28/11.- La Plataforma por la Nulidad del Arco Minero del Orinoco se pronuncio en relación a las sanciones anunciadas por el Departamento del Tesoro estadounidense en relación al comercio de oro venezolano. En el pronunciamiento se explican las razones de éstas sanciones y se denuncia el proceso de criminalización dirigido a quienes se ha opuesto abiertamente a éste proyecto.
El Estado "víctima" y el hostigamiento a la disidencia anti-extractivista
El pasado 1 de noviembre de 2018 el gobierno de EEUU aprobó, mediante una orden ejecutiva firmada por Donald Trump, sanciones contra los intercambios comerciales vinculados al oro venezolano. El objetivo de esa medida es impedir que ciudadanos estadounidenses se involucren con "transacciones fraudulentas y corruptas" relacionadas con el precioso metal.
En dicha orden ejecutiva se plantea bloquear: "Toda propiedad e intereses en propiedad de cualquier persona que determine la Secretaría del Tesoro, en consultas con el Secretario de Estado" de aquellos sujetos o instancias que operen en el sector aurífero venezolano, así como aquellos que estén vinculados directa o indirectamente con dichas transacciones comerciales (1).
Estado "víctima" y hostigador
Tales sanciones impactan directa y negativamente al estamento gubernamental, que ha encontrado en la explotación ilegal-legal del oro una fuente de enriquecimiento privado y de sostén material para el ejercicio del poder en Venezuela. El opresor se asume en un rol de oprimido y asevera públicamente que ¨ésta medida demente impide que la nación suramericana use los recursos que tiene en divisas para costear la adquisición de medicamentos para los venezolanos" (2). Obviando el hecho que la escasez de medicinas es una terrible problemática que se viene denunciando con fuerza desde 2014, lo que resulta inadmisible de dicho discurso es que se afirme tajantemente que esos recursos de la renta serán destinados para la compra de medicamentos. Cuando año tras año, el Ejecutivo nacional ha optado por reducir las importaciones con el fiel objetivo de pagar miles de millones de dólares de deuda externa, ilegal e ilegítima, contraída a espaldas del pueblo venezolano.
En segundo lugar ante la manifiesta ineptitud, incapacidad e indolencia que muestran frente a la destrucción del país, la cúpula gobernante y sus operadores políticos se dedican a atacar uno de los eslabones más vulnerables: la disidencia política. Diversos voceros oficialistas han calificado las sanciones como criminales y, prácticamente, han responsabilizado de las mismas a todo el movimiento de activistas y organizaciones que vienen denunciando el Arco Minero Orinoco (A.M.O) desde su promulgación. El A.M.O. se ha convertido en la zona de uno de los principales negocios desarrollados por factores particulares que ocupan puestos estratégicos en instituciones del Estado (administración pública, fuerzas armadas, etc.), incursos en distintas tramas de violencia y represión. Aplicando una lógica de guerra en defensa de las ganancias, con la cual se perciben conspiraciones en cada rincón del país, avanzan comunicacionalmente con su campaña de criminalización en la que le achacan a quienes nos oponemos al extractivismo, la responsabilidad de las sanciones. El ataque desmedido nos parece una táctica distractora destinada a desviar la atención de la población de la verdadera problemática.
La Plataforma por la Nulidad del Arco Minero es una organización autónoma y diversa conformada por individuos genuinamente preocupados por la realidad del país, sensibilizados ante la catástrofe económica y socio-ambiental que vienen sufriendo los habitantes de los estados Delta Amacuro, Bolívar y Amazonas en la última década. Desde 2016 venimos advirtiendo, en conjunto con otras organizaciones y luchadores sociales, sobre las terribles consecuencias que sufriría la población con la implementación del proyecto A.M.O. Tristemente hoy la realidad es más atroz y dolorosa de lo que pudimos advertir en aquel momento: proliferan enfermedades como la difteria y el sarampión; la malaria se ha convertido en una epidemia nacional que ya este año supera los 500.000 casos (3); los municipios mineros son los más desiguales y con mayor cantidad de muertes por armas de fuego; ha aumentado la población con hidrargirismo, cuyas peores consecuencias las padecerán las venideras generaciones, la deforestación y contaminación de áreas y ríos importantes ya se tornan irreversibles. A esto debemos agregar el hecho de que la impunidad imperante ha generado las condiciones para que se normalicen las violaciones de derechos humanos y los crímenes de lesa humanidad en la región. Vale la pena recordar que ya a los pocos días de haberse publicado el decreto 2248 había ocurrido la "Masacre de Tumeremo". Desde entonces las denuncias de torturas, fosas comunes y masacres se hacen cada vez más recurrentes y alarmantes; la más reciente ocurrida en octubre de 2018 en Tumeremo (4).
El Arco Minero y el conflicto internacional
El desastre administrativo y de gestión, la corrupción y los negocios ilícitos quebraron la industria petrolera nacional (PDVSA), por lo que el Ejecutivo ha buscado desarrollar a grandes costos los negocios en el territorio A.M.O., con la expectativa de aumentar su flujo de capital. Desde su creación en febrero de 2016, la dinámica económica en la zona A.M.O. se ha desarrollado en los límites entre la ilegalidad y el crimen, mutando progresivamente hacia tramas de violencia, desplazamiento y despojo que se complejizan con el transcurrir del tiempo. El declive catastrófico de PDVSA, el aislamiento internacional del gobierno y las sanciones financieras impuestas por EEUU en 2017, han sido factores determinantes para que los negocios irregulares se vuelvan un sostén importante de los sectores que controlan el resquebrajado aparato estatal venezolano; siendo la extracción y comercialización del oro una de las actividades más importantes.
El problema central no son las legítimas críticas o denuncias ciudadanas, el problema es que el gobierno busca respaldar sus acciones amparándose en un discurso y vendiendo una imagen internacional con los cuales promueve un modelo minero que es ilegal e inconstitucional. Dicha iniciativa no cuenta con las debidas consultas ni estudios de impacto, viola la soberanía nacional flexibilizando las aduanas, aranceles e impuestos, secciona el territorio dándole poderes especiales al estamento militar y cercena los derechos constitucionales de todos los venezolanos. Es decir, el gobierno busca refugiarse en una actividad económica sustentada en el crimen y la violencia, vulnerando los derechos humanos, cuyos impactos ambientales por contaminación y migración de ciudadanos enfermos se han convertido en un problema sanitario de carácter regional, principalmente para Colombia, Brasil y países del Caribe.
Desde la creación por decreto del territorio AMO, se viene consolidando un mecanismo de extracción "legal-ilegal" expansivo y creciente, pero sin duda alguna las recientes sanciones dificultan su proceso de consolidación, llegando a restringir las opciones de posibles rutas de comercialización. Más allá de formalidades diplomáticas o disputas políticas en organismos como la OEA, el gobierno de Nicolás Maduro ha buscado desesperadamente implementar mecanismos de legitimación y reconocimiento internacional, tarea en la que ha fracasado estrepitosamente. Las medidas del Gobierno Estadounidense son un duro golpe para los sectores de poder que vienen formalizando relaciones comerciales con otros gobiernos, como es el caso de la venta de toneladas de oro a Turquía (5) o de coltán a Italia (6).
Polarización Ideológica: Enfermedad Política Mundial
El anuncio de las sanciones ha venido acompañado de un sarcasmo descarado por parte del presidente de los EEUU, Donald Trump. Parece ser que el mismo discurso polarizante que busca dividir la sociedad entre "buenos" y "malos", es un fenómeno mundial. Sin ningún tipo de escrúpulos, D. Trump acusa a N. Maduro de ser autoritario, ignorando deliberadamente el carácter represivo y autoritario de su mandato con los planes de explotación de nuevos pozos petroleros y la ejecución de planes extractivistas. También lo acusa de violador de derechos humanos, desconociendo las leyes contra los migrantes que él mismo viene impulsando. Y Finalmente lo señala como corrupto, cuando el oro venezolano, así como la deuda externa, después de recorrer varios caminos clandestinos a nivel mundial –paraísos fiscales territoriales o virtuales– termina siendo lavado en las grandes bolsas de valores de Toronto, Chicago, Nueva York y Londres (instituciones privadas donde se negocian los commodities más valiosos y demandados como el oro).
Que las medidas constituyan un duro golpe duro para la cúpula gobernante, no implica necesariamente que estas contribuirán a mejorar nuestra situación. Al contrario, es posible que se intensifique a nivel de represión y violencia, principalmente en la zona A.M.O. y sus adyacencias. El blanco de las medidas no pasa por el bienestar de la sociedad venezolana, sino que persiguen el objetivo de sabotear los negocios de la cúpula gobernante. Enfocadas exclusivamente en obstaculizar el mercado aurífero nacional, estas decisiones penalizadoras sólo servirán de poderoso estímulo para que el comercio aurífero "fluya" por los caminos verdes (rutas de tráfico).
¡Balance catastrófico! Es urgente detener el Arco Minero
El Arco Minero es un proyecto que a casi tres años de su ejecución no ha traído nada positivo para el país. El balance desde el punto de vista de la salud y sanidad, servicios (agua, electricidad, etc.), ingresos, inversiones, cuidado del ambiente y protección de nuestros tesoros naturales (áreas protegidas), ha sido completamente desastroso y trágico. Las promesas de "bienestar, progreso y desarrollo social" que se cumplirían con la puesta en marcha del Arco Minero, se divisan utópicas y prácticamente están enterradas. Sin embargo, el gobierno sigue apostando con todos los recursos de que dispone al desarrollo del modelo minero-extractivista, evidenciando su terquedad, ambición e indolencia. Mientras se mantenga el proyecto del Arco Minero como visión de país, la situación para toda la población venezolana solo empeorará todavía más, sobre todo para los habitantes del sur y las comunidades indígenas que ya se encuentran en grave riesgo.
Hacemos un llamado de alerta al país. Los ambientalistas y defensores de los derechos humanos en Venezuela, así como en el resto de América Latina, estamos bajo amenaza directa y hacemos responsable al gobierno nacional por la integridad los ciudadanos que nos hemos opuesto explícitamente a la implementación de éste proyecto. Lamentablemente se han hecho cada vez más evidentes las prácticas de terrorismo de Estado, asociadas con una política de criminalización de las posturas críticas y de amedrentamiento contra cualquier germen de oposición política autónoma. A pesar de la arremetida represiva, desde la Plataforma por la nulidad del Arco Minero seguiremos denunciando y apostando a construir redes de solidaridad y cooperación ciudadana, que nos permitan resistir a los embates y planes de ajuste que viene aplicando el Ejecutivo con toda su maquinaria, a conformar un tejido de redes sociales que denuncie las atrocidades, que se articule en torno a puntos comunes y que proponga futuras alternativas sustentables y sostenibles en pro de la reconstrucción de nuestro país.
Referencias
(1) Efecto Cocuyo (noviembre 1, 2018). "Qué contemplan las sanciones de EEUU contra el oro venezolano". Disponible en:
http://efectococuyo.com/principales/que-contemplan-las-sanciones-de-eeuu-contra-el-oro-venezolano/
(2) Hispan TV (noviembre 3, 2018). "Venezuela se defiende de sanciones ‘dementes y criminales’ de EEUU". Disponible en:
https://www.hispantv.com/noticias/venezuela/392512/maduro-eeuu-sanciones-economicas-oro
Telesur (noviembre 2, 2018). "Pdte. Nicolás Maduro: Sanciones de EE.UU. contra Venezuela son criminales". Disponible en:
(3) Boletín Epidemiologico 2016: https://www.ovsalud.org/descargas/publicaciones/documentos-oficiales/Boletin-Epidemiologico-2016.pdf
(4) Aporrea (octubre 16, 2018). "Masacre en minas de Tumeremo dejó aproximadamente 16 muertos y 6 heridos". Agencias, republicado por aporrea.org. Disponible en: https://www.aporrea.org/ddhh/n332983.html
(5) Alessandro Di Stasio (julio 20, 2018). "Venezuela exporta a Turquía el oro del Arco Minero". Efecto Cocuyo. Disponible en:
http://efectococuyo.com/economia/venezuela-exporta-a-turquia-el-oro-del-arco-minero/
(6) Sputnik (mayo 11, 2018). "Primera exportación de coltán desde Venezuela tiene como destino Italia". Disponible en: