Fort Lauderdale, Florida, Estados Unidos, 07 Jun. ABN (Raúl Cazal).- La delegación de Venezuela en la XXXV Asamblea General de la Organización de Estados Americanos (OEA) evitó que el Gobierno de Estados Unidos (EEUU) se burle de los acuerdos de la Carta Fundacional de la OEA y de la Carta Democrática Interamericana.

Las pretensiones de EEUU de imponer que Organizaciones No Gubernamentales (ONG) sean las certificadoras de las democracias se ha visto truncada con la sólida posición de Venezuela, adherida abiertamente por México, Brasil y Argentina.

El canciller venezolano, Alí Rodríguez Araque, ha explicado reiteradamente en los pasillos del Centro de Convenciones de Fort Lauderdale, en la sesión ordinaria de la OEA, en los salones de reuniones y en la sala de prensa que las instituciones privadas no pueden estar sobre los Estados porque esto equivaldría a privatizar la organización.

Las ONG son organismos que tienen diferentes intereses dentro de la sociedad y se ha querido emparentar el término de sociedad civil a ciertas organizaciones que tienen participación política en la sociedad, como el caso de Súmate en Venezuela.

El hecho de que estas organizaciones participen políticamente no le preocupa al canciller Rodríguez Araque ya que éstas no tienen las obligaciones de los partidos políticos como lo establece la Ley Electoral, aunque se benefician de las ventajas de las ONG.

Además hay que tomar en cuenta quién financia a las ONG.

Hay una expresión en inglés que al canciller le gusta recordar: "Quien hace el cheque tiene el control", en clara alusión a la organización política Súmate que ha recibido fondos de la National Endowment for Democracy (Fondo de apoyo para la Democracia, o NED, por sus siglas en inglés).

La NED, a su vez, es financiada por el Congreso de Estados Unidos y, casualmente, en estos dos últimos períodos el Partido Republicano, del cual proviene políticamente el Presidente estadounidense, George W. Bush, es el que tiene el control y decide el presupuesto de esta institución que se asume independiente del Gobierno de EEUU.

En el caso de Venezuela, en septiembre de 2003 Súmate recibió 53 mil 400 dólares de la NED con el propósito de recoger 20% de las firmas que se requerían para activar el mecanismo de referéndum revocatorio establecido en la Constitución Bolivariana de Venezuela.

El 15 de agosto de 2004, el Presidente de la República, Hugo Chávez Frías, obtuvo la aprobación de 60% del electorado y logró que su mandato continuara hasta el año 2006.

Súmate había desaparecido de la escena política en los últimos meses debido a la aplastante victoria de Chávez Frías en el referéndum y en las elecciones regionales de gobernadores y alcaldes del 30 de octubre de 2004.

Pero, repentinamente, esta organización política reaparece cuando su presidenta, María Corina Machado, es retratada en el Salón Oval con el Presidente Bush.

Ni siquiera participó en el Foro Hemisférico de la Sociedad Civil, organizado por la OEA, que se realizó entre el 11 y 12 de abril de 2005 en la ciudad de Washington y ahora tiene un protagonismo como ninguna de las 132 ONG restantes que fueron invitadas al diálogo con los jefes de Delegación de la XXXV Asamblea General de la organización.

María Corina Machado ha logrado retratarse, ahora, con la secretaria de

Estado estadounidense, Condoleezza Rice, este pasado lunes.

Tras la reunión y las fotos de estas dos señoras hay una estrategia de publicitar el proyecto de intervenir en la soberanía de la nación venezolana, con lo que se hace caso omiso, por parte del Gobierno de EEUU, al acuerdo de la no injerencia en los asuntos internos de los países acordado en la Carta Fundacional de la OEA.

La derrota del Gobierno de Bush estaba anunciada, a pesar de que el nuevo secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, quien tuvo el apoyo irrrestricto del Presidente Hugo Chávez Frías para su elección, abrió la posibilidad, en su discurso inaugural, de que las sociedades civiles tengan mayor participación en la organización.

El tema a debatir ahora, según lo dijo Rodríguez Araque, es el concepto de sociedad civil, por lo que propuso que se estudie la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela ya que en ella están contenidos valores genuinos de la democracia. En ella se expresa que los ciudadanos escogen libremente a sus representantes y al mismo tiempo tienen el derecho a la participación que es protagónica.

Según el canciller venezolano, es un exabrupto considerar que una organización civil se erija en representación de una sociedad de 24 millones de ciudadanos.