Camarada Javier Biardeau, en estos días, pude leer una nota de prensa, según la cual, la camarada Blanca Eekhout, que desde años tiene como embelesado al polo patriótico, se reunía con intelectuales. Por la grafica y los nombres que se ofrecieron en la nota de prensa, supuse que fue una reunión claramente escuálida (un poco esquelética). No vi su nombre y no sé si estuvo en esa reunión, pero al ver la nota y la composición de esta reunión, vi el la enfermedad en su intensidad. Me dije, todo parece fríamente calculado para dejar un mensaje de amplitud y participación que ni un bobo se lo cree.
Antes de conocer el texto de su respuesta que respeto mucho y suscribo totalmente, un amigo me envió un mensaje a mi correo. En todo el texto del correo hacía un reconocimiento de su status como intelectual. Al final, después de dejarme buenas referencias suyas, que ya conocía, me dice: "Le preguntaría a Javier, si antes de pedirle unidad a los críticos en pro de la revolución, si le escribió a la directiva para que no sean necesarios los debates públicos, de seguro pueden comprender las ventajas"
Omito el nombre del camarada, porque no le pedí permiso para ello y en todo caso, no es el nombre del camarada lo que importa, sino la pertinencia de la pregunta. Creo que usted de alguna manera y sin saberlo, ofreció una respuesta a esta pregunta de una manera contundente.
¿Por qué suscribo su respuesta? ¿Por qué el desconcierto entra en un reposo?
Fue casi suficiente para abandonar el desconcierto, el primer párrafo de su respuesta. Al leer: "el objetivo central de mi artículo es un claro llamado a la construcción de la "unidad política del campo bolivariano", unidad promulgada y enarbolada a los cuatro vientos, pero en realidad maltratada en los hechos, acciones y entre-líneas. Esto era suficiente.
Así el asunto de la necesidad de la unidad se ve más claro. Se entiende y mire que voy entendiendo; cómo ve usted es esta "unidad" hoy y como debería ser, que era lo que me desconcertaba. Al colocarse esto así; el desconcierto bajo el nivel pero inmediatamente me surgió una inquietud y le confieso, que iba a pegarme de ese detalle para agradecerle su atención y sugerirle una debilidad a su respuesta.
Con esa inquietud debajo de la manga, continúe con mi aprendizaje de entender. Leí y repito esto que escribió en su respuesta, porque me parece un detalle significativo para el debate:
"De aquella alocución [Se refiere a un discurso de Chávez], se ha instituido con gran difusión masiva la consigna "unidad, batalla, lucha y victoria"; sin profundizar, en algunos casos siquiera, que la secuencia no es un asunto simplemente lógico (o una amalgama mecánica), sino que responde a la articulación política de momentos, que son entre sí, mutuamente dependientes, eslabones que si llegasen a romperse, conducirían no sólo a la derrota sino a la des-unión y debilitamiento de las fuerzas bolivarianas" (Subrayado es mío)
Pudiera extenderme en esta nota para explicarle por qué no hay ya desconcierto. No quiero y trato de usar parte de su artículo para convencerme, que más crítico acido que usted, no hay muchos y sin embargo, está embarcado en una idea de unidad que sabe tiene su plomo.
Amigo Javier, usted nos colocó entre los atributos que cualifican la unidad política propuesta, el punto "c" que recoge una precisa y contundente crítica. la "unidad de las fuerzas revolucionarias", lo cual coloca sobre la mesa un elemento clave en la escena, el cual es su dirección o conducción política, si se trata en concreto de una "revolución democrática permanente" para la transición al socialismo; y es de esto que se está hablando, y no sólo de la gestión reformista-distributiva de la renta petrolera, la cual puede realizarse sin problemas desde un pacto populista de conciliación entre elites, como lo fue el proyecto adeco-copeyano de reformas en el interior del propio Metabolismo del Capital" (Subrayado mío)
Ya sabíamos que este PSUV no da para mucho por ausencia de una dirección política. Una verdadera unidad revolucionaria, reclama una más o menos acertada dirección política. En esto, hoy no somos tan distinto a la mesa de la unidad "democrática" Esta era la carta que tenía bajo la manga, pero se me adelantó y la saco con tanta contundencia que el desconcierto se desmoronó. Es una profunda evaluación al PSUV que tenemos, según mi entender.
Claro no es sólo (..) la gestión reformista distributiva de la renta petrolera, la cual puede realizarse sin problemas [y sin socialismo] desde un pacto populista de conciliación de elites [o de grupos]. Es lo que se está haciendo y vendiendo como socialismo. Cuando oigo: ¡Aprobado!, se ve esto que dice muy clarito y eso no es socialismo, pero no lo venden como socialismo.
Es imposible no compartir otra demoledora crítica que por supuesto, destruye lo que puede quedar de desconcierto.
"Si la conducción política estuviera a la altura de la construcción de un nuevo Bloque Histórico (Poder Popular, Dirección Revolucionaria y transición al Socialismo), y si el proyecto del GPP fuese un eslabón clave de tal tarea (y no meramente una alianza electoral para repartir cuotas), estos cuatro aspectos de la "unidad política" serían vectores fundamentales para avanzar en la superación de los graves escollos de un proyecto histórico, escollos que podrían poner en riesgo la totalización de los objetivos históricos del Plan de la Patria, en caso de hacerse además un énfasis unilateral en una concepción desarrollista-modernizadora del objetivo histórico número tres (3), referido a lograr convertir a Venezuela en una mediana potencia económica, social y política en un Gran Bloque Continental de poder, sin colocar sobre la mesa la transformación o no de las relaciones sociales de producción, distribución y consumo capitalistas" (Subrayado mío)
A esto, sólo agregaría, revisar las metas macroeconómicas del Plan de la Patria y veamos que hay en esas metas de distintos de los planes de la IV. En esas metas, hoy como ayer, el rentismo se revitaliza. No hay ahí un elemento para observar en el 2018, cómo hemos avanzado en el nuevo modelo productivo y para ese momento (2019), sumaremos 21 años, que nos es tiempo para construir socialismo, pero si para darle un gran palo al rentismo y al capitalismo
No es muy frecuente oír algo tan certero, preciso y crítico como este párrafo que nos llegó con su respuesta. "Una revolución no se hace con un "rebaño bramando consignas". Cuando eso ocurre puede aparecer con facilidad el más grotesco fascismo. Aquí traería a colación el importante ensayo del lingüista Noam Chomsky cuando señala que una "democracia participativa" se degrada cuando convierte al mayor número en un rebaño "desconcertado que brama y pisotea" Este coctel JB/Chomsky es una crítica, según mi entender demoledora. Creo que se pasó y le repito no hay ya desconcierto. ¿No estamos bramando consignas que van vaciándose cada día más? Lo dice usted y mi desconcierto se viene al piso. (Subrayado mío)
Fuera el desconcierto frente a tanta claridad. Finalmente, es importante retomar la maltratada unidad de la cual habla en esta importante y profunda respuesta. El maltrato como hecho, acontece porque hay alguien que maltrata y alguien que pasivamente o por miedo se deja maltratar y ese el gran problema y asunto de todo esto. El PSUV Tiene un Stalin dentro y haciendo de la suyas.
Gracias por su tiempo
Nota: Pueden leer el artículo del amigo Javier Biardeau en este sitio: http://www.aporrea.org/actualidad/a199376.html