La reconfiguración del nuevo orden mundial, en los últimos años hemos venido enfrentando el advenimiento de un nuevo orden mundial y de una transición. En el análisis de la coyuntura encontramos que existe un declive de la hegemonía estadounidense, que inició en la última década y se puede ir acelerando en los próximos años; potencias emergentes cuentan con la capacidad para convertirse en potencia a futuro. Cuál estructura tendría un próximo orden mundial, en el horizonte de nuevas potencias y del desplazamiento de poderes formales a poderes fácticos y de entidades estatales, existen diversas aproximaciones que reconocen ciertos elementos de análisis con los que se puede evaluar el papel hegemónico de Estados Unidos, en declive. Así como visualizar una transición para los próximos años; donde el factor militar, el diplomático, el económico, el tecnológico y el cultural. Serán determinantes.
Vamos a la cofrontacion por el nuevo orden mundial. Las recientes declaraciones del Presidente Chino y del Presidente de Rusia, Vladímir Putin quien ha asegurado en el marco del foro de la Unión Económica Euroasiática (UEE), formada por Armenia, Bielorrusia, Kirguistán, Kazajistán y Rusia, que los pronósticos sombríos que vaticinaban el colapso de la economía del pueblo ruso, ya no se hará realidad.
"Las cifras hablan por sí mismas. Pese a los acontecimientos de crisis a gran escala en la economía mundial y el comercio, los riesgos geopolíticos y el factor de incertidumbre, el PIB conjunto de la UEE en 2022 se contrajo solo un 1,6 %. Pero muchos expertos desde el extranjero auguraban un escenario completamente diferente, escenario de colapso. Nada de esto sucede, no sucedió y es obvio que ya no sucederá".
El presidente chino, Xi Jinping, recibió en Pekín al primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, a quien informo que China está dispuesta a "seguir ofreciendo un firme apoyo mutuo a la Federación de Rusia". China apoyará los "intereses fundamentales" de Rusia, afirmó el presidente chino, Xi Jinping, durante una reunión en Pekín con el primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin. China y Rusia han reforzado sus relaciones diplomáticas y comerciales en la última década, una tendencia que se ha acelerado desde que la Federación de Rusia lanzó su ofensiva contra la exrepública soviética.
Desde que se inició la guerra en Ucrania por la defensa de la soberanía del pueblo ruso, el Gobierno Chino, no había emitido una declaración de guerra tan contundente como la emitida recientemente en favor del pueblo ruso. China se ha declarado a favor de Moscú en el conflicto y ha llamado al respeto de la soberanía de los Estados. El primer ministro ruso, Mijaíl Mishustin, llegó el pasado lunes a China y participó en un foro económico en Shanghái, antes de viajar a la capital para reunirse con su homólogo Li Qiang y con el presidente Xi Jinping.
Se trata del responsable ruso de más alto rango que visita el gigante asiático, desde que empezó la guerra en Ucrania, por la defensa de la soberanía Rusa. China está dispuesta a que ambos países continúen "apoyándose mutuamente de manera firme en temas que afecten a los intereses fundamentales de cada uno", le dijo el presidente Xi Jinping a Mishustin, según la agencia oficial Xinhua. Xi Jinping también abogó por el "fortalecimiento de la coordinación en los escenarios multilaterales como Naciones Unidas, la Organización de Cooperación de Shanghái, los BRICS y el G20".
El mandatario ruso señaló que la escena internacional se está viendo sacudida por "cambios realmente fundamentales", si bien el papel económico de la UEE sigue creciendo, al tiempo que "la mayoría" de los países del mundo coincide con las aspiraciones de Moscú de construir "una arquitectura más justa".
