Esto que trato de describir, era posible en la IV. Eso llevó unos veinte años años. Es decir, verle la cara en vivo a los corruptos de la IV, fue posible después de un largo embarazo. El embarazo no pudo ocultarse tanto porque se dieron los nacimientos y comenzaron a verse las caras de las mamitas de la corrupción. Ya a los 40 años, la corrupción de la IV era muy visible y los contrastes entre la opulencia, la miseria y el hambre se notaron más claramente.
Le sacaron tanto al país y a la renta, que hoy tienen una vida feliz y sin preocupaciones con un gran patrimonio aquí en su país: Miami.
La preñez de la revolución no pudo ocultarse tanto. Lamentablemente fue a muy temprana edad. Hay cada negocio o cada embarazo temprano, que los de la IV creo que se dicen entre ellos: Fuimos vivos pero muchos rojos rojitos nos ganaron. ¡Amalaya!
Medio Anzoátegui sabe que en el Complejo Industrial José Antonio Anzoátegui de PDVSA, hay una inmensa montaña de coque. Un vivo de PDVSA con otros vivos contratistas que por supuesto son de la derecha, se les ocurrió una brillante idea, que además de ingeniosa es un negocio mejor que comprar con dolares a 1o bolívares y vender a precio de bachaqueros.
La idea que lleva tiempo practicándose con contratistas de la derecha, consiste en sacar coque de esa montaña, esconderlo en un sitio y luego traerlo de nuevo a la montaña. Es como aplicar una nueva versión de ese viejo decir: Si Mahoma no va la montaña, la montaña va donde Mahoma. En este caso, la montaña va y viene a la montaña, sin ir donde Mahoma.
Esos son camiones reales que llevan a esconder el coque y luego traerlo. Hay también camiones fantasmas, que no hace esa tarea, pero aparecen en facturas.Es como el negocio de transporte para los actos del PSUV en Caracas. Una cosa son los autobuses que fectivamente van a Caracas y otros; el total que aparecen en las facturas.
¿Será que PDVSA descubrió que moviendo el coque de un sitio a otro no contamina? ¿Será corrupción? ¿Será una EPS, como casi todas la EPS que van consumiendo recursos y no aportan nada?
Así como sucede con el coque en el complejo Industrial José de Anzoátegui, sucede con otras “ideas”. Son bandas bien estructuradas donde efectivamente se viene produciendo un diálogo muy efectivo y prospero entre rojos rojitos y contratistas que tributan a la derecha. Claro, si fueran contratistas que tributaran al PSUV, también fuera igualmente cuestionable. Seguro que ese tipo también abunda mucho.
@ClaudioElcuaco