¡Qué maravilla! Resulta que, para sorpresa de muchos simpatizantes de la llamada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), la apuesta del presidente Nicolás Maduro sobre la convocatoria al pueblo venezolano para la "Constituyente Popular de la Paz"; a la luz de la tranquilidad que ahora se vive en las calles de las principales ciudades de Venezuela, ha resultado ser un bálsamo de especiales propiedades curativas para el apaciguamiento y cura progresiva de la heridas padecidas en lo físico y moral. Que fueron muy graves.
Y el voto se transformó, por la vía de la voluntad inquebrantable del pueblo venezolano que respalda la Revolución Bolivariana, en un verdadero mecanismo de amansa guapos. ¡Y mire que se aplicaron con especial denuedo todos esos "manifestantes pacíficos" en impedir que sus vecinos manifestaran su ansia de paz en las mesas electorales, el pasado 30 de julio de 2017!
Luego, la pregunta es: ¿la mayoría del pueblo venezolano estará confiando demasiado en las posibilidades de esta la Asamblea Nacional Constituyente para, por vía de los denominados "Actos Constituyentes", Decretos o Leyes, resuelva de manera expedita los principales problemas de índole económico, político y social que padece?
Un reciente artículo Elías Jaua Milano, cuya especialidad es la Sociología y el análisis de coyuntura con fines de destacar indicadores que dibujen tendencias, pareciera advertir sobre un embeleso. A saber, que la Constituyente popular lo puede todo, tal vez al modo de Los reyes taumaturgos, de Marc Bloch. Analícese al menos tres de sus premisas sugeridas como al desgaire. La nota se titula "Constituyente y economía" (www.aporrea.org, domingo 14 de agosto de 2017).
Una primera advertencia discurre del siguiente tenor: "Sobre la recién instalada Asamblea Nacional Constituyente (ANC), se está generando una creciente demanda, de propios y extraños, de solución inmediata de la compleja situación económica que ha sido causada por la guerra permanente a nuestro modelo, por la caída estructural de los precios petroleros, por los problemas de la producción nacional y por los errores coyunturales que sin duda hemos cometido en el manejo de la política económica, a lo largo de 18 años de revolución" (ob cit).
No esperemos entonces que los indicadores sociales mejoren ipso facto y sintamos más satisfacción por el comportamiento de las variables económicas, así como todos hemos visto y vivido con una alegría asombrosa, ya que la violencia de las guarimbas han cesado como por acto de magia; segundo: "La superación de los problemas económicos será el resultado del esfuerzo productivo y honesto de la empresa privada, de los trabajadores y trabajadoras, de las nacientes formas de propiedad social y comunal, de la empresa pública y de la propiedad social y comunal, de la empresa pública y de la rectoría y acción transparente del estado sobre los factores económicos" (ídem).
¿Se podrá observar un cambio en el comportamiento organizacional en Venezuela? ¿Se ha estar contestes entonces con semejantes criterios, pues, ya la ANC cumplió con uno de los principales objetivos planteados y tercer aspecto de los aquí considerados? Esto es: "… lograr la estabilidad política, la tranquilidad pública y que se respete el derecho a vivir, trabajar, estudiar, producir y distribuir en paz que tiene el pueblo venezolano. Solamente con lograr esas condiciones, ya la misma estará impactando positivamente en la vida económica del país" (ídem).
El corolario "escarmentado", que diría Juan Carlos Monedero en sus "11 tesis sobre Venezuela y una conclusión escarmentada" (www.aporrea.org, 12/08/2017), viene a ser que no esperemos otro milagro por la vía del bálsamo constituyente y el voto amansa guapos. Aunque verdad también es que la magna asamblea también tendrá que legislar sobre diversos aspectos económicos y especialmente sobre dos aspectos especialmente insidiosos: la materia de los impuestos y la libre conversión bolívar-dólar, el verdadero quid de la cuestión en que se debate la cotidianidad del país, ¿qué apuesta se atreverá a hacer al respecto la intuición del camarada presidente Nicolás Maduro?
Nota bene:
Hablando de asuntos de economía: ¿Por qué será esa actitud misteriosa que se mantiene sobre la III Convención de las y los Trabajadores Universitarios de Venezuela, que aún no sale en Gaceta Oficial y así poder conocer los alcances de las clausulas allí firmadas exclusivamente por los compañeros de la FTUV? ¿Cómo así que el aumento salarial es del 620%? ¿Por qué el seguro de HCM es tan restringido o sólo en algunas clínicas de medicina concertada? ¿Estarán esperando que la FAPUV se reincorpore en septiembre y enmiende la plana, como pasó con la I y II CCU?