La situación actual en Haití, el país más pobre de toda la América, refleja ante el concierto de la Política Continental Latinoamérica el fracaso de los organismos regionales y de los Estados Nacionales del continente. Con la agravante del yugo, la imposición y el poder de los EEUU en dirigir y acondicionar la política exterior del resto de los países ante la dramática y trágica situación política, económica y social en Haití. Salvo, la Cuba de Fidel y la Venezuela Bolivariana de Hugo Chávez, el resto de los países, aun mantienen una doble moral, un doble juego entre sí, actúan con la cabeza gacha para no “molestar” al imperio.
Si ante Haití actuamos de esa forma, ¿cuándo podremos ayudar, presionar ó exigir a lo interno de la crisis de Haití? ¿Cómo podemos fijar posición sobre los oligarcas en Bolivia? ¿Cómo cambiar las cosas y llevar la paz dentro de la sesentona crisis en Colombia?
Si la bandera mas izada y tan reclama, defendida y vendida por los EEUU es la democracia (que ni ellos mismos la practican) por qué dentro del marco de los acuerdos regionales no se dan los mecanismos ni se generan políticas de carácter obligatorio para todas las partes, que hacen vida interna dentro del juego político y bajo el imperio de las reglas democráticas en el interior de cada nación.
Si a lo interno imperan normas jurídicas que regulan y enmarcan las actuaciones, qué pasa, que hoy por hoy no se da esa tan necesitada ayuda, llámese ó califíquese como se desee, Haití clama por una mano sincera, franca y solidaria. Claro, debemos sacar del juego al principal responsable de todas las tragedias de la que ha padecido y sufre también América Latina. Esto no quiere decir, que es una imposición supranacional de una exclusiva corriente ideológica, se trata de hacer efectiva y darle vigente con su aplicación y vivencia las leyes naturales del estado de derecho, el respeto de los derechos humanos, el derecho al trabajo, a la educación, a la vivienda, el de soberanía e independencia. Sin ser contrario al esfuerzo en la búsqueda del mantenimiento de la paz y de llevar un equilibrio a lo interno de Haití y de nuestras naciones, espero que la base moral y ética empujen en todo lo ancho del continente para llevar, mantener y desarrollar los principios y fundamentos de la democracia, generar paz en el clima político, la legitimidad en las instituciones, el desarrollo social y económicos de nuestros pueblos y el respeto y promoción de valores culturales y religiosos.
En este sentido, la OEA debe ser revisada, redundada, el grupo de Ríos, la Comunidad Andina de Naciones y el MERCOSUR, porque de nada ó muy poco han sido útiles, es qué antes ó después de la creación de la OEA. Por ejemplo, cuántas dictaduras habían y, cuántas más aparecieron, sin que sus violaciones a la vida, a las leyes fueran atroces, perversas y condenadas desde todo punto de vista ético y moral. ¿De qué sirvió la OEA para los países de la región? Es por ello, que de seguir cómo están las cosas en Haití, Bolivia ó Colombia, es decretar la nulidad y la incompatibilidad de los organismos regionales, por su poca, escasa o casi nula efectividad. Además, de indicar el fracaso como naciones en su totalidad. ¿Qué hace Brasil en Haití? ¿Qué garantiza, qué cuida, qué protege, qué desarrolla, a quién favorece? Es posible que individualidades como naciones, caso Cuba y Venezuela con sus esfuerzos solidarios ayuden a paliar la grave crisis por la que están atravesando nuestros hermanos haitianos. Hay que romper las cadenas que atan a muchos países de la región ó su inamovilidad por temor al Imperio. También esta el caso no muy legos de nosotros, Palestina que sirve para llamar la atención con respecto al crimen sistemático del Estado Sionista de Israel, en otras palabras, debemos presionar para refundar a la ONU, por que dentro de esa organización internacional se ha condenado a Israel muchas veces, que no pasa nada. Pero volviendo a nuestra América, ¿Por qué se tolera el asesinato de civiles, lideres comunitarios, sindicales y políticos en Colombia, sin que la comunidad Americana (exceptuando a los EEUU) no ejerce una presión efectiva dentro del marco institucional de la OEA? Sencillamente porque este organismo no tiene ó carece de los instrumentos de presión y sanción para hacer correctivos en esta, como en otras tantas materias en la región. De crearse una nueva institución con rasgo y carácter supranacional debe contener los mecanismos y los instrumentos necesarios, válidos y efectivos para evitar estas cosas y corregir desviaciones, ruptura de hilo constitucional, violaciones de los derechos humanos, etc., que se presenten. Esa nueva organización debe existir sin los EEUU, lo que se busca es quitarse las presiones, dominios y manipulaciones que ejerce el imperio.
Haití es mucho de nosotros con la urgencia de salvar no solo a un país, es el comienzo para definir una nueva organización americana.
“La imparcialidad que es la gran base de la neutralidad desaparece en el acto en que se socorre a un parte contra la voluntad bien expresada de la otra, que se opone justamente y que además no exige ser ella socorrida.” Simón Bolívar. Carta Bautista Irving (20 de Agosto de 1818).
Patria Socialismo ó Muerte
¡Venceremos!
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