01-09-24.-José Aguilar, consultor internacional de generación de energía, comenta que "pudo haber error humano o un equipo no funcionó". Un ingeniero eléctrico señaló que las líneas de transmisión presentaron "exceso de carga" y en las labores de reparación se habría generado el corte del fluido.
Mientras que un especialista en Sostenibilidad y Energías Renovables indicó que la tesis del sabotaje sería probable, pero por la "vulnerabilidad" del sistema ante la falta de inversión y mantenimiento.
La falla en la Central Hidroeléctrica Guri, que causó un apagón general en Venezuela que se extendió en zonas por más de 20 horas, es aún cuestionada por expertos. Mientras el Gobierno nacional asegura que se trató de un acto de "sabotaje" por parte de la oposición venezolana, profesionales aluden a fallas propiciadas por falta de mantenimiento.
Desde las 4:50 de la mañana de este viernes y pasadas las 12:00 de la madrugada del día siguiente, Venezuela vivió el más intenso apagón general desde los ocurridos en marzo de 2019. Los 24 estados del país reportaron cortes parciales o totales del suministro eléctrico, que a su vez afectó a las señales telefónicas y perjudicó la conectividad de los ciudadanos.
El Zulia fue el último estado en recuperarse de la contingencia eléctrica, tal como lo indicó el profesional José Aguilar, consultor internacional de generación de energía y riesgos. En una serie de publicaciones en X, indicó que "la última vez que tuvimos megavatios tan bajos como en este apagón hay que remontarse al año 1974".
A pesar que distintos voceros del oficialismo, entre ellos el nuevo ministro de Justicia y Paz Diosdado Cabello, lo calificaron como un "ataque terrorista" al Sistema Eléctrico Nacional (SEN), el experto José Aguilar colocó en duda estas afirmaciones, a través de una entrevista para el medio Tal Cual.
El experto expuso que, debido a que no existe transparencia en la difusión de datos sobre el estado del servicio eléctrico a nivel nacional, es posible que el Gobierno divulgue cualquier tipo de tesis sin percibir contradicciones. "La última (tesis), que parece de moda, es el sabotaje pero esto es un evento serio, que requiere de un análisis técnico serio. Están desinformando al país, descarto la entrada la información que ellos tienen".
"Es posible que algo salió mal, no sabemos qué"
Respecto a la falla de este viernes, José Aguilar comentó que no existe alguna situación en concreto que la justifique. Aguilar amplió que, al no existir grandes industrias que demanden grandes cantidades de energía en horas de la noche, sumadas a la diáspora venezolana, los niveles de consumo se ven drásticamente reducidos.
"¿Qué tienen que hacer ellos? Empezar a apagar equipos para poder mantener un perfil de tensiones más o menos aceptable en toda Venezuela. Es decir, mandan a desconectar unas líneas por aquí y por allá porque es la única que tienen de levantar el voltaje", detalla.
Según el medio Tal Cual, el problema se presenta cuando se genera nuevamente una demanda y se debe revertir el proceso para poder equipar los servicios básicos. "Es posible que algo salió mal, no sabemos qué (…) Podría haber sido un error humano, aunque los trabajadores ejercen con gran presión y pudieron haber tomado la decisión correcta, pero el equipo no respondió".
Aguilar también precisó que "la lentitud con la que se está recuperando la carga es indicativo de la debilidad del sistema, es indicativo de que la gente está trabajando con mucha presión y tratando de recuperar el sistema, pero no les da". Y añade: "Se está trabajando en un ecosistema bastante hostil con los cuerpos de inteligencia del Estado mirándolos".
Tres líneas
Durante su entrevista, el ingeniero comparó al apagón general con la falla eléctrica ocurrida tres días antes, el pasado 27 de agosto, que a su vez afectó a numerosos estados del país.
"La falla del 27 ocurrió a la entrada de la hora pico en Venezuela. La falla de este apagón general (30 de agosto) ocurre en el valle de la demanda, es decir, el momento en que el sistema eléctrico tiene el menor requerimiento. Es inexplicable que a esa hora ocurra un problema", dijo.
Según el ministro Cabello, la falla del 27 ocurrió por un ataque a una de las torres de transmisión de la línea 765, que comunica Valle de la Pascua (Guárico) con Valencia (Carabobo). No obstante, el experto José Aguilar puntualiza que existen tres líneas en dicho sector, con el mismo nivel de tensión (765 megavatios).
Si usted pierde una de las tres en hora pico del requerimiento, va a tener un efecto que se van sentir, como pasó. Pero pudo haber sido una cosa muy leve. No tenemos explicación todavía", precisa.
Un ingeniero en temas eléctricos y extrabajador de Corpoelec, que no quiso identificarse por seguridad, expuso algo similar a lo comentado por Aguilar. Relató que "hubo exceso de carga" (consumo) desde el día anterior en una de las tres líneas de transmisión. Debido a que una de ellas presentó fallas, trabajadores optaron por modificar el sistema para que funcionara únicamente con dos líneas, tal como es posible.
"Decidieron hacer la reparación y cambio a 2 líneas en la madrugada cuando éstas por el efecto nocturno están menos afectadas.
El problema es que al hacer el cambio el sistema colapsó y se cayó el Sistema. Esto ameritó el corte del fluido a todo el país", sentenció.
Alta vulnerabilidad
Por otra, un ingeniero electricista, con postgrados en Sostenibilidad y Energías Renovables, quien prefirió el anonimato, indicó que la tesis de un ataque terrorista al SEN solo es posible debido a la falta de mantenimiento en el sistema, que la hace altamente vulnerable a este tipo de situaciones.
El especialista indica que el sistema está expuesto no solo a eventos causados por terceros, sino a devenires técnicos o naturales, que podrían provocar su total colapso.
"La vulnerabilidad es una consecuencia de la falta de inversión y de la falta de mantenimiento. Un sistema altísimamente vulnerable, como es el sistema venezolano en la actualidad, bien podría ser presa de sabotaje o ataques terroristas pero también de fallas y hechos técnicos naturales productos de este abandono técnico y de mantenimiento", expone.
Dicho experto puntualiza que el SEN venezolano, al depender únicamente de las centrales hidroeléctricas del Caroní, lo coloca en una situación donde "cualquier agente político que quiera desestabilizar el país lo pueda hacer muy fácilmente". Relató que hace 25 años, difícilmente el país hubiera sido presa de alguna de estas situaciones, "porque el sistema tenía respaldo múltiple distribuido en todo el territorio".
Sobre la posibilidad de que un virus haya provocado el apagón nacional, expresa que "es muy poco probable", debido a que la hidroeléctrica del Guri tiene controles manuales que no son controlables por internet o por redes telemáticas.
"Tienen controles manuales internos, tienen controles directos y controles en presencia directa en el centro de máquina que si efectivamente no son hackeables en ese sentido pues son sistemas electromecánicos, sistemas no digitalizados al 100 % y que no están sujetos por tanto a este tipo de actividades de sabotaje informáticos", finaliza.