"La libertad es siempre la libertad

de aquellos que piensan de otra manera"

Rosa Luxemburgo

Gran consternación generaron las declaraciones del Fiscal General de la Nación en torno a las investigaciones y los resultados hasta ahora logrados en torno a la desaparición del Camarada Carlos Lanz. No sólo las razones por las cuales fue asesinado, sino desaparecido con una saña digna de una película de terror.

El asesinato y posterior desaparición de Carlos Lanz producen un sentimiento de dolor, rabia y tristeza en los sectores que mantenemos una visión y praxis consustanciada con el amor a la humanidad, el respeto a las ideas, la honestidad, igualdad principios éticos y morales de la visión socialista que preconizaba y practicaba el camarada Lanz.

El caso del camarada Lanz, por la trascendencia del mismo, pone en el tapete de la diatriba política, no sólo por ser promovido por su compañera de vida, quien estaba vinculada con grupos revolucionarios, sino por el prontuario de actos de corrupción a realizados a través de instituciones del estado, hechos que se demostraron en las investigaciones del caso y los cuales, siendo voz populi, no fueron denunciados ni por Lanz ni por aquellos que, pudiendo hacerlo prefirieron voltear la vista, y hacerse de ojos ciegos, oídos sordos y mudos. De Lanz es comprensible dada la vinculación afectiva y legal con Mary Cumare. Pero el de su entorno familiar y militantes que estaban al tanto de sus actos es injustificable, legalmente delictivo y éticamente condenado. La moral revolucionaria está por encima de vinculaciones familiares, afectivas, amiguismo…

Esta situación, por la trascendencia de la misma, se convertirá en lo que se dice popularmente "comida para los cochinos" refiriéndonos a aquellos que manejando los medios de comunicación burgueses harán leña del palo caído, y utilizarán sus recursos para atacar la visión socialista, el proyecto bolivariano y por supuesto al gobierno nacional por la permisividad que han tenido en torno a la corrupción de sus funcionarios, cosas que constituyen su Talón de Aquiles y que se han denunciado hasta la saciedad.

Con Venezuela no sólo mantendrá sus medidas coercitivas, el bloqueo (con cierta flexibilidad en ciertas áreas dada la guerra de Ucrania) sino que la guerra mediática se incrementará para desmoralizar a la población, a quienes mantienen una visión revolucionaria, a los militantes.

Pero, hay algo más importante. La necesidad de frenar el auge de los gobiernos populares constituye una necesidad fundamental para el mantenimiento de los mecanismos de dominación, del control económico y político, de la subordinación a sus órdenes. Los E.U. necesita recuperar lo que ellos llaman el "patio trasero" y actuará en consecuencia, para ello utilizará a sus "sicarios" mediáticos, sus "perros de presa" a fin de, a través de ellos, incrementar las críticas y acciones para magnificar el hecho, tratando de enlodar la figura del Camarada Lanz, de los funcionarios del estado en su totalidad (no todos los empleados del Estado son corruptos), de los militantes revolucionarios, del pueblo en general. Es decir, a la democracia participativa y protagónica que nos dejó el Cte. Hugo Chávez y que constituye un modelo para el resto de América Latina.

Creo que con este fúnebre y terrible acontecimiento se reivindica la necesidad de sanear la administración pública, revisar el comportamiento de los funcionarios públicos (Desde los más altos niveles hasta los de menos nivel), de castigar a aquellos "rojos rojitos" que se han anquilosado en el aparato estadal para enriquecerse, para lucrarse, de activar la contraloría social a través de los mecanismos creados para tal fin (Consejos Comunales, Consejos de Trabajadores)

Los partidos y movimientos políticos revolucionarios que apoyan o los que son críticos del gobierno deben convertirse en los "guardianes de la revolución". Deben ser los vigilantes permanentes e incansables de la pulcritud, de la idoneidad de los procesos administrativos del Estado, deben hacer efectivos los procesos de participación y protagonismo social a fin de deshacer los anillos de corrupción, de atropellos, de persecuciones por parte de los funcionarios públicos del Estado y reivindicar con ello el pensamiento de Bolívar, del Che, del Cte. Chávez.

Culmino con la frase del Che, principio moral y ético de la visión socialista "La revolución no se lleva en los labios para vivir de ella, se lleva en el corazón para morir por ella"

Hasta la victoria siempre. Venceremos