Estoy confundido amigo mío; desde el principio cuando empezó todo esto, las contradicciones se han ido agudizando, la convicción de mi formación crece llena de dudas, en deterioro de mis principios y el majarete que hoy mantengo en mi cabeza me detiene en reflexión.
Cuando empezó todo, tu falta de visión comunista me tenia dudoso, ya que venías del sector militar (es bueno recordar lo que significaba en aquel tiempo); y yo de la radicalización de la lucha del pueblo llano, desconocida porque era clandestina y ahora poco se ve. Particularmente me desarrolle en el teatro de barrio, el de la vivencia y el contenido que no era reconocido por ningún ente, y hoy por muy pocos; los encargados de hacerlo no dan con la línea del verdadero trabajo cultural, son inmediatistas, no utilizan la constancia que es la que ayudaría en la formación del individuo para transformar, y refuerzan los lineamientos que manda el imperio, ayudando para no deslastrarse de la IV, por eso se muestran patrones de conducta arcaicos en los encargados de impulsar, dejando en diez años, solo un intento empírico y la estructura sigue siendo la misma.
Estoy confundido, porque me metí en esto confiando que a medida que avanzáramos los esfuerzo se multiplicarían hacia la formación del individuo defensor de la patria el día de mañana, pues no ha sido así; las estructuras están intactas, no sé si por desconocimiento o por incapacidad, no hemos encontrado manera para apartar al descompuesto de nuestros espacios, estamos infiltrados hasta los tuétanos en las instituciones, las estructuras no terminan de cambiar, con pequeñas excepciones, no hay manera de empezar la propuesta revolucionaria, los camuflados son expertos para estar en el sitio adecuado cuando las responsabilidades se están repartiendo, siempre a pesar de los intentos ellos están ahí, haciendo cortina (termino deportivo del basquetbol) hacen morisquetas a la vista del que reparte y como se ponen camisa roja, el repartidor lo confunde con los incapaces de nosotros, pero al pasar un mes resulta un camuflado mas, metido y atrasando con su conducta nuestra revolución.
Estoy confundido, porque a pesar de todos los defectos que tenemos, me acostumbre a la disciplina y a respetar que el líder marca el camino; pero también aprendí que se discute, la dialéctica en el revolucionario es el alimento, porque en el aprendizaje revolucionario se enseña que no se persigue al hombre, se persigue la idea y creo en el comunismo, sabiendo que a pesar de las decisiones que tomas no son en algunos casos las más consecuentes, tengo mis esperanzas puestas en la revolución, porque en todo las propuestas te descubro en compromiso, en entrega; por otro lado, se nota que te esconden detalles y en un cerco preparado pensaron que nunca se rompería.
Estoy convencido que bajo tu dirección es la mejor forma de salir de este infierno en el que nos dejaron; la revolución es así, una lucha constante y a pesar de la confusión, vamos bien amigo mío, porque estamos haciendo esfuerzos; no podemos darnos el lujo de fallar, significa volver quinientos años atrás. Te pido nos consagremos con mayor intensidad a la preparación del ser, la canalla no nos perdonaría si fallamos, los enemigos tienen gente nuestra con la marca de la muerte en la frente y el pueblo tiene que saberlo para no ser sorprendido porque, PATRIA O MUERTE, VENCEREMOS Y HASTA LA VICTORIA SIEMPRE.
HAZTE CONCIENCIA.
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