Sin contar Bolívar, el gobierno pierde 15% de las gobernaciones que mantuvo hasta el 15 de octubre 2017. La oposición ganó y cobró 66%
Tenían 87% y 13% de la totalidad del gobierno regional; ahora tienen 77% y 23%, respectivamente, de manera que -sin contar Bolívar-el gobierno perdió 10% que ganó la oposición, un porcentaje casi regalado para la tremenda ofensiva económica nacional e internacional del primero contra todo el pueblo venezolano.
Confesamos que sin ser pesimistas teníamos densas sospechas de que la pérdida fuera más alta. El alto costo de la vida que ha traído hambre pareja e innegable en todo el país, ya que el gobierno no ha sancionado con la fuerza necesaria a un enemigo que usa todo sus arsenal contra un consumidor desprotegido, provocaría un rechazo casi absoluto al gobierno; no ha sido así porque el pueblo ha demostrado una confianza duradera al gobierno, y la gran mayoría de los perjudicados ha sido la clase media que, incapaz de entender la situación, se abstuvo de votar por sus "defensores".
Los ajustes salariales y los CLAP no han podido contrarrestar semejantes arremetidas en el mercado del cual son dueños en un alto % y la distribución del Estado ha sido fácilmente perforada por la misma baja ofensiva gubernamental contra los funcionarios públicos abiertamente comprometidos en esta guerra a favor de la oposición.
Súmese a esa guerra comercial el pésimo servicio de los servidores públicos-franelitas rojas y carnet de la patria al cual usan muy interesadamente para disfrutar de las bondades del gobierno al que a diario traicionan no cumpliendo con su deber diario. En Valencia son muchos los casos como estos. La Sanidad, bibliotecas, el servicio de gas, de Corpoelec., etc.
Las gerencias bancarias, los detallistas, los repartidores de servicios públicos-el gas-están haciendo de la suyas y no reciben del gobierno más que consejitos, amenazas verbales por al mediática de las redes, como si en estos casos sirvieran para algo.
Por supuesto, ante la mal praxis bancaria de negociar el efectivo, esa de entregarlo por bojetes y cajas de billetes que se cuentan en centenas de millones en moneda del nuevo cono a enemigos del gobierno, es pensable que en verdad el Banco Central no está suministrando liquidez suficiente a la banca privada, pero tampoco lo informa, no es transparente.
Esperamos que gobernadores de la talla de RAFAEL LACAVA comiencen a ponerles coto a esos abusos cometidos en serie y diariamente hasta por niños y bodeguitas de ventanitas.