Que voces como las de Earle Herrera, Julio Escalona o Telemaco Figueroa, un trinomio de "constituyentes" de más de 500 que comenzaron a integrar un parapeto "institucional" que consagró el neototalitarismo madurista, que ahora tiene a varios de sus integrantes, como Delcy Rodríguez quien abandonó la "presidencia" de esa "omnipotente, plenipotenciaria y todopoderosa constituyente" para irse a ser subalterna de Maduro, cuando fue ella quien inicialmente rejuramentó al propio Maduro, pues queda en evidencia que semejante organismo ni siquiera funciona como relator de chismes políticos, porque de eso se encarga Diosdado Cabello en un bodrio "comunicacional", en donde amenaza a oficiales superiores y generales con un mazo, para que se coloquen firmes ante su condición de oficial subalterno retirado.
Que Earle Herrera, por ejemplo se pregunte: "¿Para qué sirve un constituyente inútil a su pueblo?"¹, o que Julio Escalona diga ante uno de los más conspicuos panegiristas del madurismo que "hay un problema de oír y sí algo tiene que hacer un gobierno es oír"², mientras Telemaco Figueroa asegure que "el poder adquisitivo tiende a disminuir para convertirse prácticamente en cero para adquirir lo básico: alimentación, salud y las cosas mínimas que (se) suelen aspirar"³, pues es evidente que al parecer los auténticos principios de la senectud que mencionaba José Ingenieros en El hombre mediocre, comienzan a conjugar el verbo y establecer una semántica y sintaxis conforme con las necesidades de la gente.
Verbigracia, Herrera, Escalona y Figueroa, aunque todavía no se desmarquen de manera abierta del madurismo, sus palabras confirman que esa "constituyente", sólo funcionó para suplantar de manera ilegítima e ilegal a la Asamblea Nacional, pero en la praxis resultó peor que la elegida en 2015 en auténticas elecciones parlamentarias, porque simplemente no ha hecho absolutamente nada. Esa "constituyente" – y entiendo que de eso pretenden desmarcarse estos "constituyentes" - solo es una bazofia de arribistas maduristas, cuyo único fin ha sido la ejecución del felatorismo político que les impongan desde Miraflores en términos de sumisión conductual y pensativa.
Es más, son tan ineptos todos los "constituyentes" y tan inútil tal "constituyente", que su actual presidente, o sea, quien le hace la "suplencia" – según palabras de Maduro - a Delcy Rodríguez, que solo atina a decir que esa prostituida conjunción política, cuando menos funcionará "un año más, pero ni siquiera menciona un artículo de la nueva "constitución", cuando la actual Carta Magna de 350 artículos fue redactada en menos de seis meses, y esta inmundicia totalitaria, dizque "supraconstitucional", todavía espera que Hermann Escarrá, el madurista que despotricaba y pedía la salida de Chávez del poder acusándolo de violador de derechos humanos⁴, - y todavía existen maduristas diciendo que ellos son "chavistas" - termine por mostrarnos la letrina jurídica con la cual piensan "sustituir" nuestra actual Constitución.
Quienes integran la "inútil constituyente", definición que ha brotado de parte de sus integrantes, están no sólo reconociendo que es un aparato burocrático que no sirve para nada, sino que también están afirmando palabras más, palabras menos, que su directiva está conformada por una enorme ignorancia política, que sólo funciona para vociferar y mantener un control partidista, porque tal cúpula, no ganaría ni la elección de un consejo comunal, y en definitiva,- como bien lo dijo una articulista- representa algo así como un fantasma de Luis Alfaro Ucero en esta parte de nuestra historia, con el agravante de tener un léxico que como lingüista podemos asegurar que no supera las 30 palabras, razón por la cual, quien controla esa "constituyente", revela que lo inútil comienza por él mismo, cuando no es capaz ni siquiera de articular el vocabulario de El Chavo del 8, es decir, es un individuo que podemos catalogarlo como un analfabeta funcional, porque su nivel de lectura es nulo.
En síntesis tenemos unos "constituyentes inútiles", una inútil "constituyente", y una directiva que además de "inútil", nos revela la vergüenza que tenemos que afrontar como país con una casta ignorante, iletrada y vacua, donde lo único que resalta es la maldad para perseguir, destruir y empobrecer a la población. A propósito de ser ciego. Quien tenga ojos que vea.
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