Gonzalo Gómez, del equipo directivo nacional de Marea Socialista, declaró sobre las recientes normativas electorales que dió a conocer el CNE y dijo que aunque su organización llama a votar, considera antidemocrático que se prohiban mensajes en favor de la abstención.
Opina que dichas Normas Especiales para la Propaganda Electoral en los Medios de Comunicación, aprobadas por el CNE y dadas a conocer por sus autoridades, que regirán las elecciones presidenciales del 20 de mayo de 2018, son continuidad de una línea de violación de los derechos electorales que se viene adoptando desde la ANC, desde el gobierno y desde el propio ente electoral, controlado, a su parecer, por el gobierno de Nicolás Maduro.
Sin embargo, dice que "en realidad esto no es nuevo, porque el Reglamento General, es una Resolución aprobada por el Consejo Nacional Electoral en sesión celebrada en fecha 18 de enero de 2013".
La presidenta del CNE ha recordado que, está "prohibida propaganda que desestimule el derecho al voto". El artículo 204 del Reglamento General de la LOPRE, referido a la propaganda electoral no permitida, incluye en su numeral 7 aquellas propagandas que... "Desestimule el ejercicio del derecho al voto". Para nosotros, esta disposición viola el derecho a la libertad de conciencia y a manifestarla (Art. 64 CRBV) en un país donde el voto no es un acto obligatorio.
Al respecto, Gómez, en nombre de su movimiento político, que se deslindó del PSUV desde 2014 y siempre mantuvo posiciones críticas dentro de dicho partido, en cuya fundación participó en 2007 como corriente preexistente, afirmó: "Nos parece que esto es sumamente ambíguo y se presta para todo tipo de interpretaciones interesadas con la finalidad de coartar las libertades políticas". A lo cual agregó: "Discrepamos de la argumentación que pretende dar de que el derecho de abstenerse es una cuestión individual de cada elector, por cuanto en democracia las posiciones de los ciudadanos y ciudadanas pueden asumirse en colectivo, para hacer fuerza social en torno a sus posturas y propósitos".
Aclaró que "Marea Socialista no comparte el llamado a la abstención, y percibe que detrás de ese llamado por sectores de la oposición de derecha, hay intenciones golpistas e intervencionistas... pero hay también gente del chavismo, desilusionada, o de la izquierda crítica, que está en su derecho de objetar estas elecciones, y esa es una cuestión de conciencia y de opinión política; no es algo que se pueda prohibir".
Recordó que sectores de la izquierda y movimientos sociales en lucha asumieron posiciones abstencionistas en algunas coyunturas, cuando la IV República, y que así lo hizo en un princuipio el ex presidente Chávez con el movimiento bolivariano, durante un período de tiempo.
Para nosotros -expresó el dirigente de Marea- quienes en realidad desestimulan el ejercicio del derecho al voto, no son quienes denuncian las elecciones por falta de garantías y los manejos electorales arbitrarios, ilegítimos e ilegales, sino aquellos que comenten tales violaciones, someten al pueblo a condiciones de privación de sus derechos y luego pretenden forzarle a votar por los autores de tales atropellos.
Reiteró, entonces que "Marea Socialista llama a votar, y en esta ocasión lo hacemos por la candidatura presidencial de Reinaldo Quijada (de la UPP 89) y aspiramos a postular en el marco de esta alianza nuestros candidatos y candidatas a concejales... Y hacemos ese llamado, no porque creamos que las elecciones que se vienen realizando son limpias, sino porque creemos firmemente en que la mejor vía para la defensa de los derechos es su propio ejercicio, a pesar de las limitarciones y trabas impuestas desde las élites de poder... Por consiguiente, como ciudadanos y ciudadanas, no declinamos el ejercicio de nuestro derecho a elegir y a ser elegidos o elegidas. Por eso estamos a favor de utilizar los más mínimos resíduos democráticos que nos puedan quedar, porque pensamos que eso será favorable para la lucha".
No obstante, para Gómez, es evidente que "el sistema electoral debe ser reformado e igualmente debe ser renovado el poder electoral, para restaurar los derechos y garantías electorales del pueblo venezolano, pues el problema fundamental es que está capturado por el gobierno y eso lleva a que se muestre incapaz de frenar el ventajismo oficial".
"Quiero recordarles también que Marea Socialista fue impedida de iniciar su proceso de legalización porque en el CNE se encapricharon con que la nuestra no era una denominación de partido con fines políticos; razón por la que tuvimos que acudir ante el TSJ, y éste, luego de convocar a una única audiencia, aún no ha emitido una decisión en resguardo de nuestro derecho, habiendo pasado más de dos años... Y encima, le conceden a Maduro uno de los nombres alternativos que habíamos reservado y que nos negaron: el de SOMOS, lo cual evidencia ese ventajismo oficial que estamos denunciando".
Por eso, remata Gómez: "es imperioso asegurar y poner por delante la libre, plena y real participación individual y social en los procesos, especialmente en lo que corresponde a la contraloría social, la transparencia y la abolición del ventajismo y la manipulación burocrático-gubernamental o de quienes poseen bienes de capital y convierten las elecciones en un comercio y asunto de dinero, fuera del alcance de la clase trabajadora, los campesinos pobres, las clases populares y los pueblos indígenas, entendidos en su sentido auténtico y no de la usurpación de su lugar por quienes se apropian del poder".
Cierra dieciendo que "para lograrlo, también es necesario restablecer la plena vigencia de la Constitución, que está siendo extinguida por el actual gobierno autoritario y está francamente amenazada también por la vieja derecha que aspira volver a gobernar".