I
…Y pensaron silenciarme
virus en mi cuerpo
apagarme como mortal
por lo que grito y protesto,
pretendiendo engañarme
con imagen de un cuento
así creyeron burlarse
de lo que deploro
en mi pensamiento;
¡Profetas que rezan,
tras el odio y el infierno!
amantes de un Dios raro
de un Dios del dinero
que ellos mismos crearon
como crearon el miedo…
II
Es que son invisibles
los que dan el pellejo
vulnerables en calles
a expensas de un riesgo
que van por el pan de su día
sin suerte al silencio
y tapan su boca sin comer
bebiendo del aire
al oscuro cielo…
¿Qué me quede en casa?
sin tocar las manos
de gente que quiero
ciudades vacías,
de fosas comunes
¿y sin ver a mis viejos?
así pretenden callarme
con hospital de amenaza
en solitario al desvelo
con reposo de angustia
con hambre
y con miedo…
III
Ronda un virus letal
y no niego
pero peor el hombre
con balas, garrotazo y hierro
que desprecia la piel de aquel
a quien “cara e´culpable”
ve al musulmán
chino, latino o negro,
y que tiene prejuicios
y no mide lo bueno,
y no oculta su odio
exterminando de a poco
profilaxia en silencio
con su plan macabro contado
cual olímpico medallero
el lugar que ocupa su record
para el sepulcro sin deudos…
IV
No me pidan que calle
cuando no puedo
ni que deje respirar
como Floyd en el suelo,
ni me digan vagamundo
por ser de este pueblo
igual que los sufridos de allá
que llaman terroristas
excluidos sin sueños,
cuando aquí en mi tierra
en destrozos e incendios
quemaron humanos
y les llamaron los buenos
vara que mide la misma historia
la misma que se ha devuelto
por lo avalado hace poco
hace poco en el tiempo…
V
No quiero tapar mi boca
ni quedarme al silencio
porque honro a los batas blancas
que también están muriendo,
y no por temor al virus
que al mundo va descubriendo
dando voz a los mudos,
bullicio a los sordos,
como luz a los ciegos
para poner un pueblo en la calle
atento a nuevos tiempos;
me tapo la boca por cuidar de los míos
y lo hago con respeto
sin ver la televisión que engañe
con manipulación de un juego
novelas truculentas
y noticiero cómplice
cuando invisibles gritan
sin guion y con tapaboca
¡por justicia en canto
y no por miedo!