“Que espanto causa el rostro del fascismo” Víctor Jara.
Ya nos lo habían advertido grandes pensadores como Hegel y Marx, el sistema de producción capitalista terminará por destruir a las fuerzas productivas que lo mantienen. Hoy ya podemos decir que además el capitalismo también está acabando con la democracia y lo que es peor, con la vida en el planeta.
Todas las políticas económicas impulsadas por las instituciones financieras internacionales supuestamente destinadas a aumentar la productividad y la competitividad y el crecimiento económico, solo han tenido el efecto contrario: aumentar la concentración de la riqueza en muy pocas manos y crear inmensos monopolios, recortando los derechos, suprimiendo la democracia y sobre todo, desde la implantación a sangre y fuego del neoliberalismo, la constante alimentación de la especulación financiera, principal causa y el origen de todas las deudas. Al contrario de lo que predican los sacerdotes neoliberales, el déficit fiscal es en su gran mayoría causado directamente por la especulación financiera y la deuda permanente, no por el “gasto social”. La mayor parte del dinero prestado por los organismos internacionales y las mafias bancarias a los países del sur y de toda la periferia del imperio, es utilizado para cancelar los intereses creados por estas deudas, un perverso mecanismo que se ha vuelto la mayor transferencia de recursos de los países periféricos a las capitales imperiales, transferencias que solo benefician a unos pocos milmillonarios.
Estas políticas económicas solo han aumentado el empleo precario, trabajadores pobres y cada vez más esclavizados, salarios estancados, corrupción generalizada y paraísos fiscales que permiten impunemente la evasión a gran escala, desfalcando las finanzas públicas.
Todo esto amparado y legitimado por los grandes medios de comunicación, la academia en general y gran cantidad de lacayos arrastrados, al servicio de las elites de la mafia financiera que mantiene por medio de sus agencias de inteligencia y sus ejércitos asesinos la nueva dictadura global de las corporaciones.
El afán de lucro desmedido, la falta de empatía y humanismo caracterizan a estas elites enfermas que aceleradamente y sin pensar siquiera en el futuro van destruyendo los delicados sistemas que nos mantienen con vida, acabando con la diversidad, la belleza, la complementariedad y todas las otras cosas hermosas que caracterizan al único planeta que tenemos y debiéramos cuidar y querer como siempre hicieron nuestros antepasados originarios de todos los continentes.
Necesario y urgente es una transformación total del sistema de producción capitalista. Necesario y urgente es luchar contra la dictadura global de las corporaciones y sus cipayos, entendamos que la barbarie del capitalismo solo puede perpetuarse a través del fascismo, el terrorismo y la eliminación por cualquier medio de todos los que se le opongan.
Hoy podemos ver claramente el avance del fascismo internacional en Europa y en los mismos Estados Unidos donde resurgen los grupos extremistas neo nazis. Ucrania después del golpe empujado por el gobierno gringo, es hoy un país gobernado por un grupo de nazistas declarados. En Brasil, el golpista temer ha sacado a el ejército a la calle, excusado en una supuesta violencia criminal, cuando es bien sabido que Rio de Janeiro no es el estado más violento de Brasil, muchos opinan que es un intento del usurpador para militarizar totalmente al país y a través del miedo, controlar al pueblo, hoy a punto de rebelarse contra las políticas neoliberales y el acoso judicial contra el ex presidente Lula.
En Colombia, la nación con más desplazados en el mundo, van ya más de 300 líderes sociales asesinados desde comienzos del 2016, la producción y el tráfico de drogas no hacen sino aumentar, a pesar, o quizás gracias a las 9 bases militares gringas en su territorio. Aunque se ha firmado un acuerdo de paz y las Farc han dejado las armas, los tambores de la guerra no dejan de sonar.
México se ha convertido en un narco estado donde la policía el ejército y los paramilitares, (al igual que en Colombia) asesinan, desaparecen y someten al pueblo, para entregarle el país descaradamente a las corporaciones internacionales.
Por el mismo camino van Honduras, Panamá, y varios otros países de Centro América. Y ni hablar de argentina, tarifazos, represión y deuda perpetua.
En todos los países con gobiernos de derecha, los indígenas y campesinos son brutalmente atacados y desplazados para despojarlos de sus tierras ancestrales, la naturaleza sigue siendo vendida y destrozada sin piedad ni remordimiento , todo para seguir enriqueciendo a las elites oligarcas locales y a sus amos de las corporaciones extranjeras.
Es hora de despertar, nuestra lucha va más allá de politiquerías, de las eternas discusiones de los intelectuales de izquierda, y de las opiniones desgastadas de los sospechosos de siempre, nuestra pelea es por la unión de la América, por la salud de la pacha mama, por la libertad y la independencia plenas, pero sobre todo, por la supervivencia de la vida en el planeta! Y nos guste o no, querámoslo o no, a los venezolanos nos toca, en este momento histórico, estar al frente y en la vanguardia de esta lucha!