El caldo, a pesar de las muchas manos que se han metido, no se pone
morado. Por el contrario se va aclarando en las filas del PSUV.
José Sant Roz colgó un artículo en Aporrea, cuyo título, no digo que
es un poema porque el formato de los poemas tienen otras exigencias,
pero ruido hay. Sant Roz nos suelta esta advertencia:
“Tengan en cuenta, camaradas, que a la inmensa mayoría de las
revoluciones las han derrumbado desde adentro; no las han echado abajo
los enemigos que atacan frontalmente, sino los loquitos (y flojitos)
que poco a poco las van maleando con sus desatinos, las van manejando
(manipulando) desde dentro”
(https://www.aporrea.org/
El economista criollo, que según leí es nada más y nada menos que jefe
de los profesionales y técnicos del PSUV, dice también en un artículo
publicado en Aporrea, que si Chávez “se hubiese enterado que todos los
que estuvieron a su lado utilizando la palabra Revolución, jurándole
que iban a seguir su proyecto político revolucionario y que se
burlaron de él y del país, de seguro algo extraordinario hubiese hecho
contra ellos como ejemplo para el país y el mundo”.
Chávez no está y este economista criollo sólo está seguro, que “algo
extraordinario hubiese hecho (Chávez) contra ellos”. Es muy
lamentable que el supuesto jefe de Profesionales y Técnicos esconda su
complicidad así de esta manera tan deportiva. Uno supone que este
sector del PSUV debería tener FUERZA, capacidad y algo de moral para
afrontar este reto.
No es así; el economista criollo prefiere “que Nicolás Maduro, junto
al Fiscal General de la República haga una batida nacional contra la
corrupción y comience a revisar las cuentas y propiedades de todos sus
ministros y exministros, directores o amigos cercanos al poder para
descubrir los próximos Iseas, Andrades o Ramírez de la Revolución
antes que el Imperio gringo u otro gobierno lo haga. Y eso tiene que
ser antes de que sea demasiado tarde”
(https://www.aporrea.org/
Si eso que prefiere el economista criollo sucediera que no va a
suceder, el PSUV se quedaría vació en la dirección política y él, se
quedaría hablando solo.
Algunos corruptos del PSUV caen después que se van o cuando caen en
desgracia. Tal vez si se hace esta batida que sugiere el economista
criollo, el único que caiga sea Elías Jaua porque entró en desgracia
con el alto mando político al mostrar su incomodidad por ciertas
decisiones en el gobierno y el PSUV. Es posible que el PSUV le cobre
más adelante esta osadía.
Si Maduro y el fiscal toman la propuesta del economista criollo, la
“revolución” cae, como lo dice Sant Roz. Cae desde adentro porque es
inauditable.