La economía venezolana es una economía netamente capitalista caracterizada por su profunda dependencia de los excedentes generados por la actividad petrolera. Por tanto, el modelo de acumulación capitalista en Venezuela está basado en la apropiación y el control de la renta petrolera por parte de los diferentes sectores de la burguesía y sus aliados.
En la actualidad, el proceso de acumulación capitalista en Venezuela está trancado, es decir, experimenta lo que se conoce comúnmente como "crisis". A la muerte de Hugo Chávez (figura que establecía un control en la distribución de la renta), la pelea entre los distintos sectores de la burguesía y sus aliados por captar una porción cada vez mayor de los excedentes petroleros se hizo más cruenta. La incapacidad del régimen político actual de cambiar el modelo de acumulación que caracteriza la estructura económica venezolana (esto resulta imposible a través de un manejo discrecional de la renta petrolera) ha desembocado en la catastrófica situación que hoy afecta a la población.
Ante la realidad de la crisis, el conjunto de los sectores de la escena política nacional señala la necesidad de producir como elemento vital. "Tenemos que producir" se escucha deliberadamente en los discursos de los diferentes actores. Sin embargo, como explica Marx, la burguesía y sus aliados siempre van a buscar maximizar ganancias con el menor esfuerzo posible y, en Venezuela, lo más fácil es robarse y llevarse la renta petrolera.
Lo anterior puede evidenciarse en la fuga de capitales que experimento el país entre 1999 y 2013 (aproximadamente $259 mil millones). El hurto de esa exagerada cantidad de dinero, explica la terrible crisis que sufren actualmente los venezolanos que viven de su trabajo, es decir, el proletariado.
Las penurias a las que actualmente se enfrentan los venezolanos son el resultado no solo de la simple corrupción, sino de diferentes patrones mafiosos de acumulación inherentes al modelo rentista, es decir, formas de robarse la renta petrolera por parte de la burguesía y su entrañable aliada (la burocracia gubernamental). ¿Cómo lo hicieron? Entre otras formas a través de la sobreimportación, sobrefacturación e importación de conteiners vacíos. De no haberse producido dicho robo, el pueblo venezolano, además de tener cubiertas todas sus necesidades, tendría recursos disponibles para desarrollar un gran plan de Industrialización.
La solución a la crisis es la conformación, a mediano plazo, de una opción revolucionaria de poder, que permita que el proletariado venezolano, con la juventud obrera en la vanguardia, tome control de la renta petrolera y cambie el modelo de acumulación predominante en la actualidad.
simondomingotenorio@gmail.com
