En este mundo de todos los días, no rige la democracia, en él gobierna el más fuerte y ese es aquel que ha acumulado y continua acumulando riqueza y poder. En ese universo no existe legitimidad en aquellas instancias que toman y ejecutan decisiones: Fondo Mundial Internacional, Banco Mundial, Organización Mundial del Comercio o Comisión Europea. Así como "clubes de reflexión": Foro Económico Mundial, Comisión Trilateral, El Club de Roma o Consejo de Relaciones Exteriores. Es todo un dispositivo dispuesto al enriquecimiento a partir de la dispersión y situación de explotación de todos aquellos que no son ellos.
En cada uno de esas entidades que representan y soportan la mayor responsabilidad financiera y comercial del orbe se planifica, acuerda y ejecuta desde la trasgresión solo aceptable en el marco de la más anti-democrática gobernabilidad. Ninguna de esas instancias se somete a contiendas electorales o contraloría de cualquier tipo por parte de la mayoría mundial, son instrumentos con libertad de acción ilimitada desde donde una banda de sujetos decide sobre la vida humana y natural en el planeta sin ningún respeto por la justicia y la dignidad.
No solo es el control financiero, mercantil y comercial, es el absoluto ejercicio del poder que también raya en la inmoralidad de sostener instituciones como el premio Nóbel de la Paz que entre otras entidades o sujetos a reconocido a: En 1954 a el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, precisamente cuando antes y después de esa fecha, sigue reinando en el mundo el más grosero y hasta criminal trato a los refugiados, sino obsérvese la política de Estados Unidos dirigida a los emigrantes mexicanos, que a la final son refugiados por razones de hambre y miseria. En 1969 se le otorga a la Organización Internacional del Trabajo y hoy es hora en que el trabajo humano continua siendo desvalorizado. Para 1977, Henry Kissinger, actor de primer rango en la agresión imperial al pueblo de Vietnam recibe su Nóbel de la Paz. En 1977 el imperio yanqui y sus principales aliados se afanaban contra los pueblos de Centroamérica, apoyan las dictaduras de sur-América, así como las agresiones de Israel a los Palestinos y resto de pueblos árabes, la guerra, violencia y hambre en el mundo Africano y precisamente en ese contexto recibe su galardón Amnistía Internacional.
Siguiendo con la lista de la desvergüenza en la entrega del Nóbel de la Paz y de la hipocresía de quienes dirigen el mundo tenemos que: Para 1978 se le entrega a Beguin, Menajem reconocido terrorista contra la comunidad Palestina desde el final de la segunda guerra mundial. En 1981 nuevamente lo recibe el al Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados y seguían llegando hombres, mujeres, niños y hasta ancianos a las fronteras del norte del hemisferio para toparse con la más cruda verdad; el maltrato y la humillación. 1994 se le entrega a Peres, Simón y Rabin, Isaac ambos lideres de Israel y connotados terroristas en los años cincuenta del siglo pasado en copamiento de la tierra Palestina. Para el año 2001 lo recibirá Kofi Annan en representación de la O.N.U., a pesar de la inoperancia de ese organismo para ayudar a resolver el problema de la asimetría integral en el mundo. Luego, para el 2002 el Presidente de Estados Unidos Jimmy Carter lo recibe, quien como máximo dirigente de esa gran potencia mundial poco hizo en pos de disminuir el hambre en su país y la violencia en el mundo. Ahora, 2007 lo reciben el ex-Vice-Presidente de Estados Unidos, Al Gore y el Grupo Intergubernamental sobre el Cambio Climático de la O.N.U., los cuales lo más que hicieron fue una muy buena recopilación y puesta en escena de las observaciones que por décadas ha venido realizando el Presidente Fidel Castro sobre el cambio climático.
Estos inmorales que dirigen al mundo son tan perversos que hasta se han dado su particular relicario para espulgar sus penas: El Nóbel de la Paz que junto a otras herramientas sirven para justificar un hacer sin hacer ante las desigualdades existente y garantizar el poder del que disfrutan. Éstas son entre otras, el impulso de grandes redes de comunicación para garantizar la in-comunicación de la mayoría mundial. Actividades como el campeonato mundial de Fútbol o las Olimpiadas Mundiales, fuentes de ingentes riquezas y especulaciones presentadas como sano entretenimiento y ejemplo de armonía universal. Organismos como las Naciones Unidas que ha lo grado mantener a las naciones del mundo desunidas La Organización Mundial de la Salud, que pareciera no haber existido nunca ante el desastre que hace rato presentamos. La UNESCO que ha esta altura no ha significado una palanca efectiva ante el desastre del proceso educativo y cultural en el mundo o el Consejo de Seguridad cuya mejor virtud esta en garantizar el desarrollo de un conflicto sea con su venia o no, sobretodo si es de parte de una gran potencia contra países menos desarrollados y de ser posible aislados con antelación. Y, como muestras del máximo cinismo cerramos con los dos más grandes adefesios del capitalismo: La empresa o propiedad privada y la Libertad de Expresión. La una, agenciándose el control absoluto de toda empresa o propiedad existente sobre la tierra, expropiando a las grandes mayorías hasta del disfrute de sus cuerpos y la otra, negándole toda posibilidad de libertad de expresión a esas mismas masas explotadas de la tierra.
Ante el dantesco cuadro descrito se impone la necesidad política, ética y cultural de gestar un pensamiento liberador de la humanidad hoy; de una crítica teórica que tenga por misión confrontar, desmitificar y desnudar los axiomas teóricos del pensamiento único que se esfuerza por imponer el imperio y sus diversos resortes para la dominación y por el otro producir una praxis revolucionaria, acción redentora frente a la estructura que posibilitan la existencia del capitalismo. Una crítica-práctica que integre la diversidad de manifestaciones de resistencia y proteja la entereza social del movimiento diverso y global existente, que en la actualidad es la maquinaria de acción, la fuerza épica más activa de lucha contra la "máquina de guerra" y el poder del capitalismo contemporáneo.
Se reclama pues, una teoría crítica de la economía y la sociedad capitalista en su actual etapa de desarrollo. Teoría para el análisis crítico y la construcción de alternativas en la fase de un capitalismo de la informática y el tele-poder; del dominio geográfico de las multinacionales; del poder que ha reestructurado el trabajo con la digitalización de la economía, en fin, del capitalismo que ha generado una nueva complejidad histórica, contradicciones y escenarios sociales. Un sistema que como ningún otro pervierte hasta los sueños de la especie humana, de cualquier criterio estético sano, así como su entorno ecológico. Nuestro tiempo necesita su Marx o un Carlos Marx colectivo de los pueblos oprimidos. Requiere de una fuerza teórico-productiva, del estudio y elaboración de propuestas para superar al capitalismo, a partir de lo esencial del marxismo y de los nuevos aportes alcanzado hasta hoy por las fuerzas contestatarias anti-capitalistas y anti-globalización. Es una solicitud a cuatro voces de abolición de la explotación del hombre por el hombre, en fin, es ni más ni menos que el redimensionamiento de la propuesta socialista hoy.
¡SOLO EL PUEBLO, SALVA AL PUEBLO!