¡Azúcar!! Gritaría la negra Celia Cruz si viviera.
Porque coño, hasta los más radicales de izquierda pasan su arrechera cada vez que preguntan en la bodega: ¿Azúcar? Y le dicen: ¡No hay!!! Otros más coños de su madre te aplican el remoquete: ¡Pero tenemos Patria!
Las estrategias de la guerra económica son dinámicas, el gobierno busca papel toilette como loco pero ellos están escondiendo ahora el azúcar.
El gobierno se jacta de que hay aceite y café y otras especias hasta hace poco imposibles, y ellos están escondiendo nuevos productos. Hay que ponerse las pilas Samán querido!!
Resulta y pasa que este pueblo amante de los animales, está sintiendo la crisis en la búsqueda de su alimento, perrarina y gatarina pasaron a ser, junto al azúcar los productos que escasean, con el AGRAVANTE, que cuando aparece, es de otra marca, y ay papito, los perros y los gatos no entienden eso de que hay que comer lo que haiga.
En mi caso particular TENGO en la casa UNA PERRA LLAMADA TIZA, UNA GATA LLAMADA MANCHA Y un pequeño BEBE de un añito llamado EL NEGRITO.
Tanto perros y perras, gatos y gatas, infantes e infantas, no comen sino su MARCA acostumbrada!
Entonces la crisis es diaria:
O a la perra no le gusta la perrarina que encontré pero si la nueva gatarina o al revés, la gata Mancha se come la perrarina, por no decir el bebé, que empezando a caminar lo encontré, la otra tarde, con su pelotica de perrarina en la boca.
Las marcas de leche infantil aparecen y desparecen. Cambiarle la marca de leche a un bebito es un soberano problema: o no se la toma o se la toma y le da diarrea.
Vean pues el conflicto que vivo en casa.
Los adultos, mayoritariamente chavistas asumimos la pela de la guerra económica y defendemos la patria. Pero el desorden doméstico con las mascotas nos está sicoseando.
Hoy salí en mi carro a hacer una diligencia y tuve que salir de la Cota Mil por Altamira: ¡Grave!
Los escuálidos andan con unos niveles de arrechera contenida que rayan en sicosis crónicas. Apenas se ponían en verde los semáforos los conductores de atrás me pegaban el cornetazo infernal. Yo con mi cara bien limpia en el tercer semáforo dije: no me los calo! Abrí la puerta y con una sonrisita vi a la choferesa de la camioneta de atrás y le dije: ¡Lo lamento estoy accidentado! Ah procedí a levantarle el capó a mi carro: Apenas retrocedió y maniobró para pasarme maldiciendo, bajé el capó y me le peque atrás hasta la otra luz roja y apenas se puso en verde: ¡hice justicia carajo!
Alerta que de seguro segurito, pleno, como la luna llena, estos grandes carajos al llegar el 8D nos dejarán sin toallas sanitarias para que todos y todos andemos con las cuaimas histéricas.
Hay que investigar a Roberto Hernández Montoya, quien parece estar acaparando la gatarina para alimentar el gato Ron y a su consorta.
¡Lo que no escasea es Chávez no joda, de eso si hay!!!
¡Chávez vive, la lucha sigue!!!
