, y que ahora depende de lo que hagan los presidentes.
Por último, el representante de la ONU aprovechó la ocasión para invitar a los jefes de Estado y de Gobierno de todos los países del Alba para que acudan a la reunión extraordinaria para discutir las medidas que deben adoptar las naciones para enfrentar la crisis del capitalismo mundial.
“Esta es la primera vez en la historia que la política económica y financiera mundial no será fijada o impuesta por el que ganó la última guerra como siempre había sido y esa reunión de la Asamblea de la ONU puede ser la primera vez y yo creo que eso sólo será posible si los presidentes acuden", dijo.
"Es por eso que yo quisiera que todos los presidentes y primeros ministros aquí presentes asistan a esta reunión”, instó.
La propuesta venezolana de convocar una conferencia mundial sobre la crisis financiera fue aprobada por consenso el pasado martes 7 de abril por la Asamblea General de la ONU.