Estamos frente a una de las grandes tareas de la revolución bolivariana: establecer un Nuevo Modelo Productivo para llegar al Nuevo Modelo Económico, que genere fuentes de trabajo, con alto valor agregado nacional, eleve el nivel de vida de la población y garantice la soberanía económica del país, en otras palabras crear riqueza y bienestar para los pobres que son la inmensa mayoría de este pueblo.

Es un mandato establecido en una docena de artículos (299 al 310) de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, que plantea un nuevo medio de participación y protagonismo en el proceso productivo.

En ese sentido, Hugo Chávez Frías como líder revolucionario, está impulsando la Empresa de Producción Social (E.P.S). En principio, una Empresa Comunitaria de altos kilates que permite conectar la Venezuela Petrolera con la pobreza.
Ese es el agente trasformador de las relaciones de producción y distribución para llegar al Nuevo Modelo Económico y enterrar al capitalismo.

Por eso decimos que la Empresa de Producción Social es la Empresa del Siglo XXI.

OPORTUNIDADES PARA QUE LA E.P.S SEA EXITOSA

Entendiendo la responsabilidad que tenemos en el destino de este agente, hemos contribuido con algunas definiciones de la E.P.S: espacio dirigido colectivamente, donde los pata en el suelo participan protagónicamente en el proceso productivo para mejorar su calidad de vida y la del resto del pueblo.
Pero eso no es suficiente. Es necesario para garantizar que la E.P.S sea exitosa, en los términos expresados nuestro Lider-presidente, hoy presentamos una serie de pistas sobre las Grandes Oportunidades para las E.P.S.

Para abordar ese asunto debemos estar conscientes que mas allá de la promoción y protección (formación, asistencia y financiamiento) que brinde el Estado y el gobierno a la E.P.S, es el control de las actividades de carácter estratégico lo que garantiza el éxito de la nueva Empresa y como tal el cambio en las relaciones de producción y distribución.

En otras palabras, la E.P.S debe conectarse a la “Arteria Económica” por donde circula la riqueza del país.

Coño, la E.P.S es para acabar con exclusión y la pobreza, hay que ponerle la mano a la pechuga y los dos muslos de la economía.

¡Cuidado con el pescuezo e´pollo.!

En concreto, ¿Dónde están las oportunidades?

Para este primer debate presentamos solo algunas:

1. En la Mision Vivienda: La E.P.S debe administrar minas de arena, canteras de piedra, concreteras, bloquerias parroquiales, carpinterías y grandes ferreterías populares. Que conste, allí es donde la oligarquía tiene la chupadora de dinero para sus cuentas bancarias. Seguro que baja el costo de la vivienda.

2. En el Transporte de Carga: La E.P.S debe ser propietaria dell transporte de Aluminio, Hierro, Madera, Petróleo, Gasolina, Hidrogeno, Madera y Alimentos. Alli si hay recursos, sin trabas para créditos y permisos.

3. En la Transformación de Materias primas: E.P.S para procesar Petróleo (Aceite para motor, liga de freno y otros), Oro (que Venezuela se llene de Callaos), Aluminio (bandejitas para comida, ollas, rines, pistones para motor, herramienta quirurgicas), Hierro (tripa de pollo, malla, tubos, clavos, electrodos…), Madera (puertas, mesas, viviendas, muebles. Sin comentarios.

4. En el Turismo: Las E.P.S deben tener control de la red hotelera de 5 estrellas y punto.

5. En la industria automotriz: La E.P.S como ensambladora y concesionaria de los vehículos populares.

6. En la Industria Textil: La E.P.S administrando grandes telares.

7. En la Agro-Industria: Transformando los productos del Campo en jugos, pulpa, harinas, chucerias alternativas, medicina....

Por esas y otras “arterias económicas” circulan las riquezas de este país.

Para finalizar, el éxito de la E.P.S depende en gran parte, de dos condiciones: (I) que los promotores establezcan mecanismos flexibles para que las inmensas riquezas que administran el INTI, PDVSA y CVG entre otros, sean transferidas a las Empresas del Siglo XXI. Por otra parte, (II) que emprendedores de E.P.S, además de organizarse sean capaces de movilizarse y conectarse en las Arterias Económicas que hemos identificado.

Compatriotas, es tiempo de atreverse.