Ahora
nos toca entender como es que la burocratización y la corrupción hicieron
mella en las bases del chavismo, y trajo como consecuencia la victoria
de los fascistas en los principales e importantes estados del país,
tanto en números de electores, como en números de habitantes, incluyendo
la importancia económica y política de estados como Carabobo (Industria),
Zulia (Petróleo), Táchira (frontera con Colombia y Zulia, Agricultura)
Miranda-Distrito Capital (Poderes Públicos), y Nueva Esparta (Turismo-Pesca).
Y cuando decimos entender hablamos de cómo desde las estructuras del
Estado: ministerios, institutos autónomos, se empezó a propagar y
a diseminar esa leucemia política, donde los blanco-rojitos (adecos
por naturaleza), primero, se empezaron a atornillar en los puestos de
dirección y coordinación para hacer y deshacer a sus antojos e intereses
particulares y grupales, segundo, arremeter, atacar, perseguir, mal
poner a los verdaderos revolucionarios, donde los blancos se comen a
los rojos, y luego viene la consolidación de su poder y medición de
fuerzas frente a los que hoy empiezan a ser excluidos del proceso que
vive Venezuela, una vez esto suceda, irían por la cabeza de Chávez
como el único que, “ellos creen”, los puede frenar y eliminar políticamente
en su feroz y voraz avance por apoderarse de la riqueza de todas y todos
los venezolanos, como lo han venido haciendo de forma silenciosa, y
establecer un gobierno de la nueva burguesía, ahora criolla, pero que
no pierde ningún parecido a la transnacional, a la pitiyanqui vende-patria,
puesto que son burguesía, clase explotadora, como tal van a actuar
en contra de los trabajadores, campesinos, estudiantes revolucionarios,
en fin del pueblo que defenderá hasta la muerte las condiciones revolucionarias
para construir el verdadero socialismo de los trabajadores, no solo
en Venezuela, si no en América Latina y el mundo.
Ya
sabemos que las instituciones del Estado están minadas de leucémicos
que siguen propagando este cáncer para seguir retrocediendo en la construcción
de la sociedad socialista que a ellos no le conviene, pues viven de
la desigualdad, se aprovechan de la pobreza, disfrutan de la riqueza
que producen los que vivimos en la miseria, y se burlan del pueblo engañándolos,
haciéndole creer que son “revolucionarios”, que las Hummers, Tahoe,
carros caros, guardaespaldas, etc., que usan es para proteger su integridad
física, “por lo importante que son para la revolución”, que los
viajes que hacen son para “exportar la revolución hacia otros países”,
que las nuevas quintas que compraron “son esfuerzo de su larga trayectoria
revolucionaria de los años 60, 70 y 80”, así son ellos vividores
de los procesos revolucionarios, por eso la claridad que debemos tener
al momento de atacar a estos falsos predicadores de la revolución,
se rebajan ante cualquier esfera de poder económico y político, en
cualquier espacio se “autonombran los mas revolucionarios”, hacen
acuerdos políticos con los adecos y los copeyanos a espaldas del pueblo,
no tienen ideología política revolucionaria y mucho menos practica
revolucionaria, solo le acompaña su oportunismo, su ambición de dinero
y poder y no creen que el pueblo pueda hacer la revolución. Claridad
para atacar y poner al descubierto al burócrata y no al proceso revolucionario,
defender hasta con la vida el proceso revolucionario y enterrar al burócrata,
jamás y nunca juntarlos, ni creer que el burócrata es parte indivisible
de la revolución, ellos “los burócratas” se aprovechan y viven
del proceso revolucionario, por eso mas nunca volverán a ser pueblo,
su nuevo entorno social y económico no se los permite, y aunque quisieran
no podrán por que el pueblo ya los conoce. El proceso revolucionario
es el camino donde la ideología revolucionaria se lleva a la práctica
revolucionaria para derrotar a la ideología burguesa y a sus seguidores.
No permitamos que este proceso revolucionario sirva de colchón para
que los burócratas (rojos-blanquitos y blancos-rojitos) vivan de las
condiciones necesarias que necesita el pueblo trabajador explotado para
construir una verdadera sociedad socialista sin patrones, ni explotadores,
ni burócratas, ni reformistas, ni vividores, ni manipuladores.
A construir la democracia obrera desde las bases, a consolidar y expandir la ideología política de la clase trabajadora y construir una sociedad socialista, para no contaminarnos de la leucemia política.
trabajadoresdelasaludunios@hotmail.com