(blanco-rojitos, rojo-blanquitos, pero nunca rojo-rojitos)

La leucemia política y el papel de los funcionarios públicos

Vaya que fue tremenda sorpresa el haber perdido la alcaldía del Distrito Metropolitano de Caracas, y mas aun cuando sabemos, muchos de los que estuvimos presente, que quien realmente hizo la campaña en el area metropolitana fue Aristóbulo Isturiz, pero bueno, tal vez esto sea parte de hacer despertar al pueblo nuevamente y radicalice aun mas el proceso de cambios y se encamine hacia el verdadero socialismo, puesto que ya las masas estaban como adormecidas, tranquilizadas, creyendo que ya la revolución esta hecha, que no hay mas nada que luchar, que solamente era cambiar a un gobernador blanco y poner a uno rojo, en pocas palabras asumir el poder del Estado y que lo demás se va dando solo, con el apoyo de Chávez y de los que lo rodean, bueno ya sabemos que no es así. 

     Ahora nos toca entender como es que la burocratización y la corrupción hicieron mella en las bases del chavismo, y trajo como consecuencia la victoria de los fascistas en los principales e importantes estados del país, tanto en números de electores, como en números de habitantes, incluyendo la importancia económica y política de estados como Carabobo (Industria), Zulia (Petróleo), Táchira (frontera con Colombia y Zulia, Agricultura) Miranda-Distrito Capital (Poderes Públicos), y Nueva Esparta (Turismo-Pesca). Y cuando decimos entender hablamos de cómo desde las estructuras del Estado: ministerios, institutos autónomos, se empezó a propagar y a diseminar esa leucemia política, donde los blanco-rojitos (adecos por naturaleza), primero, se empezaron a atornillar en los puestos de dirección y coordinación para hacer y deshacer a sus antojos e intereses particulares y grupales, segundo, arremeter, atacar, perseguir, mal poner a los verdaderos revolucionarios, donde los blancos se comen a los rojos, y luego viene la consolidación de su poder y medición de fuerzas frente a los que hoy empiezan a ser excluidos del proceso que vive Venezuela, una vez esto suceda, irían por la cabeza de Chávez como el único que, “ellos creen”, los puede frenar y eliminar políticamente en su feroz y voraz avance por apoderarse de la riqueza de todas y todos los venezolanos, como lo han venido haciendo de forma silenciosa, y establecer un gobierno de la nueva burguesía, ahora criolla, pero que no pierde ningún parecido a la transnacional, a la pitiyanqui vende-patria, puesto que son burguesía, clase explotadora, como tal van a actuar en contra de los trabajadores, campesinos, estudiantes revolucionarios, en fin del pueblo que defenderá hasta la muerte las condiciones revolucionarias para construir el verdadero socialismo de los trabajadores, no solo en Venezuela, si no en América Latina y el mundo. 

      Ya sabemos que las instituciones del Estado están minadas de leucémicos que siguen propagando este cáncer para seguir retrocediendo en la construcción de la sociedad socialista que a ellos no le conviene, pues viven de la desigualdad, se aprovechan de la pobreza, disfrutan de la riqueza que producen los que vivimos en la miseria, y se burlan del pueblo engañándolos, haciéndole creer que son “revolucionarios”, que las Hummers, Tahoe, carros caros, guardaespaldas, etc., que usan es para proteger su integridad física, “por lo importante que son para la revolución”, que los viajes que hacen son para “exportar la revolución hacia otros países”, que las nuevas quintas que compraron “son esfuerzo de su larga trayectoria revolucionaria de los años 60, 70 y 80”, así son ellos vividores de los procesos revolucionarios, por eso la claridad que debemos tener al momento de atacar a estos falsos predicadores de la revolución, se rebajan ante cualquier esfera de poder económico y político, en cualquier espacio se “autonombran los mas revolucionarios”, hacen acuerdos políticos con los adecos y los copeyanos a espaldas del pueblo, no tienen ideología política revolucionaria y mucho menos practica revolucionaria, solo le acompaña su oportunismo, su ambición de dinero y poder y no creen que el pueblo pueda hacer la revolución. Claridad para atacar y poner al descubierto al burócrata y no al proceso revolucionario, defender hasta con la vida el proceso revolucionario y enterrar al burócrata, jamás y nunca juntarlos, ni creer que el burócrata es parte indivisible de la revolución, ellos “los burócratas” se aprovechan y viven del proceso revolucionario, por eso mas nunca volverán a ser pueblo, su nuevo entorno social y económico no se los permite, y aunque quisieran no podrán por que el pueblo ya los conoce. El proceso revolucionario es el camino donde la ideología revolucionaria se lleva a la práctica revolucionaria para derrotar a la ideología burguesa y a sus seguidores. No permitamos que este proceso revolucionario sirva de colchón para que los burócratas (rojos-blanquitos y blancos-rojitos) vivan de las condiciones necesarias que necesita el pueblo trabajador explotado para construir una verdadera sociedad socialista sin patrones, ni explotadores, ni burócratas, ni reformistas, ni vividores, ni manipuladores. 

      A construir la democracia obrera desde las bases, a consolidar y expandir la ideología política de la clase trabajadora y construir una sociedad socialista, para no contaminarnos de la leucemia política.


trabajadoresdelasaludunios@hotmail.com




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