Aquel histórico “Por ahora” marcó la diferencia entre los golpistas macheteros que históricamente nos habían acostumbrado a los “Madrugonazos”, en nuestro continente, para capturar por la fuerza el poder y ponerlo al servicio al amo del norte, y lo que representó una rebelión con una carga histórica de reflexión y conciencia de clase, signada por la ideología revolucionaria propia de una juventud rebelde que observaba desde sus cuarteles como las armas de la república y sus hombres y mujeres eran utilizados para reprimir y acallar a un pueblo que cansado de la represión y los inenarrables crímenes cometidos por las huestes del bipartidismo (AD y COPEI), salió a las calles a reclamar libertad y democracia y hacer justicia en contra de sus verdugos, especuladores y expoliadores, que habían arrebatado el poder al pueblo el mismo 23 de enero de 1958,con hábiles maniobras, tras la salida de su jefe de turno en el poder. Esta revuelta que fue conocido como “El Caracazo”, el 27 de febrero de 1989, dejó miles de víctimas asesinadas por la fuerza pública, comandada por los sicarios de Carlos Andrés Pérez y el Pacto de Punto Fijo, a pocos días de su “Coronación”, para un segundo “mandato”, como cipayo del FMI, el BM y el Consenso de Washington.
De esa azarosa acción, el líder de la rebelión que también contrario a los golpistas macheteros, cobardes, patoteros, que como los del 2002 se ocultan para eludir la justicia, Hugo Chávez, solo pidió un corto espacio en TV para reconocer su acto contra el infame régimen y rendir cuenta a sus compañeros y al pueblo, a quienes llenó de esperanza, con aquel “Por ahora” y vendrán tiempos mejores. De allí salió preso para Yare, pero fue un preso de conciencia que jamás se doblegó y en la prisión por la dignidad activó la fragua, para templar el acero de la más invencible arma que tienen los revolucionarios, la dignidad y la conciencia de clase, que lo catapultó a Miraflores, donde juró fidelidad a su pueblo, sobre la moribunda constitución puntofijista y desde entonces comenzó con el despertar del pueblo la carrera de logros de la revolución bolivariana, que hoy a 12 hace años, luce más robusta y más exitosa de lo que pudimos haber aspirado en algún momento, porque el ejemplo de Caracas, se ha expandido por el continente y esta sacudida americana, sin temor a equivocarnos ha prendido también la llama revolucionaria, en el continente africano y el medio oriente, pueblos que al igual que los nuestros han sido martirizados por los mismos criminales imperiales y de hecho tenemos una historia en común , que las políticas bolivarianas ha fortalecido al potenciar la integración Sur - Sur, al lado del Caribe, Sur y Centroamérica.
Solo una oposición estulta, sin visión de Estado y de Nación, obnubilada por el “Sueño Americano” (Ahora pesadilla del mundo) puede desconocer los avances en educación, que de país con más de dos millones de analfabetos, pasamos a ser territorio libre de analfabetismo certificado por la ONU, que hoy por hoy tenemos más de10 millones de ciudadanos en las aulas de escuelas primarias, liceos, escuelas técnicas y universidades, siendo el segundo país del continente con la mayor matrícula universitaria.
En salud, de ser un país durante la Cuarta República, donde los pobres morían en las calles y en las salas de espera de los desvencijados puestos de salud, hemos avanzado a garantizar una atención oportuna y de calidad a más del 90 por ciento de la población, con un hospital cardiológico infantil, que es el más grande y mejor equipado del continente. Esto representa una inclusión sin precedente, fenómeno que ha sido reconocido por organismos internacionales y que ubican a Venezuela entre los primeros países que avanzan en el cumplimiento de las metas del milenio, pese a la rabiosa arremetida de la jauría de hienas oligarcas, que sueña con revertir todo, que de hecho, casi lo alcanza en el 2002, con el cruento golpe de estado que fue abortado por el pueblo el 13 de abril y con el criminal paro petrolero y patronal, libretos de la CIA, que fueron desbaratados por la conciencia y sabiduría del pueblo en armas y organizado.
Todo esto no ha venido del cielo ha sido producto de la constancia, la dedicación y lealtad por parte del Comandante Chávez, el apoyo de la revolución y el pueblo cubano a través de la mano amiga de Fidel Castro, así como de la diversificación de las relaciones internacionales y la tenacidad y voluntad del pueblo venezolano.
Frente a esta realidad y a la amenaza imperial, que cuenta con el apoyo cómplice de la oposición “Malinche” vende patria que tenemos en el país, es imperativo mantener activada la fragua en la calle para templar la conciencia y alimentar el coraje y arrojo, legado de nuestros antepasados, para defender y profundizar todo lo que hemos alcanzado a lo largo de estos 19 años de la rebelión de la dignidad y 12 años de logros de la revolución bolivariana.
(*) Periodista