A veces uno lee o escucha comentarios y opiniones que da la impresión que estamos viviendo en la época de la inquisición, aquella que condenó a Giordano Bruno a la hoguera y obligó a Galileo Galilei a retractarse sino quería correr la misma suerte por decir que la tierra giraba sobre si misma al contrario de lo que afirmaba la iglesia que esta era el centro del universo. Aun así Galileo fue condenado a pena perpetua, pero dejó para la posteridad sus palabras "EPPUR SI MUOVE" (pero se mueve), afirmando de esta manera ante los inquisidores que su teoría era cierta. 300 años después la iglesia moderna tuvo que reconocer su histórico error. Igual sucede con Cassius Clay, al que Trump quiere perdonar por haber botado su medalla olímpica y no concurrir a la guerra de Vietnam, (Dios los cría y ellos se juntan). Quienes no aceptan los avances científicos de esta época deben investigar que pasó con la isla Bermeja en el golfo de México, desaparecida "misteriosamente" .
Mi intención en escribir acerca el proyecto HAARP es crear la inquietud que los legos y científicos venezolanos deben estar informados sobre las armas de defensa de Estados Unidos creadas por la NASA y probadas en el espacio exterior donde se señala explosiones atómicas en planetas que conforman el sistema solar. Esos experimentos afectan la capa de ozono que manejados científicamente pueden causar alteraciones en la superficie terrestre como sequia, inundaciones, tsunami y movimientos telúricos, (estudiar lo revelado por la onda galileo en 1995 en la atmosfera dé Júpiter a 640 millones de Kilómetros de la atmósfera terrestre, (analizar el recorrido del Voyager) y captados por los telescopios situados en Calle Alto al sur de España y que trajo como consecuencia alteraciones climáticas).
Cada quien esta en el derecho de aceptar o no los avances científicos que se han experimentado, pero innumerables viajes espaciales van dejando atrás la anacrónicas creencia que todo es producto de lo divino. Seria bueno que investigaran todo lo referente al proyecto HAARP, antes de emitir opiniones sin fundamento.
Creerlo todo o no creer nada ambos son vicios, el primero de ignorantes y el segundo de tontos.