Desde hace algún tiempo había advertido sobre las filtraciones en cinco diferentes niveles, tanto verticales como horizontales de la administración pública, en las instituciones del gobierno y cercanas a este. En una revisión del tablero político, solo sobre el área del gobierno veía que el nombramiento y enroque de muchos funcionarios aludía a la falta de preparación y formación política, administrativa y jurídica, de confianza y lealtad al modelo, y ética revolucionaria al país y a nuestro máximo líder, pero Chávez, siempre Chávez, los fue educando, preparándolos, forjándolos porque corresponde a una lógica natural para cualquier proceso político que lucha contra poderes faticos dentro y fuera de nuestras fronteras. De allí, que el mismo Nicolás pedía insistentemente ayuda, respaldo, comprensión, pasión y fortaleza revolucionaria con el proceso bolivariano, con su gobierno y el legado de Chávez. Los cambios a partir del triunfo electoral de ahora presidente Maduro era y son necesario. Pero ¿Qué pasó? Muchos comprendieron que esta revolución se acabaría, otros dejaron de confiar en Nicolás, otros tantos se alejaron por no sentir empatía hacia el presidente, un punado más traicionaron a la revolución.
Por lo que con el pasar del tiempo, sumando otros factores como los protagonizados por los grupos violentos de la Opiosición, el sabotaje económico, el eléctrico, el contrabando de extracción, el decreto de Obama, la Guerra Económica de las grandes corporaciones y Dólar Today, y la perdida de la Asamblea, fueron pocos los que han aguantado esa múltiple y compleja embestida. Sí, la bestia contrarrevolucionaria gana espacio, y son espacios que los hemos abandonados, pero si ganaron algunos fue porque se perdió una batalla, no la guerra. Si bien, la excepción ha sido la pasada elección parlamentaria. Pero eso no justifica que algunas personas, en nombre de su auto popular influencia se aboguen el derecho de criticar a mansalva al gobierno de Nicolás sin dejar de mencionar ni explicar que el país, no el gobierno, está siendo atacado brutalmente por factores exógenos y los internos que tienen poder real.
Entiéndase, que Poder Político como definición política es una cosa, algo más amplio es Poder Real. Por ejemplo, el gobierno ha hecho un gran esfuerzo por disminuir y reducir la violencia y los factores que la promueve y la alimenta, la produce y la reproduce. Por lo que no se explica a simple vista, es que factores externos desde Colombia, Estados Unidos, España, México entre otros países que se han aliado con factores de la Oposición para mantener ese clima de desestabilización y contribuyen en el avivamiento de la violencia en el país. Por otro lado, la Guerra Económica, que no se trata solo del acaparamiento de productos de la dieta básica, u otros productos de aseo personal, medicinas, etc., o el contrabando de extracción, lo que se quiere es abrir diferentes flancos para ir mermando la capacidad de gobierno, crear confusión, rabia, decepción y traición en la población hacia la revolución.
Es así, como vemos a sesudos líderes del chavismo, de la izquierda denunciando en programas de televisión el robo y malversación de 425 mil millones de dólares en los últimos años. Ese valiente “líder” no presenta ni una sola prueba, pero lo que no ve son los puentes, las carreteras, las escuelas, los hospitales, los supermercados, los autobuses o el millón de viviendas que hasta ahora están construidas. Este es solo un ejemplo de deslealtad, y con ello muere, se seca, porque lo que está haciendo es el juego a la oposición y al imperio, pero gratis no es. También he visto a otros, que en su posición de figura del gobierno han sido invitados a conversar y analizar la situación real del momento y omite, obvia, dentro de sus análisis mencionar que el gobierno y el país está siendo sometido a una Guerra sin cuartel. Yo les recomiendo que critique, pero que tenga a bien mencionar cuales son las causas, desde donde se generan esos ataques, lo que buscan y lo que pretenden. Por eso suelo llamarlos Los eléctricos, se prenden con se enciende un bombillo y se creen que con esa luz que generan ya lo han dicho todo: Crasso error. También se secarán, de nada sirve que tengan un doctorado para no saberlo usar en momentos tan necesarios.
Lealtad no es sinónimo de silencio, la lealtad es trabajar en la formación de fortalezas: principios y éticas morales, físicas, intelectuales, políticas y sociales, para revertir la guerra y ayudar a lograr el triunfo. ¿Es que acaso no vemos como ataca el imperio a nuestros países? Y a Venezuela le toca la peor agresividad porque representamos para el imperio la joya se su propia salvación económica. Lo que no salva es que tenemos al frente a Nicolás, y sin complejos, tenemos que cuidar y proteger a Diosdado, ambos son pilares fundamentales para que la revolución siga su sendero de éxitos y triunfo. No nos perdamos en pequeñeces, egoísmos, respondiendo como eléctricos reboces con el dólar de combustible en el bolsillo. Salgamos a manifestar y dar nuestro respaldo en cada momento al proceso, a nuestros líderes.
Si el gobierno y la revolución no son exitosos al parecer, por qué, entonces nos siguen asesinado a nuestros líderes, por qué no hay colaboración del sector privado para acabar con la escasez, por qué la asamblea burguesa adeca propones leyes para destruir y quitarles las viviendas al pueblo, por qué esa misma asamblea crear un proyecto de ley para cubrir todos los delitos que la misma Opiosición ha cometido en los últimos 16 años, y deja para descaro, el perdón para los nuevos delitos que comentaran en el futuro, que él no quiere ver que no vea, la historia lo devorará. Cada uno a aportar nuestro grano de arena.
¡Adelante marchemos valientes!
¡Al combate del duro fragor!
Por la Patria muy alta la frente…