Debemos como venezolano destacar la valentía del pueblo de Nicaragua, cuando de manera firme denuncia las agresiones de los Gobierno de los EE.UU. Con la solidez que caracteriza al pueblo venezolano, tenemos que seguir apoyándonos en el marco de una unión profunda entre dos naciones que somos antimperialista, que somos víctimas de las agresiones de los Gobiernos de los EE.UU, no queda otra que la unidad a los fines de estar fortalecido para la lucha para vencer el bloqueo. El presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, asistió esta semana a la toma de posesión del presidente reelecto de Nicaragua Daniel Ortega y destacó el espíritu de solidaridad y hermandad entre ambas naciones para construir en América Latina el sueño de integración de Simón Bolívar.
La Revolución Sandinista es el producto de un largo recorrido de lucha del pueblo nicaragüense, que lo encabezó el Frente Sandinista de Liberación Nacional, organización que liderada por Carlos Fonseca Amador, logra interpretar las enseñanzas de Augusto Cesar Sandino, que desarrolla su lucha en un contexto nacional muy complejo, signado por el entreguismo de la oligarquía liberal conservadora y en un panorama internacional, que se expresaba a través de la expansión militar norteamericana. Así como la praxis guerrillera del héroe de las Segovia, fue transmitida a través de emblemáticos luchadores de la talla de Santos López y Ramón Raudales, el pensamiento y la visión de Augusto Cesar Sandino y Carlos Fonseca, como uno de los legados más valiosos que se hayan entregado en pro de la liberación de Nicaragua, en contra de la dictadura somocista.
Una nueva toma de posesión de Gobierno a favor de los sandinistas demuestra la vitalidad del pueblo y del gobierno nicaragüense, un pueblo heroico que se le ha plantado al imperio. Seguimos apoyándonos en el marco de una unión profunda entre dos naciones que siempre han fortalecido la lucha para vencer a los inquilinos de la Casa Blanca. Para vencer el bloqueo. Felicitó al pueblo nicaragüense por la jornada electoral "ejemplar" que otorgó la victoria a Daniel Ortega y Rosario Morillo como presidente y vicepresidenta de la nación y que le demuestran al mundo ejemplo el carácter democrático de Nicaragua.
Esta toma de posesión responde a lo dispuesto en la Constitución de ese país y representa la victoria ante los acontecimientos violentos de 2018 y el intento de golpe de Estado contra el presidente Daniel Ortega. La experiencia histórica de la revolución en Nicaragua, es una de las enseñanzas más significativas para los movimientos sociales en el mundo y en particular para la izquierda, porque se rompió con los viejos esquemas de los partidos comunistas, sentando las bases de una nueva izquierda, que logró establecer una relación dialéctica entre los instrumentos de análisis científico para una comprensión objetiva de la realidad nacional y la tradición de lucha del pueblo. Así, logró sintetizar sus esperanzas y utopías en la acción y el pensamiento de Augusto Cesar Sandino.
La alianza encabezada por el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), alcanzó más de dos millones 093 mil votos, es decir, un 75 por ciento del total de las Juntas Receptoras de Votos (JRV) escrutadas, y consolidó como el máximo dirigente del país al representante sandinista para un nuevo período constitucional. Durante su campaña electoral, Ortega manifestó su firme decisión de continuar con los proyectos sociales, además de otorgar mayores inversiones en áreas como la educación, salud, energía eléctrica, pensiones y transporte. En este sentido, el presidente Nicolás Maduro destacó que este país centroamericano no ha sucumbido a su lucha contra los intereses del imperialismo norteamericano.