Con la anuencia del equipo de Aporrea y las amigas y amigos, que nos
leen, creo conveniente hacer una especie de auto-presentación, pues
así como he recibido felicitaciones múltiples por algunos de mis escritos,
también he recibido críticas por correos descalificativas y ofensivas
por quienes no tienen el menor recato en acusar sin conocer a la persona
de trato y comunicación, trabajé en la Administración Pública, administré
y nadé en dinero del erario público, no tengo fincas, haciendas, dinero
ni casa, vivo alquilado con mi señora, mis hijos gracias al Dios de
la Naturaleza son profesionales y todos trabajan, yo escribí una novela,
sembré varios árboles y vivo de mi jubilación, me gradué de bachiller
a los 40, trabajaba y estudiaba, me hice a punta de cincel, desde joven
he sido de izquierda, he disfrutado de la lectura y escritura desde
muchacho, leo la historia de Bolívar, Don Simón Rodríguez, Marx,
Alexis Carrel, El Quijote, Los Miserables, Literatura, Filosofía, Política
y diversas y otras tantas lecturas, aún leo y escribo, poco veo TV,
pienso soy autodidacta con orgullo, mejor que tener pruritos profesionales,
que enferman a muchos. Fundamos un Sindicato de Empleados al margen
de las líneas del pulpo de la CTV, nos aplastaron, me cobraron mi posición
y me echaron, gané la demanda, sin embargo no me reincorporaron con
28 años de servicio, esa era la democracia representativa, pero no
nos doblegamos, de manera que no seré Santo, como humano no hay quien
no cometa errores, pero algo de moral y ética me acompañan a mis 70,
y con esos principios me iré al infinito. Me hice a algunas carreras
técnicas, que ejercí, logré ser comunicador social, TSU en Publicidad
y Mercadeo, Locutor, cursos, corresponsal de guerra y tantas otras cosas
útiles en la escuela de la vida. Cuando comenté lo de Lina Ron, traté
de no descalificarla en lo personal, solo referí la parte legal y la
relación psicológica con su actuación en grupo, la crítica fue por
efectuar actos contra la ley y posibles perjuicios a la Revolución.
Me disculpan este preámbulo, pero lo consideré oportuno, porque como
no soy hombre público, quienes me criticaron, pensaron que era alienado,
amigo de la alabanza, fanático político, esclavo del dictador doméstico
y otras tantas cosas de insultante descalificación. Mil disculpas,
porque no somos amigos de la primera persona, del singular.
LA CORRUPCIÓN ES
UNA LACRA SOCIAL: que heredamos del feudalismo europeo, su colonización
en la llamada conquista y posteriormente reafirmado por el Imperio Capitalista,
del norte que con el pretexto de América para los americanos, siguieron
explotando nuestras riquezas y echaron a las colonias de Europa; tal
cual como lo predijo nuestro Libertador en su gesta de emancipación:
cartas, proclamas, advertencias, discursos políticos, pensamientos
y valiosos documentos que hoy, son guía de nuestros pueblos para terminar
de consolidar sus mandatos, pues Bolívar se fue al infinito a muy temprana
edad, tenía que haber vivido 40 años más para haber consolidado su
revolución; sin embargo hoy renace su inmortalidad y su espada anda
por la América Latina y por el mundo.
A las lacras de la
corrupción también se agregan la violencia, delincuencia y otros tantos
vicios que heredamos de ese descubrimiento de regresión en vez de evolución,
funestos males de un decadente sistema feudal, reencarnado por los conquistadores
españoles en nuestra América. La esclavitud con los negros y las masacres
a los indígenas, fueron formas aberrantes de corrupción, violencia
y delincuencia contra los originarios a los que perseguían, asesinaban
para robar las riquezas naturales. De manera que, estos flagelos son
importados e impuestos por la España del reino Católico y medieval,
por la influencia de la monarquía agraria, Colombia es la herencia
más resaltante que queda del feudalismo agrario. Y aún echados por
Bolívar y los héroes independentistas, Francia, Inglaterra y Portugal
tenían las garras afiladas para no soltar la presa de este continente,
pues sabían de los privilegios naturales, ante la decadencia Española,
ellos querían el turno, pero los yanquis se las ingeniaron para tomar
su lugar.
Nuestra Constitución contempló el ¨Poder Ciudadano¨ inspiración en el poder moral que Bolívar exaltó en el profético Discurso de Angostura, sabía nuestro Libertador del peligro que nos acechaba por la CORRUPCIÓN COMO LACRA SOCIAL, anunciaba Bolívar, que de nada valen las normas escritas si no se aplican o si quienes las promulgan actúan con espíritu corrompido. La ley si no se ejecuta no es ley aun cuando se grabe sobre piedra. De no ser así, la sociedad latinoamericana sería la más justa del mundo, pues muchas veces nos sobra legislación social, pero nos faltan políticos y jueces de honor y coraje.
Nuestro Libertador sabia de la crisis moral y la carencia de educación de nuestros pueblos. Esos males sociales lo impulsaron a redactar en 1819, en Angostura su Proyecto de ¨Poder Moral¨, torpedeado por quienes nadaban en los vicios administrativos.
¨LA HACIENDA NACIONAL NO ES DE QUIEN OS GOBIERNA. TODOS LOS DEPOSITARIOS DE NUESTROS INTERESES DEBEN DEMOSTRAR EL USO QUE HAN HECHO DE ELLOS¨. Simón Bolívar.
Don Simón Rodríguez,
también dejó plasmadas su ideas sobre para que en la educación
los maestros, no hicieran de sus discípulos sirvientes domésticos,
proclives a caer en vicios y desmanes, no consientan que el comercio
asalaríe por su cuenta a los obreros para reducirlos a la condición
de esclavos.
Hemos insistido con
humildad, sobre los problemas y peligros de nuestra Revolución con
la impunidad, la anarquía al no actuar con el imperio de la ley, como
bien lo contempla nuestra Constitución, contra estos vicios malignos
que socaban las bases legales de la República. La palabra corrupción
es muy popular, anda de boca en boca, el vulgo comenta haciéndose portador
de los rumores que la mayoría de las veces, son lanzados por los medios
de comunicación, en otras oportunidades sustentados con investigaciones
bien fundamentadas, otras son informaciones que lanzan con fines netamente
políticos para descalificar, con difamaciones y calumnias, que no tienen
asidero legal, forman parte de la guerra psicológica y mediática con
fines oscuros y bien develados.
LA CORRUPCIÓN, a nuestro
entender no es difícil detectarla, está la ley para su combate, existe
el poder moral, la contraloría, la fiscalía, los especialistas para
investigarla y los tribunales para ejecutar y hacer cumplir la ley,
además de ciertas normas como es la declaración jurada de bienes para
todo funcionario público, esta importante norma permite saber con qué
bienes se llega y con cuantos se va. Qué estos pasos no sean cumplidos
con rigor, son fallas de funcionarios que deben hacer cumplir los requisitos
establecidos, la contraloría popular, es un gran avance para contribuir
a evitar la corrupción. Quizá las acusaciones que se insertan en los
medios, por sujetos políticos adversos al gobierno que tienen derechos
a denunciar la corrupción, pero documentados, con pruebas fehacientes,
no con fines inconfesables y netamente políticos, es decir, descalificar
a personas o funcionarios del gobierno sin apegarse a la ley. Cuando
estas situaciones se presenten y los acusados no utilicen la ley para
defenderse, es decir responder con la ley en la mano la calumnia, si
no se hace o se calla, es otorgar y dar píe para seguirse en el juego
de la mentira y al final se contribuye con el flagelo.
En mi época de funcionario
público, de dirigente social, de columnista en diarios regionales donde
estuve, escribí bastante y denuncié los peligros de este
flagelo, siempre exaltando a nuestro Libertador y las leyes, fue en
la cuarta República, guardo mis artículos sobre esa y otra temática
de interés nacional, claro nunca acusé a nadie en particular, no tengo
vocación de investigación policial y menos sin tener las pruebas,
pero se evidenciaban los hechos y era necesario los alertas, una vez
dijimos en nuestro sindicato de izquierda,-qué la corrupción iba tan
rápido y tan peligrosa contra la Patria, que ya no había dinero para
pagarles a los trabajadores de la Administración Pública-. Y eso lo
vivimos, habrá quienes se olvidaron, pero fue con la Revolución que
los entuertos se corrigieron y se recobró la quiebra que ya estaba
en el abismo.
LA CORRUPCIÓN COMO
LACRA SOCIAL, nos sigue afectando, sigue siendo un peligro contra la
consolidación de la República, contra las libertades, la justicia
social, la democracia participativa, la economía nacional, la seguridad
social de los trabajadores, para los jubilados y pensionados, el trabajo
y las finanzas públicas, hasta contra la economía privada que sirve
a la República, las actividades del campo representadas por la producción
agropecuaria, contra la educación del pueblo, la salud, la ciencia,
la tecnología, la investigación, los profesionales, perjudica a las
mayorías, conspira contra las leyes, favorece a los que transitan en
el lodazal de la corrupción.
Tomemos la palabra
del Presidente para alertar, ejercer el derecho a la auto-crítica y
la crítica constructiva, sin llegar a estados de ánimo que nos hagan
al extremo del fanatismo, desbocados y al margen de las leyes sociales.
En estos días hablamos del problema de las NOTARIAS Y REGISTRADURIAS,
que fueron objeto de algunas medidas en relación a sueldos y controles
fiscales, y se ha desatado una serie de problemas que están afectando
al público que acude a solicitar sus servicios, por el surgimiento
de una especie de operación morrocoy, trabas burocráticas, exigencias
de dinero extra para agilizar trámites, colas, gestores como siempre
apoyados por profesionales que ya no ejercen, estos son informaciones
que se escuchan por quienes utilizan por necesidad el registro o notariado
de documentos, al parecer en cada Estado ponen sus condiciones al margen
de la ley, hay anarquía que se presta para la corrupción, a quienes
competa deben investigar, para corregir estas anomalías, al parecer
los trabajadores de estos entes no están contestes con los sueldos
establecidos, antes eran libres sin limitaciones. Los comentarios son
de suma gravedad, han intervenido algunas notarias por irregularidades,
esperamos que se solucionen los inconvenientes de acuerdo a normativas
legales.
Las investigaciones
de contraloría social, Poder Moral y autoridades competentes para minimizar
este cáncer sin remedio, el trabajo debe pasar por todas aquellas instituciones
donde hayan comentarios o rumores que hagan sospechar de manejos dolosos
contra la Hacienda Nacional y sobre todo en aquellos organismos sensibles
a la corrupción por las altas sumas de dinero que se administran, grandes
contratos, entes crediticios, recordemos los graves problemas de corrupción
que hubo con el dinero de las pensiones, que afectaba a viejos y viejitas,
que hasta morían sin disfrute de sus beneficios, la malversación de
fondos con las prestaciones sociales que nunca pagaban, el tráfico
de influencias y las organizaciones mafiosas que a veces se organizan
muy bien y burlan los controles legales.
La impunidad, la anarquía, la desidia, el dejar pasar y no controlar, el incumplimiento de las leyes, han afectado y siguen socavando las bases que sostienen y garantizan el desarrollo y nuestra independencia, la CORRUPCIÓN ES VIOLENCIA, DELINCUENCIA AL IGUAL QUE LA ESPECULACIÓN, EL TRAFICO DE DROGAS, EL CONTRABANDO, EL SECUESTRO, EL ASESINATO, EL SICARIATO Y EL HAMPA ORGANIZADA QUE ROBA Y MATA, NO COMO ANTAÑO ROBABAN PERO RESPETABAN LA VIDA.
saguete@gmail.com