04 de octubre 2009. -El secretario general de la Organización de Estados Americanos (OEA), José Miguel Insulza, afirmó que la reunión que sostuvo en secreto, la semana pasada, con el dictador de Honduras, Roberto Micheletti, tuvo como objetivo promover una iniciativa para fomentar el diálogo y buscar una solución a la crisis política que vive el pueblo hondureño tras el golpe de Estado contra el presidente constitucional Manuel Zelaya.
Insulza señaló en un comunicado que el encuentro "tuvo por objeto promover un diálogo entre las partes en conflicto a fin de restablecer la democracia y el orden constitucional en Honduras". La reunión tuvo lugar en la base militar de Palmerola, base estadounidense instaurada en Honduras al norte de Tegucigalpa.
Para el próximo miércoles siete de octubre, se tiene previsto que viaje una comisión de cancilleres de la OEA junto con el secretario general de la organización. La gestión de Insulza se enmarca en "la estricta observancia del mandato entregado (...) por la Asamblea General de la OEA del pasado 4 de julio" para intentar resolver la crisis, afirma el comunicado.
La reunión secreta fue anunciada el pasado viernes por el presidente de facto de Honduras, Roberto Micheletti, quien en una referencia escueta sobre el encuentro, expresó "hablamos de todo un poco" .
La OEA se encuentra trabajando para restablecer el orden constitucional en dicho país desde el pasado mes de junio cuando cuando se dio el golpe de Estado propiciado por grupos políticos y empresariales conservadores hondureños y ejecutado por las Fuerzas militares de ese país centroamericano.
El organismo promueve el Acuerdo de San Jose, iniciativa del presidente costarricense Oscar Arias. El pacto prevé, entre otros puntos, el retorno al poder del derrocado presidente Manuel Zelaya, quien se encuentra refugiado en la embajada de Brasil en Tegucigalpa desde el 21 de septiembre del presente año.
