A la opinión pública nacional e internacional.
Los caficultores de la República Bolivariana de Venezuela, desamparados por el Estado venezolano, en situación de orfandad pero cansados del atropello continuado, declaramos lo siguiente:
El pasado 1ero de noviembre del 2022, se suscitó una protesta pública de los productores de café, cuyo objetivo era exhortar a las altas autoridades del Ministerio de Agricultura para ser atendidos en nuestras demandas de justicia, motivo por el que se "fabricó" un caso de delito colectivo que hoy alcanza a seis caficultores injustamente detenidos en los calabozos de la Comandancia General de la Policía, en la ciudad de Barquisimeto, del estado Lara y dos de ellos con "Casa por cácel".
Aquella protesta de los caficultores es la expresión de 35 años de abandono generalizado de las responsabilidades de un Estado que se hace "la vista gorda" con las importaciones fraudulentas de café, de la presencia de oligoplios industriales que maximizan la ganancia, de funcionarios públicos incapaces que por la vía de la omisión favorecen al poderoso dentro de la agro cadena del café y que lejos de impulsar una "Politica cafetera" sumergen al sector cafetero venezolano en uno de los más ineficientes de toda América Latina".
Los caficultores de Venezuela soportan una pesada responsabilidad al punto de asumir responsabilidades de un Estado colapsado económicamente, desfalcado y en quiebra cuyas otrora responsabilidades como reparación de vialidad, mejoramiento de las escuelas rurales, mantenimiento de la infraestructura eléctrica, seguridad, etc etc. son costeadas por sus propios esfuerzos y no conforme con ello quedan sujeto a la expoliación de la ganancia de un quintal de café que queda en manos de un sector muy bien conocido dentro del Ministerio de Agricultura que, sospechosamente, no acude en nuestra defensa.
Los caficultores de Venezuela acusamos a éste Estado represor que hoy persigue a nuestros dirigentes y luchadores sociales que en justa causa alzan la voz por nuestra dignidad como personas sujetas de Derechos que nos son negados.
A nuestros valientes dirigentes, hoy presos, se les imputan delitos de "cierre de vias" y de "asociación para delinquir" entre otros que extraídos con pinzas del articulado jurídico y descontextualizados de los respectivos artículos (68 de la Constitución) y (358 del Codigo Procesal Penal)sirven al propósito de criminalizar una protesta campesina e infundir el miedo que continúen manteniendo la ganancia del poderoso dentro de la agrocadena y, presuntamente, del funcionario público servil y corrupto.
Los Caficultores de Venezuela lanzamos un grito de auxilio a las ONG defensoras de los Derechos Humanos, DDHH, que hacen vida en el territorio de la República Bolivariana de Venezuela e instamos a la COMISION INTERAMERICANA DE LOS DERECHOS HUMANOS, CIDH, para que nos conceda la oportunidad de plantear este peligroso caso de criminalizacion campesina por nuestro justo Derecho.
Los caficultores de Venezuela hacemos un llamado de unidad cafetera para todos los productores de café de los estados Lara, Portuguesa, Trujillo, Merida, Yaracuy, Barinas, Monagas, Sucre, Anzoategui,Cojedes, Guarico,Carabobo, Aragua, Tachira, entre otros para que, dejando el miedo, avancemos hacia la conformación de un sólido bloque gremial de los productores de café y exigamos el cumplimiento sagrado de nuestros Derechos constitucionales.
Enfrentemos colectivamente a quien se apodera de nuestras ganancias como productores de café y de igual forma exigamos la debida atención de los altos funcionarios del Ministerio de Agricultura.
Los Caficultores de Venezuela reconocemos que este caso político de criminalizar la protesta de los caficultores tiene fines inconfesables de continuar la opresión, evitar nuevas protestas, silenciar al campesino humilde y amparar la ganancia del poderoso.
Los Caficultores de Venezuela repudiamos la persecucion de la que somos objeto, rechazamos la encarcelacion de nuestros liderazgos naturales, exigimos la revisión del caso por una Comisión Nacional de otro estado y un proceso justo no politizado.
Finalmente, los Caficultores de Venezuela solicitamos de nuestros lectores, personas naturales y jurudicas la difusión masiva de esta protesta escrita, aún más allá de nuestras fronteras, así como la comprensiva y necesaria solidaridad de los movimientos sociales de América Latina.
En los campos, comunidades y caseríos cafeteros de la tierra del Grande Simón Bolívar, a los veinticuatro días del mes de Febrero del año 2023.