Escuché a Freddy Bernal hablando de un salario sustentable, tratando de explicar la política salarial del gobierno del presidente Maduro, para dar a entender que el gobierno debe ser responsable a la hora de decretar un aumento de sueldos. El asunto es que esa sustentabilidad redujo el salario mínimo de 30 dólares a 7 en menos de un año, mientras los empresarios privados y ahora hasta los públicos suben sus precios al ritmo del dólar, haciendo su actividad realmente sustentable.
En otras palabras, lo que defiende Freddy Bernal y en su voz el gobierno del presidente Maduro es la sustentabilidad económica del gobierno y a través de ella de los empresarios, mientras el pueblo trabajador ve su salario deteriorarse imposibilitando su sustentabilidad.
¡A que le tememos que no nos atrevemos a indexar el salario de los trabajadores al Petro?
Ya Pascualina Cursio ha demostrado hasta el cansancio que es totalmente falso que la masa monetaria circulante es la que presiona la inflación pues durante los gobiernos del presidente Maduro la masa monetaria a aumentado miles de veces menos que la devaluación y la correspondiente inflación, al contrario se ha reducido ante ellas.
Es claro que la devaluación y la hiperinflación en Venezuela obedecen a políticas desestabilizadoras imperiales, seguidas e implementadas por las empresas capitalistas. Son ellos los que se apropian de los dólares que inyecta el gobierno y presionan el precio al alza. Total, ellos tienen a su favor las políticas de precios más liberales que han existido en Venezuela que les permiten ser más que sustentables, altamente beneficiarias del empobrecimiento del pueblo y el saqueo de nuestros recursos naturales. Aumentando la brecha entre ricos y pobres, muy al contrario de lo perseguido por esta revolución.
Entonces porque no seguirles el juego, haciendo el sueldo de los trabajadores también sea sustentable. Que cada vez que los empresarios jueguen a la política imperial de desestabilizar la economía se sientan presionados porque el sueldo suba al mismo ritmo. Seguro volveríamos a la hiperinflación, pero sería mejor para la clase trabajadora si conserva la capacidad de compra al instante. La idea es negociar con el capital la convivencia forzada y la estabilidad económica en términos favorables a la clase trabajadora y no en su contra.
Presidente, la guerra multiforme a la que estamos sometidos nos ha forzado a pasar la revolución a modo supervivencia, haciendo alianzas antinaturales con la empresa capitalista y sus leyes de mercado. Hemos suspendido, muy a nuestro pesar y espero que por ahora, el plan de la patria casi que integralmente. Pero si no se defiende a la clase trabajadora en este modo supervivencia, qué sentido tiene preservar esta revolución.
Ya las empresas del estado están trabajando con ingresos de "sustentabilidad" incluso suspendiendo peligrosamente su carácter social (por no decir socialista que les quedaría mucho más grande). Cantv, Movilnet, Corpoelec, PDVSA (la gasolina), entre otras empresas estatales están adaptando sus tarifas y sus inversiones hacia planes sustentables, dejando a un lado o minimizadas las políticas sociales.
Entonces es justo que el salario de nosotros los pelabolas sea sustentable pues a pesar del sacrificio de estos años de bloqueo y guerra económica, en su mayoría seguiremos respaldándolo para intentar retomar el camino de la revolución socialista de Chávez.
